Un chico Ravenclaw

Chocolate

Otra cosa en la lista de Black sobre el castaño era el chocolate, la cantidad de chocolate que el chico podía ingerir entre comidas, en las clases y durante sus estudios en la biblioteca era sorprendente y eso solo cuando Sirius lo tenía a la vista. Se hizo una nota mental de ir a Honeydukes a comprar mucho chocolate en su próxima visita a Hogsmeade, la cuestión era como dárselo.

- Podrías acercarte a él y decirle: " Hola Lupin te he estado espiando estos días y me fijé que te gusta el chocolate, así que ten" - dijo el de lentes fingiendo, muy mal, la voz de su amigo haciendo reír a Peter-.

Sirius rodó los ojos.

- Lo único que me motiva es saber que si Lily te aceptó a ti yo no tengo por qué perder las esperanzas.

Eso molestó a James y empezaron una absurda discusión de quién era más idiota que quién.

- Podrías dárselo y ya no? A casi todo mundo le gusta el chocolate podría parecer una coincidencia además de que en algún momento tienes que darle a entender que te gusta.

Ambos chicos lo miraron un tanto asombrado.

- Vaya Wormtail, no puedo creer que tengas razón - susurró Sirius pensativo, el chico sonrojó, enojado y halagado por partes iguales-.

James frunció el ceño molesto.

- Y dónde estaban esos consejos cuándo yo sufría por Lily?

- Lo tuyo era una causa perdida Prongs, solo un milagro fue lo que te salvó - comentó Sirius despectivo, Peter asintiendo tranquilamente ante esas palabras-.

James hizo un puchero y le causó tanta ternura a Sirius que le dió un golpe en la cabeza mientras reía.

                                ***

Ese sábado había ido a Honeydukes y había comprado chocolate, estaba muy consciente de que había comprado mucho chocolate pero eso ya no importaba, lo que importaba ahora era entregarlo y no morir en el intento, se había alejado de los chicos para que no se burlaran aún más y por si se encontraba con Lupin pero por más que caminó y buscó por todo el pueblo no encontró al chico un poco decaído se encontró con sus amigos en la entrada del pueblo.

- Qué sucede? - le preguntó Lily, que se acercó a él, ya que estaba muy por detrás del grupo-.

Él la miró con una mirada de cachorro triste, no por nada era Padfoot.

- No lo encontré, lo busqué por todos lados.

Ella frunció el ceño.

- Pero estoy segura de que él vino - entonces un pensamiento cruzó su mente-. Puedo saber dónde lo buscaste?

- Estuve en Honeydukes, lo busqué Zonko, en la tienda de artículos de Quiddicht y por último en las Tres Escobas, camine por todo el pueblo!

Lily rió ante la exasperación del chico y lo tomó del brazo, ellos nunca eran así de cercanos pero esta faceta de Black enamorado de su mejor amigo podía con ella y terminaba tratando a Sirius como a un niño pequeño.

- Black se te ocurrió buscarlo en los lugares que él visitaría? Lo buscaste por tiendas a las que tú vas! Remus, gracias al cielo, no es igual a ti.

Sirius frunció tanto el ceño que parecía que le costaba pensar.

- Ya hoy, quizás, no tengas oportunidad de verlo - Sirius se giró a mirarla dolido-. Porque para él ya desperdició tiempo y ahora se encerrará en su habitación para terminar con sus deberes pero te aseguro que mañana estará en la biblioteca.

Sirius abrió sus ojos desmesuradamente.

- Hace tarea los fines de semana?

- Como cualquier estudiante - asintió la chica, el alzó la barbilla un tanto altanero-.

- Prongs y yo no.

- Mi error, como cualquier estudiante normal quise decir