Lujuria, amor y desenfreno.

Capitulo 1

*NARRA ANA*

Hoy mi novia Verónica y yo iremos a una cena con Yolanda Andrade y Montserrat Oliver ya que nos piensan entrevistar para su programa de televisión ''Las hijas de la madre tierra'', la verdad yo no las conozco muy bien pero sus programas que he visto se ven que son a toda madre. Vero y yo iremos como amigas ya que nadie sabe que tenemos nuestros quereres, no es por mi sino por ella que no quiere que el mundo se entere de lo nuestro, en fin no creo que nuestra relación llegue lejos, pero bueno es hora de ir a la casa de Yolanda.

Salimos de la casa y nos fuimos en mi camioneta directo a la  casa de Yolanda. Llegamos a las 19:30 horas, bajamos de la camioneta y tocamos el timbre esperando que nos abrieran.

-Yolanda: (Abre la puerta con una inmensa sonrisa en su rostro) ¡Hola que puntuales!. Pasen por favor, están en su casa.

Cuando Yolanda abrió la puerta en verdad quede en shock, se veía tan hermosa, en verdad puedo decir que me encantó con tan sola verla por primera vez en persona.

Entramos y nos dirigimos hacia su comedor para cenar, donde ya se encontraba Montserrat. Terminamos de cenar y platicamos un rato sobre nuestras vidas ahí en el comedor, paso un tiempo y nos dirigimos hacía la sala para estar más cómodas y ahora si hablar sobre todo lo necesario para la entrevista. Yola y Montse nos estaban diciendo como seria la entrevista, yo hacia que las escuchaba pero en verdad no podía dejar de fijar la mirada en Yolanda, es que como dije en un principio su belleza me dejo impactada. 

Terminamos de platicar, Vero y yo nos despedimos de ellas y nos subimos a la camioneta.

-¡Todo estuvo fabuloso, en verdad me la pase muy bien!, me cayeron de maravilla las chavas y en especial Yolanda.

-Verónica: (Un poco enojada y con tono desagradable) ¡Uy si!, te agrado bastante la tal Yolanda que no dejabas de mirarla, hasta la baba se te caía.

- Verónica, obvio no la dejaba de ver porque estaba concentrada en lo que decía acerca de la entrevista.

-Verónica: (Subiendo el tono) ¡Ana por favor! Aleguas se veía que te llamó la atención pero no quiero discutir, ya arranca y llévame a mi casa que hoy no pienso quedarme contigo.

Encendí la camioneta y fui camino a llevar a Vero a su casa, todo el camino las dos íbamos en silencio, obvio la comprendo que estuvo mal pero es que Yolanda despertó algo inmenso en mi con tan solo apenas haberla conocido. 

Hola a todxs, espero y les agrade la historia.