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Sábado.

—Si, ajá. Si te escuché Joohyun—Yoongi hablaba entre dientes con el móvil posado en su oreja derecha.

Se arrepentía de haber atendido. Apenas vio el nombre de su hermana mayor, tuvo que ignorarlo.

Pero conocía perfectamente a Joohyun y si no le atendía pues no dudaría en venir a la casa para saber si Jisoo estaba bien.

—Ella ahora está durmiendo. Si—Hizo una pausa—Si, le está yendo bien en la escuela—Rodó los ojos—Joohyun... debo colgarte. Tengo que ir a levantarla ya que es un poco tarde. Si, ajá—Bufó por lo bajo—Como sea, nos vemos luego. Ten un lindo día.

Dejó el celular en la mesa y frotó su rostro. Haría un berrinche como todo niño pequeño.

Escuchó la risita de su pareja y luego como dos brazos rodeaban su espalda, formando un reconfortante abrazo.

—No te estreses. Hoy no trabajas, debes relajarte un poco—Jennie le sonrió y se colocó en puntitas para después dejar un besito en la mejilla del mayor.

Yoongi se dio la vuelta luego de soltar una risa nasal y acunó las mejillas de la castaña con sus manos antes de dejar un besito esquimal.

—A veces mi hermana logra agotar la poca paciencia que tengo—Murmuró grave, entre suspiros.

—No te preocupes, solamente quiere saber si Jisoo está bien y demás—También habló en el mismo tono, acariciando la cabellera oscura de su pareja.

—Lo sé, pero es excesivo. Debería darse cuenta que Jisoo ya no es una pequeña de ocho años. Tiene dieciocho y debe empezar a hacer las cosas por si sola—Finalizó Yoongi.

La dulce pareja escuchó una risa sin gracia, teniendo la imagen de SeokJin entrando a la cocina para ir directo hacia el refrigerador.

—Oh, no creí que te levantarías por tu propia cuenta—Kim bromeó una vez se separó del pelinegro.

—Un maldito bicho volador estuvo molestándome toda la maldita noche. No pude dormir bien—Masculló un poco irritado— ¿Hay leche?

—Si, está más en la punta—Jennie comentó y se acercó al menor— ¿Sabes si Jisoo ya se levantó, Jin?

—No tendría que porqué saberlo—Yoongi habló por encima, captando la atención de los menores.

SeokJin empujó el interior de su mejilla con la lengua y solo rodó los ojos, sin responderle a la castaña. Total, su amigo lo hizo por él.

—Bien...—Murmuró Jennie— ¿Podrías ir a levantarla Jin? El desayuno ya estará listo.

—Iré yo—Yoongi no dejó que alguien hablara y opinara sobre aquello. Solamente salió de la cocina, dirigiéndose escaleras arriba.

Jennie miró de reojo a Jin, quien solo observaba la puerta por donde se había ido a su amigo, y le extendió la caja de leche.

—Ve a sentarte Jin, ya te serviré el desayuno—La mayor murmuró y también se alejó de ahí.

SeokJin simplemente mordió el interior de su mejilla y tronó cada uno de sus dedos.

Su amigo a veces era un idiota.

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—Que bonito que hoy no trabajes Yonnie—Jisoo comentó con sus ojitos achinados debido a su gran sonrisa.

El nombrado también sonrió y dejó palmaditas en la cabellera oscura de su hermana menor.

—De hecho, con Jennie pensamos una gran idea—Comenzó hablando Yoongi, despertando la curiosidad de los adolescentes— ¿Vieron en las noticias que hace unos días se abrió un parque de diversiones cerca de acá?

Dulce Inocencia [Jinsoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora