Capitulo IX

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Cuando amanecio, al abrir mis ojos lo primero que vi fue un angel, literalmente un angel de pelo blanco y piel palida que me estaba abrazando mientras dormia, estaba durmiendo junto a mi y se veia absurdamente adorable.

Me levante de la cama y fui a darme una ducha, me lave los dientes y me vesti, dibuje una sonrisa traviesa en mi rostro y fui a despertar a Miguel.

--Psss ey, ya es de dia-- empeze a moverlo de lado a lado suavemente hasta que se desperto.

--¿Que pasa?-- su voz estaba algo ronca y estaba estrujando su cara, todavia tenia un poco de sueño asi que decidi ayudarlo dandole un pequeño empujonsito que lo tumbo de la cama.

--¡Oye! Que te pasa--

--¿No te acuerdas? Te dije que hoy nos vamos de paseo asi que preparate rapido ya casi vamos a salir--

--Esta bien-- hizo un puchero y se metio al baño con mi toalla.

Mientras Miguel se bañaba fui a ver como iba mi hermana, ella ya estaba lista, tenia puesta una falda corta y una blusa color blanco, en el calzado tenia puestos unos converse, no habia notado lo mucho que resaltaban sus dotes, estaba mas desarrollada que yo, no podia creerlo.

Ella dijo que me esperaria abajo asi busque algo de ropa para Miguel en la habitacion de Joshua, le quedaba gigante pero es todo lo que pude hacer, lo hize saltar por la ventana para que no se dieran cuenta de que estaba en mi habitacion y cuando mi Elizabeth y yo salimos nos encontramos con el.

--Hola Miguel-- fingi que no lo habia visto hoy

--¿Hola?-- el parecia un poco confundido.

--Ummm ¿y quien es?-- la voz traviesa de mi hermana no se hizo esperar.

--Es un buen amigo mio, Elizabeth te presento a Miguel, Miguel ella es Elizabeth, es mi hermana--

--Mucho gusto Miguel-- ella le dio la mano y nos hizo miraditas mordiendose el labio inferior, yo la mate con los ojos y no hizo mas que reirse.

--Disculpala, el aire extrangero todavia no a salido de su sistema--

Partimos hacia la casa de Cloe, cuando llegamos tocamos la puerta y quien termino abriendo fue Cecill, automaticamente el aire se volvio pesado, senti un escalofrio terrible que me paralizo, a mi hermana le paso lo mismo y asi continuo hasta que aparecio Cloe delante de nosotros y el ambiente se rompio.

--Hola, como estan todos--

--Estamos bien Cloe--

--¿Y ella quien es?-- cloe me pregunto por mi hermana, no se conocian hasta ese momento.

--Ella es Elizabeth, mi hermana--

Elizabeth estaba mirando a Cloe de pies a cabeza y yo solo pense no, no puede ser sierto, a eso Cloe dice.

--No mencionaste que tu hermana luciera como una supermodelo--

--Si gabriela, no mencionaste que tenias amigas como esta--

Las dos se quedaron viendose por un rato dejandome completamente de lado y ante esa situacion mire a Cloe algo molesta y le dije.

--¿Y vamos a entrar o nos quedaremos aqui todo el dia?--

--Claro que van a entrar-- ella se hizo a un lado y nos dejo el paso.

Estando dentro de la casa nos sentamos  en el sofa, Cloe y Cecill uno al lado del otro, Miguel y yo de la misma manera y Elizabeth estaba en medio, entre Cloe y yo.

--¿Y a que se debe tu visita Gabriela?-- la sonrisa picara y voz burlona de este estupido inepto son las cosas mas irritantes del planeta, mire a Cloe y mientras señalaba a Cecill.

--¿Por que demonios estaba en la escuela?--

--Ah ¿este idiota? Se colo ese dia--

--¿Como demonios es eso posible?-- pense que Cloe seria mas responsable que yo pero al parece me equivoque en eso.

--Tranquilizate gabriela, ven vamos a la cocina, busquemos algo de comer y te cuento ¿ok?--

--Al llegar a la cocina cruzo los brazos y le exijo una explicación--

--Escucha Gabriela, los poderes de Cecill estan despertando de nuevo, se colo en la escuela haciendole un lavado de cerebro a la profesora--

--¡¿Pero que demonios?! Estas diciendo que--

--No, no, aun no recuerda nada pero puede usar levemente sus poderes, se hace mas fuerte cada dia--

--Esto es malo, es muy malo Cloe--

--¿No Gabriela, esta bajo control te lo juro, estuve investigando sobre esos dos, uno representa la cruda impureza y el otro representa la inocencia pura, cecill se hace fuerte todos los dias, pero Miguel no lo hace ¿o me equivoco?--

--Nunca e tenido problemas con Miguel, de hecho haciendo de lado que su cabello y ojos cambiaron de color es un chico normal--

--Si pero eso no es precisamente algo bueno, escucha, Cecill es un demonio lo se por que estuve analizando en lenguaje grabado en la tabla con la cual lo invocamos, Miguel por otra parte es un angel, no evoluciona tan rapido como Cecill pero lo hara y cuando lo haga sera en grande--

--Los demas deben saber esto--

--Lo haran, voy a escribirles mas tarde pero por lo pronto quiero conocer a tu hermana--

Ella saco unas bolsas de chucherias y las llevo a la mesa.

--Dios Cloe, nunca cambias ¿verdad?--

Pasamos un rato compartiendo, Miguel no paraba de mirar a Cecill de forma extraña, Cecill hacia lo mismo y Cloe y Elizabeth parecian estar disfrutando el momento, mi hermana me dio una señal para que la dejara sola, yo me negue absolutamente pero insistio y me enoje tanto que termine saliendo de la casa.

Me sente afuera en una pequeña galeria con escalones, a eso llega Cecill y se sienta al lado mio.

--Sabes si no fueras tan celosa ya tendrias novio--

--¿De que hablas estupido?--

--¿No quieres que Cloe te quite a tu hermanita?--

--No es eso es que ella acaba de regresar y-- el me interrumpio antes de que terminara.

--Aceptalo, te pones muy celosa cuando las cosas no van a tu manera--

--Y eso que te importa--

--Bueno, si no fuera asi talvez podrias gustarme--

Senti un jalon en todo mi cuerpo cuando el me dijo eso y mis mejillas comenzaron a ruborizarse parcialmente.

--Si te quisiera gustar ya lo habria hecho-- tragate eso mal nacido

--¿Uh? ¿Ya no eres una niña buena?--

--No con niños malos como tu-- voltee mi cara hacia el y me quede mirandolo fijamente, ese estupido cree que podra hacer lo que le plazca.

--Entoces tal vez si puedas llamar mi atencion-- me miro, directamente a los ojos, baje la mirada y me quede sin palabras, los ojos de Cecill penetran lo mas profundo de tu alma, te miran como si te conocieran, como si lo supieran todo de ti, todos tus secretos, senti que mi respiración se descontrolo y para poner las cosas aun mas complicadas que antes, se me acerco, sus labios rozaron mi mejilla y me altere tanto que mi corazon comenzo a palpitar velozmente, mi respiracion se agito y escuche un susurro de aquel sexi demonio sentado junto a mi.

--Aun tienes que esforzate pequeña--

Su voz, sus palabras taladraron mi alma, dios desde cuando soy tan debil, senti como todo mi cuerpo sucumbio ante su presencia y me senti como una estupida, es tan ahhh por que me pasan estas cosas a mi, estos hombres me van a volver loca.

El se levanto y entro a la casa, yo me quede sentada sintiendo cosas que nunca habia sentido antes y pensando, Miguel salio y se sento junto a mi dejo caer su cabeza sobre mi hombro y no dejo salir ni una sola palabra, yo sonrei y acaricie su cabello.

--Vamonos antes de que Elizabeth salga, asi podras entrar en la habitación--

El asintio y nos fuimos.

Solo pido que esto no se salga de mis manos.






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