En un mundo lleno de magia, las Hadas y los Vampiros tienen que unir sus fuerzas en contra de la maldad, pero nadie preparará a las dos naciones para la guerra, matrimonios políticos y desapariciones forzadas.
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➽ HISTORIA INS...
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Ya habían pasado dos días desde que llegaron al bosque, tenían en total 3 días desaparecidos, muchos pudieran creer que padecían de hambre, estaban heridos y simplemente estaban en una situación horrenda, pero en realidad era todo lo contrario.
Gracias a Jake, la naturaleza les proveía de comida y los árboles les daban agua limpia del subsuelo, sus heridas estaban sanando aunque Jake todavía sufría de dolores intensos en una de sus alas, pero descubrió que el denso maná de las noches lo ayudaba a curarse más rápido. Sunghoon por su lado se miraba con menos golpes, se veía completamente sano en el exterior, pero se quejaba constantemente del dolor en el abdomen, supuso que le faltaba descanso.
Además, ambos de verdad disfrutaban de la compañía del otro, hacían bromas, reían, se contaban sus preocupaciones y se animaban cuando se sentían tristes o ansiosos.
Sunghoon descubrio que las hadas son mucho más fuertes y enojonas de lo que creía ya que los estereotipos decían que eran frágiles y sumisas. El vampiro como cualquier otro ser de Ilionis se vio atraído a Jake, era encantador a sus ojos, siempre preocupándose por él y bromeando, por momentos olvidaba la situación en la que se encontraban, la guerra, su desaparición y que era el heredero de una nación. Olvidaba sus responsabilidades y todo lo que le estresaba, solo era un chico más en Ilionis disfrutando de su tiempo libre, riendo, bromeando y deleitándose con la vista de un lindo ser.
En cambio Jake entendía que en la vida todo tiene sus significados, tal vez ahora no los encontramos pero más adelante comprenderíamos porque ocurrían ciertas cosas. Intentaba disfrutar la compañía de Sunghoon lo más que pudiera, le fascinaba estar con él, incluso si solo lo observaba dormir, era pacifico estar a su lado.
Los vampiros eran muchisimo más fuertes de lo que creyó, Sunghoon fue golpeado directamente por las bombas y el impacto lo hizo viajar una distancia mucho más larga, pero ya estaba completamente sano en el exterior, salía a buscar comida y vigilaba el área aún con el golpe en el abdomen.
Trato de respirar todo el aire limpio del bosque lo más que pudiera porque llegando a la muralla tendría que oler a cadavers en descomposición de nuevo, tan sólo pensarlo le daban ganas de vomitar.
