Hoy era el día, el cual, yo iba a empezar una nueva vida, aunque mis amigos me ocultaron aquel secreto,comprendí que ellos tenían sus razones, tampoco quería arruinar mi amistad por un secreto,pero me sentía decepcionada conmigo misma, supe que mis amigos no confiaban en mi y eso me hizo sentir con un estado de ánimo pésimo, pero tenía que ignorar aquellas malas vibras si quería pasar un buen verano con mis amigos, al final me contarán porque me ocultaron aquello. Mi maleta ya estaba hecha y ya solo me quedaba despedirme de mis padres. Bajé las escaleras y mi madre se encontraba en la cocina, mi padre estaba sentado en el mini comedor que había al lado, frente a él tenía una gran taza de café negro con un plato que contenía un huevo frito que lucía delicioso.
-Mai-mi mamá giró su cabeza para contemplarme- ¿Vas a desayunar? -me sonrió -
-Claro, no me perderé la última comida casera que tengo antes de irme al campamento.
-Bien...- soltó un pequeño bostezo y se tapó la boca con la palma de su mano-
Finalmente me lo sirvió y empecé a engullir.
-Mi padre me miró de reojo- Espero que te lo pases bien.
-Intenté no atragantarme- Gracias papá, os echaré de menos.
-Si, lo sabemos, Mai. La vida es dura -Mi mamá añadió en un tono de voz dramático- Un día tienes un precioso bebé en las manos y luego el tiempo pasa tan rápido que ves a tu bebé convertirse en una mujer hecha y derecha.
Mamá siempre me trataba como si fuera un bebé al que acaban de traer al mundo, sin embargo, me encantaba como me trataba siempre era como si una protectora andaba a mi lado.
-no pude evitar reirme- Mamá , que no me voy para siempre.
-Tu no sabes como se va a sentir tu madre cuando te vayas... - mi padre alargó la frase formando una sonrisa con sus labios-
Un día ,cuando te fuiste al albergue ese de la escuela , el cual, duraba una semana se pusó demasiado histérica.-Eso no es verdad.-Se defendió -Mai, también quiero agregar que cuando llegues al campamento nos informes de todo ¿Vale? O sea nada más llegar me tienes que llamar.
-Vale...-Dije no muy animada y mi padre me devolvió la mirada con la típica cara de " Te lo dije"-
-Hice una pequeña carcajada en lo bajo y seguí engulliendo mi desayuno-
Mi padre estaba leyendo el periódico y no estaba muy atento en lo que hacía, así que, decidí sacar mi móvil. La foto que me envío ayer Melissa, antes de empezar la fiesta seguía como un mensaje no leído en mi pantalla de bloqueo. Lo abrí y resultó que la foto no se trataba de un vestido para la fiesta de ayer , era una foto de nosotras cuando éramos pequeñas, para aquel momento, creo que tendríamos unos 9 años.
-Solté una risa nostálgica sin darme cuenta-
-¿Qué pasa? -Preguntó mi padre-
Traté de decir algo cuando un estruendo rebotó por mis oídos.
-¡Mai Anderson! - Mi madre chilló al lado mía sujetandose en la silla.-
El móvil
Mamá sólo me llamaba por mi nombre completo cuando hacía algo mal y debía de corregirlo rápidamente si no se ponía más histérica que si me iba de casa, supuestamente como mi padre había dicho. Miré aquel cacharro y lo apagué después puse mis ojos en los de mi madre y ella se volvió a girar para seguir limpiando los enseres de cocina.
-Ya sabes *Lilcurl no quiero esos modales sobre mí mesa ¿Oíste? Yo no te he educado 17 años para que parezcas una niña malcriada. Ya sabes lo que decía la abuela de la educación.
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Colorful Charade "Farsa Colorida"
Teen FictionHISTORIA NO ACABADA Mai Anderson reúne a sus mejores amigos en un campamento para establecer nudos, pero lo que ella no sabe, es que alguien llegará a su mundo y lo podrá patas arriba. (En proceso) Contiene faltas ortográficas que se están corrigien...