Capitulo X

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Miguel y yo estabamos caminando a la casa mientras hablabamos, se me ocurrio una buena idea asi que le dije que fueramos mas tarde a casa.

Es decir, casi no sale a ningun lado, hagamos que valga la pena.

Fuimos al centro comercial, un lugsr tan grande y con tanta gente hizo que Miguel se sorprendiera.

--Eres facil de impresionar--

Parecia un niño en una jugueteria, sus ojos se hacian grandes mientras obsevaba todo a su alrededor.

--Bien, hoy estoy de buen humor asi que elige una cosa y te la llevaras a casa--

--¡¿Encerio?!-- su expresion reflejaba emocion, es algo lindo que se emocione de esa manera por cosas tan simples, aunque el nunca tuvo nada de esto asi que supongo que esta bien.

--Adelante pequeño monstruo--

El sonrio y Se lo tomo tan encerio que comenzo a correr por todas partes.

Despues de correr por todo el centro comercial al fin encontro lo que queria.

--Eso, quiero eso-- señalo unos audifonos que estaban en una vitrina.

--Uuu, entonces te gusta la musica--

--Si-- sus manos estaban sobre la vitrina y sus ojos tenian un leve brillo que reflejaba lo mucho que le gustaba asi que los compre.

--Toma, consideralo un.....--

Ni siquiera me dejo terminar, se lanzo a abrazarme, sus brazos envolvian todo mi cuerpo y se sentia tan calido como el sol del verano.

--Gracias Gabri--

Lo atesorara mucho.

--De nada Miguel--

En ese momento mi telefono comenzo a sonar, es enserio ¿tuvo que ser justo ahora?

Estando molesta conteste el celular y era Elizabeth preguntando que a donde habiamos ido, le dije que al centro comercial y ella dijo que Cecill y Cloe la estaban llevando a la casa por que ya era tarde, no habia visto la hora hasta ese momento pero eran las 8:25 pm, le dije que esta bien y colgue la llamada.

Inmediatamente tome a Miguel de la mano y le dije.

--¡Corre!--

Comenzamos a correr entre la gente y logramos salir del centro comercial en cuestion de minutos.

--Llegaran en un momento asi que tenemos que darnos prisa--

--¿Como llegaremos antes que ellos?--

--No te preocupes, conozco un atajo--

Pasamos corriendo a gran velocidad por una calle que tenia por nombre: Brown Street 24 B.

Nunca pasaba por ahí, mi casa estaba al salir de esa calle y llegaba más rapido atravesandola pero Maicol siempre decia que esa calle era peligrosa para el grupo.

Pase corriendo lo mas rapido que pude y podia ver mi casa al final de la calle, a eso un grupo de personas se metio en el caminl por lo que tuvimos que parar.

--¿Que hay niños, vinieron a comprar dulces?--

Eran siete, seis de ellos eran hombres y habia una joven mujer con ellos.

--Vamos de camino a casa-- Miguel respondio

--Nunca los habia visto por aqui ¿acaso se perdieron?--

Yo estaba muy nerviosa, le di una mirada corta a Miguel y le dije que corriera pero cuando intente huir por detras aparecieron otros cuatro hombres que me atraparón.

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