•E S P E R A N Z A• [Clementine y tu]

7. V E N G A N Z A

— ¡Hey! pequeña rata polizona — una mujer golpeaba la celda de Madison, sin dejarla despertar en paz.

La pequeña se levantó del suelo, demostrando su obvio dolor de cabeza maldiciendo internamente a quien golpeaba los barrotes, pero cuando su vista logró por fin enfocar se le revolvió el estómago. La mujer sonrió mientras el rosto molesto de Madison cambiaba a uno de miedo/pánico. pareciera que recién se dio cuenta donde estaba.

—bien, solo vengo a entregarte una información — esto la atención de Madison — se acerca una horda hacia aquí.

En menos de un segundo la pequeña se acercó bruscamente a los barrotes, negando una y otra vez. Mientras la mujer solamente se alejaba, la respiración de la pequeña se comenzó a agitar, la voz de Violet fue lo que la distrajo. Pero esto no duró mucho, pronto se comenzaron a escuchar los disparos.

En las mazmorras aquel sonido se intensificaba, no era nada insoportable pero Madison no era capaz de mantener la compostura, cubrió sus oídos y gritaba con todas sus fuerzas, intentando evitar el exterior. Claramente los mayores intentaban calmar a la pequeña tanto como podían pero cualquier intento era absolutamente inútil la pequeña no se calmó hasta el último disparo, cayendo exhausta en el suelo.

Durante la noche Lilly intentó sacar información y a pesar de amenazas e intentar apelar a las emociones no obtuvo grandes avances. Lo último que vio antes de caminar a la salida fue la celda de Madison, ordenando a su acompañante llevarla a la cabina cuando despierte. Preocupando completamente a Vi.

Cuando la noche se hizo presente la sangre comenzó a correr por la cubierta del barco, entre risas burlonas se perdían los gritos de dolor por parte de Madison. Dorian, una de los soldados era quien disfrutaba todo el show, se aprovechó de que la pequeña tenía sus manos completamente inmovilizadas.

Un disparo llamó la atención de la mujer, sonriendo al ver que el hombre estaba fumando, el quitó el cigarro y sin pensarlo lo apagó entre el cuello y el hombro de Madison. Su grito y maldiciones fueron escuchados por el pequeño grupo que se dirigía a su rescate.

— no se si esto sea suficiente, atraes las catástrofes, no entiendo por que Lilly simplemente no te lanza por la borda.

Gracias a aquella palabras Madison no pudo evitar recordar a todos los que cayeron por... "por mi culpa"

"Cuando Pitt ya sabía que era su hora, usó sus ultimas palabras para pedirle a Javi que cuidara de mí..."

"...o cuando no pude ayudar a esa devastada mujer y en su lugar ella entregó su posesión das preciada con tal de cuidarla..."

"...o cuando de cobarde dejé a Valen siendo que me había ayudado múltiples veces con tal de tener tiempo para escapar..."

"o... Robin... volver a verla en las mazmorras hoy a sido lo único bueno de volver, no está muerta... no está-"