Ya por la mañana Sally fue a visitar a su novio. El solo estaba escuchando como siempre su música. No noto que la puerta fue abierta por el menor.
Él se acercó para abrazar al mayor, se retiró un poco la prótesis y besarlo haciendo que se asustara por el contacto tan repentino.
-Ho eres tú Sally ¿pasa algo?- El menor negó con la cabeza
Algo tímido solo se acomodó entre los brazos del mayor para así poder quitarse la prótesis y estar más cómodo
-¿Hoy estás cariñoso?- rio bajo al ver la expresión de su pareja
Al final decidió en hablar -¿Te acuerdas de lo que propusiste hace días?- asintió algo confundido -Te dije que necesitaba tiempo, pero no creo poder hacerlo me da mucha pena y no creo saber nada de eso tampoco-
El mayor al ver eso solo le beso en la frente -no es necesario que tengas miedo o pena . Tengo una idea esta noche deja la ventana de tu habitación abierta ¿si?-
El solo asintió sin saber el porqué.
Al caer la noche y ya preparado para acostarse se acordó de lo que le dijo Larry y dejó la ventana abierta aún sin saber que tenía que hacer. Se acostó y cubrió con la sábana. Cuando ya se durmió alguien entró por su ventana.
Sigilosamente se acercó a Sally y se acostó sin despertar al contrario. Lo abrazó mientras besaba el cachete del menor escuchando pequeños quejidos. Empezó a acariciar la barriga del contrario por encima de la ropa.
Noto que se empezaba a despertar y lo miraba aún más confuso que antes cuando le dijo la propuesta con un susurro -¿que haces Larry?-
-Quitarte la pena haciéndolo por ti- le bajo ligeramente el pantalón del pijama. Intento oponerse pero al notar las caricias del mayor no pudo evitar soltar leves jadeos
-Llegaremos solo hasta donde te sientas cómodo- El menor solo asintió con leves jadeos. No perdió la oportunidad de bajar el boxer del menor y así acariciar su miembro lentamente esperando a que reaccionara. Al ver que no se oponía solo le seguía frotando.
Mientras el solo podía jadear y de vez en cuando sacar leves gemidos. Hasta que al final termino corriendose en la mano de su pareja
-¿Quieres ir a más mi bebe?- El negó con la cabeza triste
-N-no puedo hacer lo que tú deseas- se coloco bien el bóxer y pantalón para cubrir su rostro para que el contrario no notara las lágrimas. Se sentía terrible por no poder llegar más allá
El mayor le abrazó -no tienes que estar mal iremos al siguiente paso cuando te sientas listo. Hasta entonces podemos seguir con las caricias- le beso la frente y lo acomodo para que volviera a dormir.
Sally se quedó profundamente dormido casi al instante. El mayor le costó más dormir por quedarse pensando en lo que acababa de ver. A su pareja llorando por no cumplir las expectativas de él. Miro por última vez a su pareja antes de quedarse dormido repitiendo una y otra vez esas preguntas.