KIM SEOKJIN (LIBRO 1)

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Cuando Jungkook entró en la carretera principal, Seokjin se sentó un poco más erguido cuando el hormigón dio paso a la grava. Pasaron un gran cartel de madera que decía Rancho Belt Buckle, y él estaba sonriendo.

Grandes montañas configuraban el telón de fondo para el lugar más Hermoso que Seokjin había visto nunca. La tierra era verde y exuberante, árboles y espacio abierto por lo que el ojo podía ver. No era nada como lo que estaba acostumbrado en California. Los caballos y el ganado en movimiento, pastando en la tierra. Se veía como una postal. 

― Este fue el orgullo y la alegría de William. La propiedad es de veinte mil hectáreas y se extiende justo enfrente de las montañas de San Juan. Levantamos algunas cabezas de ganado y criamos caballos, pero el dinero viene de los toros. William era un campeón de rodeo. ― Jungkook dijo, y Seokjin pudo oír el orgullo en cada una de sus palabras. Este lugar era muy importante para el hombre. 

― Y es por eso el nombre del rancho? ― Preguntó Seokjin. Él preguntó por el nombre, porque no había preguntado. 

― Él fue capaz de comprar este terreno con el dinero que ganó desde todas las hebillas de cinturón que ganó. Dijo que el nombre se ajustaba. ― Explicó Jungkook. 

― Lo hace. ― Seokjin asintió. ― ¿Sabes cuándo llegarán los otros? ― Le preguntó, cambiando de tema. 

Él sólo tenía la intención de quedarse en el rancho durante una semana. No tenía más tiempo de vacaciones que eso. Normalmente tendría que haber avisado antes, pero explicó que se trataba de una emergencia familiar y su jefe le dio un permiso especial. Descubrir que William había muerto era algo para lo que él no estaba preparado. Y enterarse de que tenía cuatro hermanastros fue aún más chocante.

Mantuvo sus pensamientos para sí mismo, sin embargo. 

― Todos ustedes recibieron la misma información, dinero y un pasaje de avión. Estoy esperando que los otros hombres lleguen en los próximos días. ― Dijo Jungkook. 

― No es demasiado tarde? Quiero decir… No deberían ser notificados que William ha muerto? ― Preguntó Seokjin. 

― Trent Weston, el ejecutor, todavía tienen que leer el testamento a Todos ustedes. Es importante que los cinco estén aquí. Habrá una gran cantidad de… eh… ― Hizo una pausa como si tratara de encontrar las palabras adecuadas. ― Discutir. 

Doblaron en una esquina en el camino de tierra, y una casa de estilo Estancia se acercó. Jungkook sacó el camión hacia adelante, se detuvo y volvió La ignición. Era todo lo que Seokjin pensó que sería y más. Saltó fuera del vehículo, estiró la espalda y aspiró el aire fresco. Estaba un poco mareado, casi borracho. 

― Tranquilo ahí, chico de ciudad. ― Jungkook parpadeó, uniéndose a Seokjin. ― No estás acostumbrado al aire de aquí. No existe la contaminación. ― Seokjin se rió y juntos caminaron hacia la casa. 

Seokjin se acercó al porche y esperó a Jungkook para asumir el liderazgo. Esta casa era más de Jungkook que de él. El hombre mayor abrió la puerta y dio un paso atrás, lo que permitió a Seokjin seguir adelante. El interior era tan rústico y elegante como el exterior. Grandes, muebles de cuero tapizados lo saludaron y fotografías se alineaban en las paredes, tirando a Seokjin más cerca. 

― Uno de los vaqueros, Kim Taehyung, tomó las fotos. Él es un buen chico con un ojo para el arte. Vive aquí en el rancho, en el cobertizo. Estoy seguro de que lo conocerás pronto. ― Dijo Jungkook detrás de él. 

― Él es muy talentoso. ― seokjin murmuró. 

― Te voy a enseñar una de las habitaciones. Puedes relajarte y deshacer la maleta. ― Jungkook empezó a caminar hacia las escaleras y seokjin lo siguió. ― No dudes en mirar a tu alrededor, si lo deseas. Cuándo sea hora de comer, escucharás a la señora Hunt. ― Se rió y sonrió a seokjin. El sonido era ronco y real. seokjin esperaba permanecer el tiempo suficiente para escucharlo más.