Capítulo 1

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Como te amo, y cuanto te extraño, tal vez un día volvamos a vernos. Quizás en la siguiente vida, pero por el momento intentaré retener todo lo que te quiero declarar en este instante, quiero alzar la voz e intentar hablarte, pero sé que no podrás escucharme. Mikey...

¿Qué has hecho en mi para que tu partida me destrozara?

Siento que he perdido la batalla en la cual he estado luchando por tanto tiempo. Como anhelo abrazarte en este instante, pero sé que es imposible.

La muerte. La muerte era la única que podía evitar que te abrazara y te dijera «Te amo, es por eso que he anhelado estar a tu lado por tanto tiempo», pero mi cobardía no me permitía decirte aquellas palabras.
Mi historia contigo acaba aquí y ahora, intentaré vivir y seguir adelante Mikey, tú al igual que yo, deseas la felicidad para todos, pero, la verdad, no sé si pueda hacerlo, incluso ahora estoy dudando si será posible vivir una vida sin Mikey.

Mis lágrimas no dejan de caer, quisiera gritar, pero no lo hago para no incomodar a los presentes, estar en tu funeral me hace sentir muy mal.

Alveces me pregunto en que clases de problemas estuviste metido para terminar de esta manera. No te presentaste a la escuela por varios días, tu familia estuvo muy preocupada, y la primera noticia que reciben de ti es que te encontraron muerto junto a otras personas. El abuelo Sano aunque intente ocultar su tristeza para no alterar a los demás, la verdad es que su cuerpo no puede resistir y terminó por desmallarse. No es nada agradable tener que recibir tu cadáver. Emma quedó en shock y calló de rodillas, y aunque ahora se encuentre en silencio, también te extraña. Shinichiro que acaba de ser rechazado por otra chica, y se considera un experto en las relaciones amorosas, necesita de su hermanito que lo haga sonreír, al igual que Izana, y aunque no quiera admitirlo, estuvo preocupado por ti. Sin olvidar a tus amigos, con quien compartiste momentos.

Ellos y yo te guardaremos en nuestros corazones.

Sano Manjiro, supongo que aquí es la despedida oficial. Dios mío!, yo no quiero hacer esto. Despedirse es tan doloroso. Pero las personas no son eternas, y si nos volvemos a ver, ojalá puedas dirigirme la palabra.

Gracias por ser una persona tan importante para mi.

- Takemichi, ¿Podemos hablar? - Dijo Shinichiro, quien se acercó tocándole el hombro.

- Si

- Ven, salgamos un rato de este lugar.

Ellos caminaban, intentando alejarse de las personas que estaban presentes. Shinichiro se apoyó en una pared y sacando un cigarro y encendedor comenzó a fumar.

- ¿Qué es lo que harás de ahora en adelante? - Esa pregunta le sorprendió a Takemichi.

- Yo, lo que haré. Bueno sinceramente, creo que seguiré estudiando, y, mmh, después trabajar....

- ¿Piensas casarte?

- ¿Qué? ¿ Por qué la pregunta?

- Takemichi tu eres un Omega, y aunque tengas apariencia de un Beta, y tus feromonas no sean muy fuertes, tarde o temprano encontrarás a una pareja con el que puedas tener cachorros. Quien sabe, incluso tu pareja destinada.

- Si..... Lo sé - Dijo Takemichi algo incómodo.

- Disculpame por hablarte de esto y más en el velorio de mi hermano. Pero esque me quedé pensando mucho hacerca de tu futuro.

- Ya veo - Dijo takemichi mirando el suelo.

- A ti te gustaba mi hermano, ¿verdad?

- Qué? - Rápidamente con esa pregunta Takemichi miró a Shinichiro, tan obvio era?. - Si - Dijo nervioso, pero admitirlo ya no lo haría perder ni ganar nada.

𝐒𝐢𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐭𝐮 𝐀𝐥𝐦𝐚 [мιкєу x тαкє] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora