Cap. 1: La razón del todo

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Arendlle, Noruega

Justo después de que el castillo abriera sus puertas de nuevo y que ambas hermanas iniciaran de cero su relación, todo parecía marchar de lo mejor. Elsa ya había aprendido a controlar su magia y ahora lo único a lo que se dedicaría era a recuperar todos esos años con su hermana de cuando ella estaba aislada.
Arendelle estaba de lo mejor, Elsa realmente mantenía todo el pueblo bajo control y finalmente recuperaban su confianza en ella.

Era una hermosa noche, y ambas hermanas se encontraban en la sala común, jugando como todas las noches junto con Olaf, Kristoff y Sven. Sin embargo, hubo un momento en donde a Elsa se le notaba un poco rara, cosa que inmediatamente notó su hermana. Esta rareza se debía a que Elsa desde hace varios días había estado escuchando una voz, una voz que sabía que solo ella escuchaba y que quería decirle algo, sin embargo no sabía que significaba o que era lo que quería de ella.

De un momento a otro Elsa se retiró, dejando a los demás con una duda inmensa.

Ana: ¿notaste algo raro en ella?

Kristoff: Solo actuaba como Elsa, no creo que debamos preocuparnos...

Ana: Hubo algo que la molesto...creo que iré a hablar con ella...gracias por escuchar, buenas noches.

Ana se retiró para ir en busca de su hermana, la cual, supuso que se encontraría en su cuarto. Su suposición era correcta, al entrar vio a Elsa parada frente a la ventana usando una capa inusual, perteneciente a su madre, en ese instante, Ana supo que algo andaba mal con ella, ya que esa capa únicamente la usaba cuando algo estaba mal.

Ana: si, pasa algo malo -afirmó con seguridad.

Elsa: ¿contigo?

Ana: No, estás usando la capa de mamá, solo la usas cuando pasa algo malo... -Ana se acerco a su hermana y comenzó a sobarle la espalda en modo de consolación.

Elsa: simplemente... no quiero cometer un error Ana -hablo un poco dudosa y poco convincente.

Ana: Elsa, haz hecho lo mejor de ti y no cometerás ningún error, siempre estaré aquí para ti.

Ambas hermanas se abrazaron y acurrucaron mientras cantaban una canción que su madre solía cantarles en su infancia y de este modo, inconscientemente ambas quedaron profundamente dormidas. Pasando algunos minutos, horas quizá, algo inquieto a Elsa de nuevo, haciendo que esta despertase de nuevo, era esa voz nuevamente, intento lo que pudo para bloquear el sonido, sin embargo fue nulo, ya que aún con la almohada cubriéndole seguía escuchándolo. Molesta y confundida  salió de la habitación, comenzando a hablar con esa voz, con un poco de melodía, claro.

Elsa: Puedo oírte, déjalo
Hay quien se arriesga, pero yo no
Más de mil razones hay para seguir igual
Oigo tus susurros que ojalá se fueran ya.  -Comenzó a caminar lentamente por los pasillos del gran castillo-

No habla una voz
Eres un ruido en mi interior
Y aunque te oyera, y es que no
No hay más que hablar, adiós
Todo aquel que he querido, está en este lugar
Perdóname sirena, no te voy a escuchar
Viví ya mi aventura y todo quedo ahí
Tengo miedo de seguirte y arriesgarme a ir
Mucho más allá
Mucho más allá
Mucho más allá
-Salió lentamente del castillo hasta llegar al muelle, donde comenzó a reflejarse en el agua que se encontraba en el lugar-

¿Qué quieres tú?, ya no me dejas ni dormir
¿Has venido a distraerme?, no me quieras confundir
O tal vez, seas alguien que es muy parecido a mí
Que en su interior sabe que no es de aquí
Cada día es más difícil según crece mi poder
Algo hay en mi interior que quiere ir
Mucho más allá
Mucho más allá
Mucho más allá
-si increíble magia comenzó a hacer imágenes impactantes por todo el lugar, una mezcla de magia increíble, podían notarse criaturas, pero además de eso, pudo ver borrosamente a unas personas, una familia más bien, no podía identificar bien quienes eran, pero sabía que significaban algo importante-

No, ahora puedes conocerme
Arroparme, enseñarme
¿A dónde vas?, no me dejes atrás
¿Cómo te sigo a ti?
Mucho más allá
-Al terminar con esa visión que tuvo, el cielo estaba lleno de pequeños fragmentos de cristal, todo parecía como si el tiempo se hubiese parado, no había movimiento, sin embargo, a la vez que Elsa tocó uno de estos cristales, todos callaron al unísono, cosa que Ana, desde su balcón alcanzó a ver.
En ese instante todo el pueblo salió a ver que pasaba, en la cara de todos estaba esta confusión, y de un momento a otro, sin advertencia, una magia extraña invadió el lugar, haciendo que todo se saliese de control, el mar rugía, el aire soplaba con tanta fuerza que era posible que alguien saliera proyectado con la fuerza de esta, Elsa fue y con dificultad advirtió a los aldeanos a que fueran a un lugar  alejado.

Todos los pueblerinos se reunieron en un pequeño monte no tan alejado del lugar, Kristoff y Sven se aseguraban de que todos se encontraran en buen estado mientras que Olaf calmaba a los pequeños mientras se respondía que sucedía con Arendelle.
Ana se acercó a hablar con su hermana a comentarle lo que ella había visto por la ventana.

Ana: Okey, no lo entiendo, ¿de pronto escuchaste una voz y no se te ocurrió decirme? -Ana se notaba un tanto alterada con lo sucedido.

Elsa: No quería preocuparte

Ana: Hermana, prometimos ya nunca ocultarnos nada, solo...dime que está pasando!

Elsa: Creo que encontré a personas que saben de donde viene mi magia...

Ana: Eso definitivamente no es lo que creo que dirías... Alto...dijiste... ¿personas que saben de donde viene tu magia? ¿De que hablas?

Elsa: Se que suena a locura, pero esa voz, esa voz me enseñó a una familia Ana, tengo esperanzas de que ellos sepan la respuesta a mi magia, quien sea que esté llamándome es bueno.

Ana: ¿porque están tan segura? Mira nuestro reino!

Elsa: No se...es solo que mi magia lo puede sentir...Ana, yo lo puedo sentir

Ana: Okey... -le esbozó una sonrisa cálida a su hermana, para que después se escuchara a la tierra retumbar- ¿Ahora qué pasa?

A lo lejos se comenzaron a ver cientos de piedras girando en dirección a las hermanas, eran los trolls, Pabbie rápidamente se acercó a Elsa.

Elsa: ¡Pabbie!

Pabbie: Elsa! Siempre hay una nueva aventura con ustedes, debes prepararte para un gran viaje Elsa.

Ana: ¿Un gran viaje? ¿Esto que tiene que ver con Arendelle?

Pabbie: Déjame ver lo qué hay ahi -Pabbie comienza a plasmar imágenes en el cielo, visiones más que nada, en forma de aurora boreal, en estas se comienzan a plasmar imágenes, como un gran barco, mar, una isla, una familia, etc.- El pasado no es lo que todos suponen, Elsa, hay respuestas haya afuera, debes ir tras ellas si realmente quieres saber de donde viene toda esta magia...

Ana: ¿Un viaje? ¿Pero a donde?

Pabbie: Si mi magia y mi intuición no me fallan, recibo las vibraciones de un lugar alejado, un lugar que te llevará varios días, inclusos meses llegar, atravesando todo el océano, llegarás a Colombia!

Elsa: ¿Colombia? ¡Eso es más de 10,000 km de aquí! Nos tomará días llegar ahí

Paddie: Entonces les recomiendo que partas desde hoy para que llegues más rápido al lugar, toma un barco y llénenlo de provisiones, empaca comida, demasiada, y tengan cuidado, deberás cursar todo el Océano Atlantico, hasta llegar a las costas de Colombia.

Elsa: ¿Y como sabré a quien buscar?

Paddie: Elsa sabra cuando los vea, la magia de ahí no está reprimida, la usan a favor del pueblo, ahora vete. Tienes que hacer lo qué hay que hacer.

Elsa: Haré lo qué hay que hacer, Ana ve al castillo por las provisiones... yo iré preparando todo en el barco, Kristoff, ¿tendrás una brújula de casualidad?

Ana: Oye, no irás tú sola

Elsa: Ana, tengo poderes para protegerme y tu no...

Ana: te recuerdo que hicimos un trato, no nos alejaríamos una de la otra y lo haríamos todo juntas...no dejaré que vayas tú sola y enfrentes el escandaloso océano por tu cuenta! Entonces, creo que también voy...

Kristoff (entrometiéndose en la conversación mientras abraza a Ana por detrás): igual yo, y manejaré el bote.

Olaf (entusiasmado en el fondo): ¡llevaré bocadillos!

Paddie: yo cuídate bien de su pueblo... ustedes vayan en busca de ese milagro...

Un encanto congelado [Isabella x Elsa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora