Caos: Cero

Celebración de Bienvenida

Desperté con los primeros rayos del sol, Robin aun dormía plácidamente, me tome un momento para observarlo, su cuerpo era similar al de Luna, garras al final de los dedos, una cola, extremidades similares a las de un animal, las diferencias más notables es que era más... animal, el pelaje que lo recubría era mucho más denso y la forma de su cabeza era más felina que humana. Tras ese vistazo, y siguiendo las pautas de entrenamiento que Segis nos dejo, me puse a practicar el control de mi poder, me senté con las piernas cruzadas, cerré los ojos y empecé primero alejando de mi toda partícula mágica de fuego, hacia frio, mucho frio pero era soportable, luego empecé con las de tierra y sentí como si una fuerza tirara de mi hacia arriba, alejándome escasos centímetros de la cama, flotando, luego las de agua, sigo sin acostumbrarme a este punto, todo se sentía tan seco como el medio día en el desierto, pero el frio me envolvía por la falta de magia de fuego, la siguiente era el aire, ahora eso era cuanto me envolvía, este debía hacerlo con sumo cuidado, no debía alejarlas todas si no dejar un flujo lo más pequeño posible, lo suficiente para seguir teniendo oxigeno, me mantuve así un tiempo, no podría decir cuanto ya que en ese estado hasta eso es difuso, quien sabe cuando podría mantenerme así, pero entonces algo me golpeo.

-AAAAAH.- El susto de mi vida, estaba acostumbrado a que Luna me hiciera alguna que otra novatada pero ya me había acostumbrado, al no estar ella lo ultimo que esperaba era un golpe en la cara, cuando me calme vi que lo que me golpeo era una almohada, gire la cabeza y vi a Robin sentado en la cama con la mayor cara de sorpresa que jamás había visto.- ¡¿QUE COJONES TE PASA?!

-¡¿QUE COJONES TE PASA A TI?! ¡¿Por qué lo primero que veo al despertar es una gran esfera negra en la cama donde debería estar mi compañero de cuarto?!

-¡ESTABA MEDITANDO!

-...

-...

-¡ESA NO ES UNA EXPLICACION PARA NADA!

-¿A no?

-...- Sinceramente creo que se esta planteando cortarme la cabeza.- Mira no tenemos tiempo para esto, hay que ir a la presentación de los alumnos.

-Pues apresura que yo ya estoy listo.

Salimos de nuestra habitación y nos dirigimos al patio principal, al llegar uno de los profesores nos llamo la atención y nos llevo a la primera fila, al lado nuestro estaban otros 4 demi-humanos y Luna, quien me sonrió cuando me vio sentarme, entonces comenzó la ceremonia, y Gandor salió a hablar.

-Estudiantes de la Real Academia de Magia, os recibo en este nuevo año con alegría, algunos nos conocemos ya pero para los primerizos me presento, soy el director de esta escuela, Gandor y me complace decir que este año va a marcar historia, el reino humano a estado enemistado con el de los demi-humanos por décadas y hoy, en esta academia estamos dando el primer paso en contra de esto.- El director hace una señal y unos profesores piden a los demi-humanos detrás de el, Luna y yo quedamos solos en la primera fila.- Por primera vez en su historia, esta honorable escuela acoge entre sus muros estudiantes demi-humanos, con esto las cuatro grandes razas de nuestro mundo se juntaran de manera pacifica por primera vez.- Suenan vítores y aplausos, así como algún abucheo entre el publico, Gandor alza las manos y el silencio se hace presente.- Por si esto fuera poco, este año se nos unen los herederos de la leyenda, los únicos pupilos del héroe que salvo a nuestro mundo del desastre en varias ocasiones, por favor, Luna y Arlet acompañarme al escenario como los discípulos del Héroe Segismundo.- Nos miramos y subimos a la vez, juntos frente a Gandor, no había un atril ni ninguna clase de micrófono, el se nos acerco y nos susurro.- Espero de vosotros grandes cosas.- Y nos dio la mano mientras el publico aplaudía y celebraba.

Al acabar, los demi-humanos y nosotros fuimos llevados al despacho del director, donde el nos dijo que alguien quería vernos, primero entraron los demi-humanos mientras Luna y yo nos quedamos esperando a la entrada, cuando salieron sus rostros variaban entre el miedo, el asco y el odio más absoluto, Robin me miro y solo negó con la mirada y se fue, también me fije en unos collares que llevaban ahora al cuello.

-Arlet, Luna, por favor pasar.- Gandor nos abrió la puerta y una persona con ropa elegante nos recibió con una sonrisa.

-Hohohooooo, ¿Así que estas son las grandes promesas de Segis? Me han contado sobre vosotros, y debo admitir, estoy impresionado.- Hubo un momento de silencio en el que Luna y yo intentábamos procesar lo que estaba pasando.- Disculpar, dejar que me presente adecuadamente, soy el Rey de los Humanos Lancelot de Adana.