Capítulo 6, Oscuridad.

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A partir de aquí la historia comienza a oscurecerse, mi vida a partir de ese momento  cambió por completo, la gente que conocía y confiaba, resultaron ser unos completos desconocidos.

Las risas retornaron en forma de llanto, las promesas en mentiras, la confianza en falsedad. El mundo no parecía el mismo, destrucción, venganza, control, sangre pero sobre todo indiferencia. 

Él, un monstruo sin escrúpulos, el mismísimo Lucifer estaba enfrente de mí, disfrutando de mi tortura, su sonrisa reflejaba pura maldad y su mirada lasciva no paraba de observarme detenidamente. No era quien yo había conocido, no era la persona de la cual no me podía olvidar, no era Yi Fan era Kris. Kris, sonriendo ante mi desgracia, mientras era atacado.

Esperad, ¿Os estáis enterando de algo? No ¿verdad? Vale, empezaré por el principio de esos días. Os resumiré brevemente mi plan, primero con ayuda de Kai me iba a adentrar en la central de los Tigre Blanco, es decir la casa de Kris. ¿Con ayuda de Kai? Sí, con ayuda de Kai, hace unas semanas me percaté de que Kai no se dedicaba a mirarme sino más bien a espiarme, estaba claro que era de la mafia contraria, por lo que decidí no matarle para que me pudiese ayudar con el plan. Después sería tan fácil como entrar y matar al lobo en su propia cueva. ¿Fácil verdad? Pues no, nunca es tan fácil como parece.

El primer día de mi plan me levanté a las cinco o seis de la madrugada, si lo hacía a plena luz del día algunos podrían sospechar de algo que no es.

Andando por el pasillo oí unos ruidos que provenían de la habitación de Chanyeol, pero no eran los típicos ruidos de sexo sino más bien de llantos. Baekhyun lloraba desconsoladamente mientras pronunciaba el nombre de Chanyeol en sueños, Chanyeol abrazaba a Baek mientras le besaba la frente. Una escena muy emotiva, demasiado para mi gusto asique marché sin decir palabra alguna.

Luhan por primera vez desde que llegue había traído a un chico a su habitación, parecía más joven que él, estaba claro lo que estaban haciendo asique me largué para no oírles.

Y por fin llegué, la habitación de Kai, la puerta estaba abierta, dí por supuesto que Kai me estaba esperando.

-¿Qué quieres a estas horas Lay, no te parece un poco temprano?- dijo.

-Sabes lo que quiero, llévame allí y no te mataré- le dije mientras me iba acercando lentamente.

-Está bien, te llevaré, pero no porque tú me lo digas sino porque él así lo desea- Dijo mientras me agarraba del brazo y me sacaba casi a rastras de su habitación.

-¿En serio, tan fácil? Vamos Kai me decepcionas- murmuré mientras me soltaba de su agarre.

-No me subestimes Zhang, ya te lo dije, no lo hago por ti-

-Como sabes mi apellido, como lo sabes- Dije casi chillando.

-Eso, lo sabrás a su debido tiempo, ahora vámonos antes de que nos pillen, ah sí te llevaré pero con una condición…-Antes de que me diera tiempo a nada ya estaba en el suelo con una venda en los ojos y un golpe en la cabeza.

Al abrir los ojos me di cuenta de donde estaba, en unos lujosos jardines de un palacio, Kai estaba a mi lado con un uniforme de sirviente.

-Ponte esto, di que vienes de parte de Jongin, te dejaran pasar. Ten cuidado Lay, espero con sinceridad que tu plan siga su curso y logres tu venganza- Me abrazó y se fue.

Me adentré en aquel palacio, tal y como dijo Kai nadie puso ninguna objeción en dejarme pasar. Al parecer Kai, digo Jongin tenía bastante influencia por allí.

Casi todas las habitaciones de la casa estaban decoradas de una manera recargada llenas o de cabezas de animales o de grandes armaduras. Pero mi suerte acabó allí, un chico alto, de pelo negro y ojos muy rasgados se encontraba en la habitación en la que entré. Él abrió los ojos de par en par y vino directo hacía mí, cuando quise reaccionar ya estaba en el suelo con el labio partido y el chico encima de mi propinándome la paliza más brutal de mi vida. A los cinco segundos ya me había desmayado.

Cuando me desperté no pude ver nada pues tenía una bolsa en la cabeza, pero dos cosas si sabía, una estaba desnudo, dos había alguien allí conmigo. Sus pasos eran claros y concisos. Estaba aterrado y mi mayor error fue pronunciar estas palabras.

-Voy a morir, no pude llegar a mi meta, ni tampoco he tenido tiempo de poder amarte Yi Fan, lo siento-

Al oir esas palabras los pasos cesaron, noté como unas manos rodearon mi cabeza y me quitaron la bolsa. Y allí estaba, delante de mí  Yi Fan, más conocido como Kris. Riéndose a carcajada limpia. Mirándome como si fuese un pedazo de carne.

-Con que tú eras mi pequeño intruso enano, lástima, y yo que quería jugar más contigo, ahora ya sabes quién soy y no tiene gracia-

Ese fue el principio de un miedo que no acabó pronto.

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⏰ Última actualización: Apr 08, 2015 ⏰

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