𝐄𝐍𝐓𝐑𝐄𝐆𝐀 𝐓𝐔 𝐂𝐎𝐑𝐀𝐙𝐎𝐍 - eren j.

⚔️ - OO1

-¿Qué es eso?

-Oigan, miren eso. -Un soldado señaló hacia la muralla.

Aquello llamó la atención de la sargento Hange, quien se acercó hacia su tropa junto a Moblit.

-Es un titán, ¿qué hace dentro de la muralla? Es imposible.

-¿Qué hacemos, sargento? -Preguntó Berner.

-Pero, ¿qué? -La mujer lo miró horrorizada.

Ese titán puede estar ahí por casualidad, pero entonces.. significa que-

Una mano tomó de su hombro, haciéndola exaltar y mirar hacia atrás, observando al pastor Nick agitado, como si hubiera corrido un maratón.

-Pastor Nick.

-¡No permitas que a este titán le dé la luz del sol!

-¿Qué?

...

-Por el momento, solo podremos cubrir al titán con sábanas. -Informó un soldado al comandante. -Comenzaremos la repartición en cuanto se ponga el sol.

-Bien, entendido. -Respondió el rubio.

-Señor. -Le llamó alguien más. -¿Qué significa todo esto? Nunca me imaginé que hubiera titanes en esta área.

-Nadie se lo hubiera imaginado, algunos lo sabían y otros no teníamos ni idea.

...

-Bueno, es hora de que nos des una explicación. -Habló la sargento. -¿Qué hace ahí ese titán? Dime. -Miró al pastor quien miraba desde lo alto del muro. -¿Por qué está escondido dentro de la muralla y también quisiera preguntarte, ¿por qué el culto lo mantiene en secreto?

-Estoy muy ocupado. -Respondió levantándose y sacudiendose. -Destrozaron mi iglesia y mis feligreses murieron ¡Todo esto es su culpa! Tendrán que responder por los daños. Suficiente, déjenme bajar de aquí.

-Como gustes. -La mujer lo tomó por el cuello de la camisa que llevaba debajo de su túnica y lo llevó a la orilla de la muralla, amenazando con soltarlo. -¿Te parece bajar de esta forma?

-S-sargento.

-¡Atrás! -Ordenó. -No juegues conmigo, maldito. ¿Sabes por qué los soldados luchamos diariamente entregando nuestras vidas? Para recuperar la libertad que los titanes nos robaron, esa es la razón por la que siempre nos arriesgamos. Escucha, no es un favor, si no una orden ¡Responde! Si no lo haces, buscaré a otro que lo haga, en todo caso, dudo que con tu vida baste para pagar tus pecados.

-¡N-no, sueltame!

-¿Seguro, eso es lo que quieres?

-Mátame.

-Perfecto, hasta nunca.

-¡Sargento, Hange! -Le llamó Moblit.

-Espero que con mi muerte entiendas que.. nosotros también damos la vida por nuestra misión. -Apretó sus dientes. -Sueltame ¡Yo cumpliré con mi misión! -Abrió sus brazos, esperando a que esta lo dejara caer. -Dios, ¿Estoy contigo?

Hange lo tomó con más fuerza y lo lanzó hacia el otro lado, haciendo que el hombre cayera sobre la muralla. Rió y se sentó en el borde con sus pies colgando.

-Era una broma, dime, pastor Nick, ¿Todas las murallas.. están hechas de titanes? -Los cristales de sus lentes brillaron. Suspiró. -Ya había olvidado esta situación, creo que no me había sentido así desde la primera vez que salí de las murallas. Tengo miedo..