Vida Cotidiana

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Era un día cualquiera, generalmente por esa hora estaría corriendo al colegio porque era tarde pero este día era diferente, por algún motivo no pude dormir y sin entender bien la razón llegue temprano a clases, estaba con la silla reclinada masticando un chicle mientras miraba el techo y hablaba conmigo mismo.

-A ver, si tengo razón y hago esto -el chico parecía planear algo, era como un hobbie para el- no pero...

Cada cosa que decía parecía estar sin sentido, en mi cabeza lo tenía pero los demás rara vez lo entenderían, finalmente suspiré al concluir que ese plan no era bueno, cuando note una mirada punzante en mi, una chica estaba tímida en la puerta, era nueva o eso asumí, no la había visto en mi vida y vaya que prestaba atención a mis compañeros era lo que tenia el observar en silencio. Mire a la chica y la detalle, tenía una melena rubia y era delgada, sus ojos eran brillantes pero el color no era claro, quizás verde o café, parecía esconderse pero también parecía querer hablar, le faltaba valor o talvez le avergonzaba, suspiré y deje caer mi silla luego poniendo mis manos en la mesa me impulse hacia atrás y finalmente me puse de pie, di algunos pasos hacia la chica, no era particularmente alta, me diría 1.53 si no estaba mal.

-hola, ¿estas perdida? - el chico sonaba tosco y no lo notaba, siempre era distante de los demás-

-este... Pues creo que acá es mi aula, no lo sé, sinceramente soy nueva y esto de ser el nuevo es lo peor no entiendo nada -la chica parecía abrumada no triste sino más bien apenada y con algo similar a nervios-

-no te preocupes acá las personas son agradables, es cierto que yo soy algo distante pero con todos me llevo bien, si quieres puedes sentarte junto a mi - ahora el chico sin razón parecía amable- además, tengo suficientes dulces para quedarme sin dientes.

-esta bien.... -la chica parecía apenada pero sonreía, el chico le caía bien-

Llevabamos unos minutos hablando, generalmente no me fijo en apariencias pero la chica era muy linda además parecía muy diferente a otras personas, la escuchaba hablar de libros y canciones y solo me preguntaba ¿como aquella chica tímida resultó ser tan habladora?

reí levemente al pensar en eso y estaba a punto de contarle un chiste cuando llegó el profesor de historia, un señor de cabello corto y mostacho, era delgado y siempre vestía con ropa elegante, lo analice un poco y pensé que el señor frederick siempre era motivo de alegría sus clases eran de las más interesantes y nunca criticaba a ningún alumno por más que se equivocara, era un gran tipo, además era un buen amigo mío, solíamos hablar de vez en cuando en la cafetería.

-buenos días señor Frederick -dijo el chico con un tono cordial, era su amigo pero lo respetaba de verdad-

-hola T, ¿que tal tus vacaciones? -el profesor parecía emocionado de escuchar a su alumno-.

-fueron una locura, leí varios libros sobre la revolución francesa y... -en ese momento ambos notaron a la chica que algo tímida había quedado ignorada, así que el chico interrumpió y los presento- señor Frederick ella es mi nueva amiga... Amm

-kris, me llamo krysten pero todos me dicen kris -dijo pronto la chica-

-oh lamento no preguntar tu nombre y el es nuestro profesor Frederick de historia-el chico se acercó y susurro a objetivo de admiración- el mejor profesor de todos.

-no es para tanto T -dijo el profesor sonriendo-

De repente sonó una campana y todos los alumnos entraron interrumpiendo aquella conversación y susurrando de a poco que la chica nueva era en verdad linda, me preguntaban el nombre, el numero y si era soltera, claramente no lo sabía y menos me interesaba, así pasaron algunas horas, vimos historia, física y álgebra, finalmente era hora de descansar, fui a la cafetería y calenté mi hamburguesa de queso, generalmente mi almuerzo, eran mis favoritas y eran económicas, mis padres corrían con muchos gastos y yo trataba de ayudar en lo que podía, me senté en una mesa solo, había días en que lo hacía, era una buena forma de planear. De repente escuché murmullos a mi alrededor y alce mi rostro para ver a la chica nueva... No a mi nueva amiga kris sentada frente a mi.

-aun no me dices tu nombre -cuestionó la chica con una risa-

-todos me dicen T -dijo el chico como cortando el tema-

-pero ¿cuál es tu nombre real? - preguntó curiosa la chica-

A punto de mencionarlo note algo raro, todo a mi alrededor estaba en cámara lenta, mire a kris pero parecía no afectarle para nada, así que estaba confundido, decidí levantarme pero ella me tomo del brazo, recién notaba todo pero no estaba asustada, mas bien sorprendida, iba a decir algo cuando lo vi por primera vez...

A Través Del TiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora