Tengo miedo.
Siento que el corazón se me va a salir del pecho por lo rápido que late.
Mis pies duelen mientras corro, pero aún así, no me detengo.
Estoy descalza, las ramas y piedras del angosto camino me lastiman la planta de los pies.
Mi vestido y maquillaje están hechos un desastre.
Pero no me importa.
Solo sigo corriendo, tratando de llegar lo más rápido posible mientras me abro paso por el sendero rodeado de bosque que cruzo.
<<Solo debo llegar>> Pienso mientras siento mis piernas arder.
Lágrimas adornan mi cara, y solo puedo pensar:
<<Ella debe estar bien>>
<<Debo llegar pronto >>
<<Mi hermana está viva>>
La voz de Sara resuena en mi cabeza haciendo que cada vez me cueste más respirar.
Cuando me llamó hace unos instantes se escuchaba aterrada.
<<Si es que fue ella>>
<< ¡Sigue! >>
Continúo corriendo con el miedo latente en cada paso y maldigo a los que construyeron tan lejos la mansión que se abre paso en mi campo de visión.
<<Falta poco>>
<<Solo tiene dieciséis, no se puede ir ahora.>>
Salto cuando las raíces de un árbol intentan detenerme y sigo corriendo mientras me adentro en el patio de la gran casa que tengo enfrente.
<<Nada>>
Todo está en silencio y eso empeora mis nervios.
Giro y me voy hasta el final de la construcción.
<<Deben estar en alguna parte>>
Hay una luz encendida al final y puedo ver el humo proviniendo de allí.
Una pequeña casa de una sola habitación que sirve para guardar herramientas es lo que consigo al seguir el destello de luz que proviene de esta.
<<Fuego>>
<<Debe estar allí>>
<<No llegué tarde>>
El humo que empieza a contaminar el ambiente me hace toser.
<<Nada demasiado grave >> trato de reconfortarme.
Llego y la puerta se atasca cuando la trato de abrir.
-¡Sara!- Llamo a mi hermana menor, pero no obtengo respuesta, el humo sigue- estoy aquí ¡Sara!
Sigo tratando de abrir la puerta hasta que la misma cede y entro agitada buscando el rostro de mi hermana.
La luz ilumina la habitación pero el humo dificulta mi visión, por fuera la habitación parece pequeña pero es bastante grande.
Mis pies tocan algo húmedo y al bajar la mirada casi vómito.
Sangre.
Sigo el pequeño rastro sintiendo miedo.
El pequeño bombillo que iluminaba el lugar explota y todo queda a oscuras solo con la tenue luz de la luna que se cuela por las ventanas de la construcción, siento los pedazos de vidrio arañando mi piel; vuelvo a toser, el humo no está ayudando mucho.
Intento no caer, pero ya no puedo, me asfixio, mis pulmones me aprietan; intento salir y es en una esquina donde el humo se hace más intenso que la encuentro.
Mi hermana.
Está tirada en el piso con su vestido amarillo pálido rasgado y quemado en partes, su cabello negro corto hasta los hombros está revuelto, su cabeza tiene un golpe en la sien en donde su sangre baja, sus brazos presentan unos pocos moratones y quemaduras, su estómago tiene un agujero por donde se introdujo una bala y es dónde está perdiendo más sangre, sus ojos grises ya no me miran y rompo en llanto cargado de gritos desesperados con mis manos manchadas de su sangre cuando la tomo para salir de allí.
Sus ojos no miran nada.
<<Llegué tarde >>
Mi hermana está muerta.
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Certeza
Random[En edición- Pausada] ¿Has tenido pesadillas? Me imagino que sí. Pero ¿qué pasa si se repiten casi todas las noches a la misma hora? Las tuyas, no son iguales a las mías. Las mías me dicen cosas. Y lo comprobé cuando mi familia y yo nos mudamos a...