Destinados

Venganza

Eran las 3am la fiesta terminaba, todos se despedían e iban para sus casas.

El único sin compañía era Charly, pues había decidido estar solo, dejar atrás sus fiestas, sus "chimbas", aunque ya no estuviese Yeimmy para ver ese cambio, el se sentía bien haciéndolo por el mismo, desde aquel sueño casi real con su mamá había cambiado desde dentro.

llegaba a su casa, parqueo el carro y buscaba las llaves para abrir, cuando se dio cuenta que en el suelo había un papel, se agacho para recogerlo, las letras eran bastante pequeñas, así que tuvo que acercarlo cada vez más a su rostro, las letras comenzaban a distorsionarse, se sentía mareado, así que decidió abrir la puerta con velocidad para entrar, pero antes de que pudiese hacer algo más cayo, tendido al suelo.

Dos hombres con capucha se acercaron a recogerlo, uno tomándolo por los hombros y el otro de los pies, llego una van de color verde, les abrieron la puerta corrediza y  lo lanzaron dentro, uno de los hombres se subió a conducir y el otro iba atrás con Charly inconsciente

Buscaron su celular de los bolsillos con brusquedad, al encontrarlo lo apagaron y lo guardaron ellos.

La van recorrió un camino rústico, por dos horas, al llegar le cubrieron el rostro a Charly con una bolsa de tela, lo entraron a una finca un poco lujosa, lo sentaron en una silla, amarrandole manos y pies en la parte de atrás, le quitaron la bolsa y le amordazaron la boca.

Entro al cuarto un hombre no muy alto, ni muy rudo, pero si armado, cabello claro y bigote.

-Dejenme solo grito dando orden a los colaboradores

Ellos sin decir más, salieron dejándolo con charly.

El hombre saco el arma de su cinturón dónde estaba guardada, la tomo en su mano y con impulso golpeo el rostro de Charly con el cañón de revolver, este golpe lo hizo despertar y volver en si, de su nariz comenzó a salir sangre.

-Buenos días Charlysito ¿Pensabas que me había olvidado de vos traidor?

Charly abrió los ojos con asombro y corria su cuerpo hacia atrás de la silla con la respiración agitada.

El hombre le retiró la mordaza de la boca para que le respondiera.

-Carechimba, vos me la vas a pagar, vos me quitaste a mi mamá huevón

El secuestrador era Lucio, si, el mismo que disparó el arma que mató a Ligia.

-Yo no hice nada lo hiciste vos por no ser varón y pagar por tus cuentas, no, decidiste meter a toda tu familia, pero ya llegó el momento de que pagues, dijo Lucio cargando el arma.

Le apunto en la frente.

-Ultimas palabras cara e muñeco

-Que sos una gallina que no podés enfrentarme solo, que tenés que amarrarme acá para poder pelarme, cobarde

-No mijo, lo que pasa es que no me voy a cargar más muertos que no seas vos, porque preferiste esconderte debajo de las nahuas de la mamita y que muriera antes de recibir tu el balazo

-Mirame carechimba eso no fue así, y vos me vas a pagar la muerte de mi mamá.

Lucio sin más preámbulos disparó el arma.

Charly quedó pálido, pues con agilidad había alcanzado a agachar la cabeza, estuvo muy cerca de que esa bala atravesará su cabeza.

En la puerta del cuarto, se escuchó alguien molesto tocando la puerta.

-Te salvaste princesa dijo Lucio mirándolo mal y guardando el arma, para ir a abrir la puerta

-Cual es la chimbada acá, porque escuché un disparo, ¿Mis órdenes no fueron claras? Primero le sacamos un buen billete a la familia y luego ay si no lo quebramos, no quiero errores en esta vuelta Lucío

-Todo bien patrón, solo era un sustico para el hombre, no era más

-Más le vale

Charly reconoció la voz

-Don Edgar Grito

El lo escucho y entro

-Buenas buenas, Charly, de mi te acordás vea pues, perro faldero pero para traicionar a tu tío si no te acordaste de nadie huevón, vas a pagar, recordá que lealtad con lealtad se paga, pero pasa lo mismo con la traición

Don Edgar dió la vuelta para salir

-Ya sabes Lucio todavía no me lo quebras, quedas advertido.

-Te salvaste princeso, dijo Lucio volviendo a amordazarle la boca y poniéndole la bolsa en la cabeza.

Salió del cuarto y lo dejo con llave.

-Patron, ¿Quiere que llame ya a la familia para la extorsión? Pregunto Lucio

-No, mañana lo hacemos, dejemos que lo extrañen un poquito, váyase más bien a dormir, dijo Don Edgar

-como ordene patrón

Todo se fueron a descansar, pero el único que no podía era Charly.

No podía dejar de pensar en la muerte de su mamá, daba todo por salir de ese cuarto y dispararle cien veces a Lucio. Se  había olvidado del perdón y su cambio en ese momento, solo quería vengarse, pues su madre no debía de morir así, ella era la única que no se metía en los negocios y fue la que pago los platos rotos.

Su ira se convertía en lágrimas, pues no podía hacer más lo habían dejado bien amarrado y cada vez que intentaba safarse se lastimaba, ya tenía sangre en sus muñecas y en sus tobillos por la fuerza del intento de escape.
(...)

Yeimmy en puerto rico ya estaba durmiendo, dormía en una habitación sola, en casa de Jack, pero con la privacidad que deseaba.

Estaba profunda, y soñando

-Hola Mi amor ¿cuando llegaste? Le preguntaba Yeimmy a Erick quien había llegado a Puerto Rico

-Hola, ma, hoy

-Pero que pasa porque tenés esa carita

Erick explotaba en llanto, Yeimmy lo abrazaba sin entender que pasaba ni como ayudarlo, sentía desesperación, pues por más que preguntaba Erick no decía nada.

Yeimmy despertó agitada, con el corazón en la mano. Sin dudarlo ni un momento tomo su celular y llamo a Erick sin importar la hora.

Erick contesto entre dormido.

-Má, ¿Estás bien?, Que pasa, es muy tarde

-Mi amor, acabe de tener un sueño horrible, vos estás bien

-Si má, yo estoy muy bien

-Gracias a Dios mi cielo, perdón, ya dejó que descanses, prométeme que te vas a cuidar mucho y que cualquier cosa rara que pase me llamas

-Si ma, te lo prometo descansa, te amo

-Yo a ti.

Yeimmy colgó la llamada, pero no le fue tan fácil conciliar el sueño de nuevo, sentía sentir de ella en su intuición que algo no andaba bien, o que algo estaba por pasar.