❛Tienes una sonrisa tan brillante,
esas perlas me hacen quedar ciego❜
Donde Rodrigo le pide su número de celular al empleado de una cafetería y ambos tienen una cita.
ADVERTENCIA: NO PLANEO OFENDER A NADIE ESCRIBIENDO ESTO, SI CARRE ME PIDE...
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—¿Y que hago si no nos aceptan? —Ivan le nego con la cabeza mientras le acomodaba el cuello de la camisa a Rodrigo por última vez después de que este desacomodara el planchado luego de no parar de tocar el bordecillo.
—Pues no te van a aceptar si llegas luciendo como un mono, deja de moverte de una vez —regaño —. Tu tranquilo, que va a salir bien. Se tu mismo.
Le dio unos cuantos golpecitos en sus hombros.
Rodrigo se miro al espejo. Tenía una camisa de botones azul claro y unos pantalones amarillos, Zack le dijo que no era nada formal pero tampoco era lo contrarío, así que se dijo a si mismo que lo mejor seria procurar dar una buena imagen. No le gustaba caer en estereotipos y aunque Zack era americano por nacer en américa, sus padres eran coreanos por nacimiento, no sabía si tenían costumbres a cerca de como tratar a los demás.
No tenía de que preocuparse si todo salía bien. Solo mantener los buenos modales, estar en calma y no decir nada que pudiera tener doble sentido.
—¿Ser yo mismo? Soy un pelotudo gato, cualquier cosas que sale de mi boca es una bomba —recalco mientras sus dedos palmeaban la comisura de su boca.
Ivan asintió mientras lo alejaba porque se acerco demasiado.
—Ya, ya. Entonces cuida lo que digas —dio como consejo rodeándolo y yendo hasta el estante del armario para tomar el frasco de cristal lleno de colonia —. Voltea —ordeno para que Rodri cumpliera. Con su petición realizada, comenzó a dar unos cuantos disparos de colonia; uno en el lado derecho del cuello, otro en el izquierdo y el último en sus muñecas para que frotara el liquido entre ellas.
Pero Rodrigo, necio como solía hacerlo empezó a balbucear y tratar de quitarle el frasco para ponerse más hasta que Ivan se lo arrebato.
—¡Para boludo! Estas perdiendo la paciencia y yo también —informo dándole un pequeño golpe suave en el rostro —. Mira la hora, mejor sal para allá de una vez.
Spreen señalo la puerta mientras lo acompañaba hasta esta, se detuvo a su espalda de golpe cuando Rodrigo se detuvo en el pequeño espejo a un lado del recibidor para acomodar su cabello otra vez.
Se quito el aro de la nariz al igual que los pendientes. Era el mismo, pero con una pequeña diferencia. Parecía el Rodri del bachillerato que se esforzaba por darle una buena impresión a los compañeros. Se llevo el premio a payaso de la clase en esos años, una broma que se esforzó por aceptar sin ningún dolor de por medio.
Ivan lo empujó hacía afuera mientras cerraba la puerta del depto a las espaldas de ambos.
...
Se quedo estático un momento mientras que veía la puerta de la casa y las luces iluminadas que se veían por el exterior de la calle. Regresa la vista hacía atrás viendo a Ivan levantando su pulgar en señal de aprobación desde el interior del uber para darle ánimos. Luego junto sus dedos con su pulgar en picada diciendo "Con bolas".