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El ojo derecho de SeokJin tenía un muy notable tic y sentía como en cualquier momento el interior de su mejilla comenzaría a sangrar de tanto que la mordía con sus filosos dientes.  

—Que bien que Jisoo comenzó a hacer nuevos amigos—Habló Hoseok con felicidad.

—Que aprenda a elegir a sus nuevos amigos—El mayor dijo con asco y chasqueó su lengua—Kim Namjoon, la elección más mierda del mundo.

El menor estaba a punto de responderle, pero el pelinegro ya se encontraba caminando hacia su salón.

Hoseok cruzó sus brazos en su pecho y quiso sonreír o reír, pero debía contenerse.

Mejor iría a sus clases y dejaría que su amigo se enojara como un tonto. Luego se reiría de él en otro momento.

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—Eres muy agradable Namjoon—Jisoo le sonrió en grande al moreno.

El nombrado acarició la cabellera oscura de la chica más bajita y solamente sonrió con pura sorna.

—También eres muy agradable y bonita Jisoo—Relamió sus labios—Sabes, creo que deberíamos hablar mucho más.

— ¡Me gusta la idea!—Dio un saltito— ¿En el descanso?

—Claro. Ven, déjame acompañarte hasta tu salón—Namjoon agarró la mochila de la menor sin preguntar y se encaminó junto con ella por los pasillos.

Una vez ambos adolescentes llegaron a su destino, el moreno abrió la puerta, dejando que la pelinegra pasara.

—Nos veremos luego linda—Acarició su mejilla y le entregó la mochila.

— ¡Adiós Nam! ¡Suerte en tus clases!—Jisoo agitó su manito y fue hacia su asiento dando trotecitos.

Con alegría dejó sus cosas encima de la banca y luego observó a SeokJin, quien tenía sus brazos cruzados en su pecho, con la mirada completamente perdida.

—Uh, buenos días Jinnie—Le dirigió la primera en toda la mañana.

—Hiciste nuevos amigos por lo que veo—Arqueó su ceja derecha—Y es Namjoon.

—Uh, ¡Si!—Respondió alegre—Hablamos muy poquito en estos días que no estuviste aquí y... ¡Hoy tuvimos una charla muy larga y divertida! ¡Es agradable!

SeokJin quiso reír con amargura. Si supiera la realidad de esa fachada de amabilidad.

—Ah, que bien—Chasqueó su lengua simplemente.

Jisoo abrió aún más sus ojitos y dirigió sus manitos hacia las mejillas de Jin, apretándolas.

— ¿Estás enojado conmigo Jinnie?—Preguntó sin romper ningún tipo de contacto.

El contrario tragó saliva y suspiró.

—No, ¿Por qué lo estaría?

—Uh... es que... ayer en la noche no parecías estar muy contento. ¡Me alegra que ahora si lo estés!—Se alejó del mayor y le sonrió.

SeokJin rascó su nuca y solamente se encogió de hombros, sin responderle a la jovencita con trencitas.

Lo único que hizo en toda la clase fue dormirse arriba de la banca para dejar de pensar en lo que sus ojos vieron hace unos minutos antes.

Y también se la pasó conectado miradas con una sonrojada Min Jisoo que simplemente le sonreía dulcemente.

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Dulce Inocencia [Jinsoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora