C A P I T U L O 11

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Se escuchaba, estaba seguro, no tenía ninguna duda, era demasiado fuerte como para no escucharlo, el corazón de JooHeon golpeaba tan duro y tan intenso que le dolía el pecho, el sonido resonando al golpear las paredes de su anatomía y sus oídos, era imposible que no se escuchara.

Sus uñas se clavaron dolorosas contra sus palmas.

Él acababa de decirle a ChangKyun que tenía buen trasero. ¡¿Qué diablos?!

La boca de JooHeon se movió, pero no salió oración alguna, solo ruidos, intentos torpes de palabras.

La expresión del menor era entre desconcierto, sorpresa, shock. Y JooHeon quería morir, quería un jodido ataque al corazón, quería que cayera un puto meteorito y lo fulminara, quería un cataclismo estallando en ese instante, o una abducción alien.

"Y-Yo, n-no quise d-decir eso, el- ah, t-tu trasero- ¡no! yo, Cha-ChangKyun". Las palabras incompletas y totalmente en desorden se amontonaban en su cerebro para salir, pero ninguna parecía preparada ni correcta. El hecho de que el menor lo siguiera mirando sin decir nada le estaba haciendo sudar como una bestia. "Yo- ".

JooHeon guardo silencio al instante cuando el menor alzo la mano, haciéndole una señal para que simplemente parara, parara sus inestables y torpes explicaciones. El de hoyuelos trago duro.

La expresión de ChangKyun parecía más calmada, el desconcierto seguía en sus ojos, pero estos ya no estaban tan amplios, ahora era más como de sorpresa y un poco de diversión.

"JooHeon". ChangKyun sonrió levemente de lado, su mirada con un atisbo de humor. "¿Yo te gusto?".

El aliento se le atoro en la garganta, JooHeon miro el suelo, y sus dedos temblaron mientras deslizo sus anteojos por el arco de su nariz. ¿Cuánto tiempo había pensado que podría durar esto? ¿Cuánto tiempo creyó que podría estar cerca de ChangKyun sin delatarse a si mismo? Había sido estúpido pensar que lograría disimularlo, frente a sus amigos era algo, pero frente a ChangKyun... él no había tenido ninguna oportunidad.

El castaño froto su cuello, sus orejas brillaban en un rojo vivo y no podía articular, si antes su cerebro había estallado en una tormenta, esto era el ojo del huracán, todo aterradoramente quieto, silencioso en un modo desastroso, no había palabras, no había nada.

"Muy bien, todos a los vestidores. ¡Ya!". Grito WonHo, trayendo la atención de ambos chicos solo por unos segundos.

Uno a uno de los chicos fue saliendo de la cancha hacia los vestidores, ambos se quedaron solos.

"¿Y bien?". Pregunto Chang, JooHeon lo miro a los ojos al fin, esos ojos aburridos y misteriosos que siempre lo derribaban ahora lo veían atento, su pulso golpeaba dolorosamente, pero por lo visto el menor realmente esperaba una respuesta.

JooHeon trago saliva, y tensando sus labios en una línea incomoda resaltando sus hoyuelos, asintió.

ChangKyun soltó un suspiro, entre divertido e incrédulo, alzando una ceja.

"Pensé que todos ustedes me odiaban".

JooHeon miro el suelo. "Ellos lo hacen".

El menor esbozó una breve risa. "¿O sea que mientras tus amigos me odian, tu estas enamorado de mí?".

Sudor corría por su cuello, asintió de nuevo

"Y ellos también creen que me odias". JooHeon no respondió a eso, porque no había sido una pregunta, y aun que lo fuera, su silencio solo lo confirmaba.

Se sentía como un niño pequeño que había sido atrapado con las manos en la masa, alguien que había tratado de mantener una ridícula e inútil fachada y fuese atrapado en el acto.

Nobody Likes ChangKyun [JooKyun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora