Nueva Vida en Ufo Baby. (Kanata y Tu)

Capitulo 3

Narro Yo
Ya nos habíamos ido de nuestra casa, cuando supimos en que lugar estaríamos fuimos a la escuela en que asistiríamos y nos escribimos, también compramos nuestros uniformes, luego de ahí nos comenzamos a dirigir a donde nos quedaríamos, después de un rato de caminar Miyu se detuvo por lo que yo igual lo hice, hizo un puchero para luego mirar a su alrededor hasta enfocarse en un lugar.

Miyu: ¿Por qué tendrá que pasar esto solamente a nosotras?.

Cuando escuché lo que dijo suspire para luego acercarme, agarre su maleta lo cual la sorprendió.

Yo:      Llevaré tu maleta hasta que lleguemos.
Miyu: Pero está pesada, y tu ya estás llevando tu maleta y bolso.
Yo:      No importa, además sirve como entrenamiento.
Miyu: Gracias.

Asentí para luego comenzar a caminar, Miyu saco el papel en donde nuestros padres nos anotaron el camino de donde nos quedaríamos desde cierta parte, seguí a Miyu quien me guiaba ya que ella tenía el papel.

Miyu: Mmm, seguimos recto desde aquí, ...así que una mansión en la colina, tendrá muchas habitaciones, puede que hasta me pierda dentro de la mansión y Rei tendría que buscarme, no me extrañaría, viviremos como unas princesas y nos mezclaremos con la alta sociedad, puede que hasta les perdone a nuestros padres.
Yo:     Es bueno que me incluyas en tus fantasías Miyu.
Miyu: Eh, jejeje, somos hermanas, es normal, pero ¿cómo que fantasías?.
Yo:      Mmm.

Mire las escaleras por lo cual Miyu hizo lo mismo, al verlas se fijó el papel unas cuantas veces para luego agarrar su maleta con una mano así dejándome una mano libre, tomo con su otra mano mi mano libre y subimos las escaleras, al llegar a la cima vimos el templo.

Miyu: No es la mansión Saionji es el templo Saionji, no han tomado el pelo.

Al decir eso Miyu se arrodilló en el suelo mientras yo le daba palmadas en la espalda de consuelo, aunque luego dejé de hacerlo y fijé mi vista en un Señor el cual era Hokushō Saionji.

Saionji: ¿Qué están haciendo hijas?.

Después de que dijo eso hice que Miyu se levantará para luego las dos inclinarnos.

Yo:          Buenas tardes, usted debe ser el Señor Saionji, ¿no?, yo soy Rei Kozuki y ella es Miyu Kozuki.
Saionji: Si, así es, adelante, entren.

Cuando dijo eso el entro seguido de nosotras.

Saionji: Bienvenidas, Rei, Miyu, me alegra saber que han podido encontrar mi casa, no de si recuerdan pero antes venían por aquí, cuando empezaron a andar.
Miyu:      Ah, si, vaya.

El Señor Saionji se paró enfrente de unas puertas y las abrió mostrando una habitación.

Saionji: Bueno, Miyu, mira este es tu cuarto.

Cuando dijo eso Miyu entro y dejo su maleta.

Miyu:     Bien, como pesaba la bolsa, no quiero saber cómo habrá sido el peso todo el tiempo que la llevaste Rei junto a las tuyas.
Yo:          (Para mi no sería nada pero para otros si).
Saionji: Rei sígueme, tu cuarto está por aquí.
Yo:           Eh, si.

Seguí al Señor Saionji hasta que abrió las puertas de otra habitación, cuando la mire se me hizo conocida.

Saionji: Después de que aprendieron a andar la única que vino más tiempo fuiste tú Rei, hasta que tuviste creo que unos seis años, en este cuarto te quedabas a veces, otras te quedabas con Kanata en la suya.
Yo:          Si, me acuerdo más o menos.
Saionji: Oh, entonces te acuerdas de Kanata.
Yo:           Si, si lo recuerdo.
Saionji: Los dos eran muy unidos.
Yo:           Si, bueno, voy a ver todo alrededor si no le molesta.
Saionji: Deacuerdo.