My Heart Is Yours, But You Are Mine ✧◝SunKi◜✧

•12•

Divago en el tema una y otra vez.

¿Quién demonios me está mandando esos mensajes?

Tengo suficiente con la vida universitaria que llevo ahora como para que me estén rompiendo las pelotas con amenazas sobre mi vida amorosa.

Tengo tres opciones.

Uno: Contárselo a Sunoo para encontrar una solución.

Dos: Mencionarle al respecto a JungWon para que me ayude a buscar al o a los culpables.

Tres: Hacer todo por mi cuenta y preocuparme todos los días con la posibilidad de que puedan hacerle daño a Sunoo.

Sinceramente, la opción que tiene mejor pinta es la segunda.

JungWon es mi mejor amigo, y él no está implicado en el tema de los mensajes.

Estoy seguro que me ayudará.

Es por eso que ahora mismo me encuentro fuera de su casa.

Con mi dedo a punto de tocar el timbre.

Pero la puerta se abre antes de siquiera llamar a ella.

—R-Riki—.

Dijo mi mejor amigo al darse cuenta de mi presencia.

Su voz se escuchaba nerviosa, y no lo entendí hasta que Jay se asomó por su espalda.

—Hola Ni-ki—.

¿Era por eso?

¿Acaso éstos dos están saliendo?

La sonrisa de JungWon fue algo incómoda.

Lo conozco demasiado bien como para no apostar por lo que sea que tengan estos dos.

—Hola Jay Hyung, que sorpresa verte en casa de Yang—.

Apreté los labios para no reír.

—¿JungWonnie no te contó sobre nosotros?—.

El ruido de una bocina nos hizo mirar hacia la calle de en frente.

—¡Vamos Jay!—.

Mi semblante cambió a uno más serio.

¿Por qué mierda tengo que toparme con SungHoon en todos lados?

En un auto de color blanco brillante, estaban SungHoon y HeeSeung Hyung.

Supongo que vinieron a buscar a Jay Hyung.

Pero que mala suerte tengo.

—Nos vemos Ni-ki, Y Wonnie, vendré a verte mañana—.