~ Zhreta ~

Capítulo V: 'Decisiones'.

Ocupados ya los cinco asientos de la sala privada que contenía a los supremos, éstos, tranquilos y reticentes, se miraron y empezaron a hablar.

— Bueno, yo creo que ya es hora de hacer la segunda elección, sino creo que nunca llegaremos a mandar a nadie, aún faltan muchos preparativos y ésto se nos va a ir de las manos sino empezamos cuanto antes. — Dijo Zeus.

— Calma padre, pues el tiempo que has estado contándoles a los inferiores de la primera seleccionada, hemos tenido tiempo para buscar e interesarnos por algún inferior que andaba escuchándote jajaja. — Contestó Ares.

— Pues no hagamos esperar a nadie más, Ares, por favor. —

— Mi elección es una diosa de mirada lasciva y un poder divino que anima, diosa inferior de las artes y la gloria, Dòxa es su nombre, y participó en la división de Apolo en la batalla titánica. Según nuestros informes causó estragos y más de un quebradero de cabeza a Tetis. Sin duda tiene potencial y es mi seleccionada para llevarla a votación e intentar ser su mentor. —

— Vale, hagámoslo fácil, ¿alguien en contra de que ésta pequeña inferior sea una de las elegidas?. Si no habla nadie daré por sentado que vuestros votos son a favor de su entrada a la primera división. — Aclaró Zeus.

Dejó pasar unos segundos y, al ver la indiferencia del resto allí reunido, proclamó a Dòxa como segunda seleccionada y discípula de su hijo Ares.

— Bien, tu turno Poseidón, creo que tú ya mencionaste tener a alguien en mente pero tenías algo que aclarar, ¿no?. —

— Así es hermano, y ya solucioné la mayor parte de mis asuntos, por lo que ya puedo daros su nombre. Pero, me gustaría ser el último en desvelar a mi elegido, si no os importa. —

Los demás supremos se miraron algo dudosos y, ante la seriedad que se requería ante Poseidón, todos asintieron con la cabeza continuando así con el siguiente seleccionado.

— Bien, veamos, creo que es mi turno. La diosa que he elegido para esta misión se hace llamar Vhànek. —

Tras oír los demás el nombre de aquella diosa, no pudieron mas que preguntar al dios del cielo.

— ¿Quién?. — Preguntaron casi al unísono los cuatro.

— Jajajaja, igual me quedé yo cuando la conocí, pero ya sabéis que tengo buen ojo para los diamantes en bruto. No sabemos nada de ella pero no hace falta, bajo mi tutela será capaz de arrebatar la desdicha allá por donde ella quisiese. —

Después de tres segundos de insufrible silencio para Zeus, alguien habló.

— Hermano, no es que no confiemos en tí, pero, ¿estás seguro de querer mandar a una total desconocida en la primera división?. — Preguntó Hades algo preocupado.

— No te preocupes, si pasase algo, yo tengo todo bajo control. Confío en ti, hermano, yo te daré mi voto a favor. — Replicó ipsofacto Poseidón ante la pregunta de Hades.

— Bueno, ¿alguien más va a replicar o la damos también como una nueva seleccionada?. — Preguntó Zeus con algo de impaciencia.

— Creo que no tenemos ninguna obje.. —

— ¡Esperad un momento!. — Exclamó la más joven de los allí presentes.

— ¿No será otra de tus ligoteos verdad padre?. Porque de ser así me decepcionarías tremendamente elegir a una cualquiera por el simple hecho de ser una de tus amiguitas. — Replicó.