Capítulo 06 - Camino Marcial

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Han pasado dos meses desde que descendí a este nuevo mundo el cual está siendo regida por el maná, mi nueva madre pasaba cada día mimándome, jugando conmigo y tratando de hacer que diga algunas palabras como: mamá.

Por otro lado, mi nuevo padre aunque no estaba tan apegado a mi como mi madre, también era muy cariñoso conmigo, cuando sirve al Conde siempre tendría ese aire de refinación y elegancia que un mayordomo tendría pero cuando estamos solo los tres, entonces se mostraría como es, una persona amable, cariñosa y atenta.

En este transcurso del tiempo me la había pasado meditando y tratando de sentir la energía de este mundo el cual era el maná. Aunque había pasado más de un mes meditando, sentía que esa energía no venía a mí, según la Biblioteca Universal, el maná era una de las energías relativamente más sencillas de poder captar o sentir, aunque en los bajos mundos solo uno entre cinco mil personas podría tener la gracia de poder hacer uso de ello.

Al mismo tiempo, aunque era una energía algo fácil de poder sentir, era al mismo tiempo una energía que tenía muchos conceptos y extensiones. Al poder controlar el maná, ya podrías ser considerado un portador del maná, pero solo serias considerado un mago al controlar una de las muchas energías elementales que vienen del maná. Entre ellas pueden estar la energía elemental de fuego, agua, tierra, rayo, viento, entre muchas más...

"Aunque también trae dificultades..."

La magia podía llegar a ser muy fuerte hablando del poder de destrucción pero los magos siempre llegan a ser muy débiles físicamente o en combate cuerpo a cuerpo y aunque trataran de entrenar su cuerpo para mantener un buen físico y no quedarse atrás en los enfrentamientos cara a cara, era muy difícil por la naturaleza del maná el cual haría que su portador no pueda ser fuerte físicamente. Era una restricción de la propia energía en simples palabras.

"¿Debo o no practicar la magia...?"

Tal vez el hecho de que aún no haya podido sentir el maná, era porque ese pensamiento de la restricción me preocupaba.

Ahora que lo pienso... mi cuerpo debería apenas ser el de un bebé de dos meses pero, ahora me encontraba en mi cuna sentado en una posición de meditación, mis piernas regordetes así como mis brazos estaban lleno de vigor. Simplemente parecía que mi cuerpo se había desarrollado más rápido.

"Es así entonces..."

Un pensamiento llegó a mi mente, eso era cuando había ejecutado el Arte de Consumación, cuando lo estudié y pude comprender el arte, no sabia que este mundo estaba siendo regido por el maná pero aun así, pude hacer uso de ese arte que debía ser solo ejecutado mediante el Qi.

A no ser que...

"¿Podrías hacer uso de cualquier energía si aún no controlabas una?"

Mis conjeturas podrían ser correctas, cuando alguien ya controlaba una energía y por suerte encontraba el método de cómo controlar otra energía, casi nunca tendrían éxito en ejercer ambas energías. Así que siempre se pensó que no podrías hacer uso de más energías, pero en mi caso, tengo un conocimiento superior a cualquier persona, cuando nací en este mundo también había descendido con el conocimiento de mi anterior vida, pude hacer uso de una energía ajena a este lugar.

Esta información podría hacer que el sentido de poder cambiara drásticamente, los gobernantes harían a sus hijos ejercer alguna energía en especifico siempre y cuando aun no controle alguna.

El Arte de Consumación era un arte de naturaleza marcial regida por el Qi. Ejecutar este arte aumentaría mi condición física, la pureza de mi sangre, el poder de mi alma y muchos beneficios más, pero a cambio, no podría hacer uso del maná... ¿o sí?

"¿Debo entrenarme para ser un artista marcial?"

Podría aspirar en este mundo a ser un luchador o un caballero pero el alcance de poder del arte era limitado. Si consumiera a un mago de nivel 1, me podría dar muchos beneficios pero luego mi cuerpo no mejoraría solo con magos de nivel 1, luego deberían ser de nivel 2 y así sucesivamente... me pediría más y más.

"El maná y el Qi... ¿podré controlar ambas energías?" Me cuestioné. En este mundo regido por el maná, tendría más fuerza la magia que el Qi, si solo entreno con técnicas marciales, en algún momento llegaré a mi limite. Además, nadie nunca había podido controlar más de una energía o tal vez, si existiera una persona que pudiera, lo más posible es que lo mantendría en secreto...

Era el Príncipe Sabio en mi anterior vida, ¿si no puedo resolver este problema, merezco realmente ese título?

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Tres meses pasaron rápidamente, mi cuerpo se había desarrollado rápido y ya sentía que podía caminar muy pronto.

En este momento estaba siendo cargado en los brazos de mi madre mientras trataba de hacerme dormir, la noche había descendido y mi padre también ya había vuelto.

"Roslyn, ¿Jayles no está creciendo más rápido de lo normal? He visto a otros niños de cinco meses de nacido pero no se comparan ni a la mitad de Jayles." Mi padre que se estaba cambiando de atuendo, pregunta repentinamente, aunque lo entiendo, soy anormal.

Mi madre por otro lado dijo tranquilamente: "Yo creo que no es un problema, debe ser porque lo estoy alimentando bien, además, ¿no es bueno que crezca rápido? Lady Vanessa ya decidió que Jayles será el mayordomo personal de la pequeña Elizabeth."

Así que ese es el nombre de esa mocosa...

Mi madre al parecer se sentía desanimada al recordar eso, mi padre al verla de esa manera, se le acerca cariñosamente para decirle:

"Se lo que te preocupa pero no podía negarme después de todo, al menos me encargaré de enseñarle adecuadamente a Jayles todo de la nobleza."

Dándole un profundo beso, al parecer había calmado algo de la preocupación de mi madre pero aun sentía que estaba nerviosa.

"Jayles ya se durmió, lo dejaré en su cuna ya vuelvo." Y así fui dejado tranquilamente en mi cuna mientras me hacia el dormido hasta que vi que mi madre regresó a su habitación y apagaron las luces.

"Es hora."

Haciendo uso de mis gorditos brazos y apoyándome, pude ponerme en una posición de meditación.

"Debo sentir el maná, la energía habita en todas partes, simplemente debo concentrarme en sentirla..."

Había hecho este proceso cada noche y cuando finalmente pensé que había logrado sentir el maná... resultó que fue solo el Qi que previamente ya había cultivado cuando aún era un feto.

Ese fragmento de energía de Qi ya recorría mi cuerpo desde hace mucho, solo que no la había sentido aún. El pedazo de Qi del tamaño de una uña, estaba recorriendo mi cuerpo, ahora que la había podido sentir, era capaz de recorrer el camino marcial.

El camino marcial estaba dividido en varios niveles y etapas que consistía en lo siguiente:

Camino Marcial Mortal: Qi Físico Marcial, Qi Espíritu Marcial, Qi Transmutación Marcial, Qi Umbral Marcial. Esos eran los niveles de la primera etapa del camino marcial, luego había otra etapa: Camino Marcial Divino: Qi Marcial Divino, Qi Físico Divino, Qi Alma Divino. Así mismo existían más etapas pero por ahora no hay que pensar en ello.

Si no puedo sentir el maná, solo me queda seguir con la única opción a la mano. Recorrer el Camino Marcial.

El Descenso del Príncipe -PGP2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora