༊ 𝟘 𝟚

520 75 6
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El ambiente sumergido en tensión, si tomarás una tijera podrías cortar sin demorar el denso aire que era casi nulo en aquella sala

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El ambiente sumergido en tensión, si tomarás una tijera podrías cortar sin demorar el denso aire que era casi nulo en aquella sala.

—Entonces, ¿no puede colaborar con nuestra raza si no hay un matrimonio de por medio? ¿es eso lo que me está diciendo?

—Así es.

Jay, él ministro de relaciones exteriores de las hadas suspiraba cansado, los vampiros si que eran todo un caso.

Habían llegado a un acuerdo que cambiaría la manera en que los seres de Ilionis se relacionaban, al fin dos razas de seres se tomarían la mano para colaborar en algo, pero que sorpresa se dieron los responsables de las hadas en Yainam, el reino de los vampiros.

No se podia proseguir con la colaboración, la tensión estaba en su punto máximo, las ansias e incredulidad al tope, "¿cómo es que los vampiros son tan retrógradas?" 

Ya se sabía que eran muy apegados a sus tradiciones, pero, ¿hasta que extremo?
¿Iban a arriesgar todo solo por seguir sus costumbres?

Ambas razas necesitan con urgencia unirse para ir a la guerra, era más que obvio que los humanos eran demasiados. La cantidad de humanos que iría a la batalla podría perjudicar en los planes de las hadas.

Claro, ambas razas que eran más antiguas que la de los humanos sabían que la guerra se ganaba con una buena estrategia, pero tampoco tenían la libertad y el lujo de probar suerte si de números se trataba.

Otro gran punto a favor de los humanos eran sus herramientas y equipo, como ya lo venían planeando desde años atrás, se prepararon con tener muchos más recursos que otras razas, además recibían la ayuda "discreta" de los elfos.

—Lo entiendo, me comunicaré con mi reino para continuar con las conversaciones.

Jay ya cansado se alista para partir.

𝐵𝓇𝒾𝓁𝓁𝒶𝓈 𝓉𝒶𝓃 𝓁𝒾𝓃𝒹𝑜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora