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Amanecí sonrojada, desde que Christopher había dicho que quería saber más acerca de mi situación su cara ha inundado mi mente. A todas horas pienso en el, no en la forma de enamorarme saben... más bien cómo "¿Que dirá hoy?" u "Hoy me encontraré con Chris".

Tomé mi maleta lista para ir al colegio, sin embargo con un gran miedo. Sabía que no siempre iba a estar Chris para protegerme o preocuparse por mi, durante máximo 5 horas había estado pensando que le expresaré al chico si me llegase a preguntar sobre mi estado. Sinceramente no sabía que le respondería.

De nuevo, salí de casa y tomé el transporte al colegio. Ya era cuestión de todos los días que me pegasen en el transporte; quería mudarme de ciudad.

—¡Paren el coche! —gritó un joven alto corriendo detrás de este —¡Por favor! —suplicó. Un pequeño empujón hacia adelante y el autobús paró dejando entrar al joven. —Muchas gracias —tenía la respiración agitada, depositó el costo del pasaje en la caja. —¿Está ocupado? —preguntó y yo negué.

—Mejor siéntate acá con nosotros Hyunjin, esa nerd es una inútil. —dijo tratando que se despegase de mi.

Se dio la vuelta en el asiento y dijo —Inútil en el aspecto que no sabe hacer idioteces, claro. Pero tiene más futuro que tú y tus amiguitos —rió regresando a su lugar. —Sin ofender —dijo bajo.

Escribí en mi celular —"Ya estoy acostumbrada" —cruzamos miradas.

—¿Acostumbrada? —repitió y yo solo asentí —Lo siento, no debí —habló un poco avergonzado.

—"Nada de que disculparte." —sonrió aún así con preocupación en su rostro.

—¿No te molestan que te hagan esto? Si yo estuviese en tu lugar ya los hubiera golpeado, no aguanto a los patanes como ellos —confesó, yo solo asentí.

El autobús avanzó de nuevo para seguir con su dicha ruta, el camino fue incómodo ya que no podría hablar con el sobre cuánto detesto a las personas que me hacían menos. Llegamos a la academia y bajamos del bus, sin duda buscaba a Christopher, hasta ahora mi único amigo.

Miraba de un lugar a otro pero no lo veía, decidí ir al aula, probablemente lo encontraría ahí ya que es presidente de salón. Subí los escalones para el tercer piso, afortunadamente mi aula es en el primer edificio del colegio.

Christopher no estaba en la habitación, cosa que me sorprendió demasiado. Siendo representante de clase debería llevar un buen registro, supongo.

–Buenos días chicos. –dijo el profesor entrando al aula, sin decir otra cosa más se sentó en el escritorio mientras nos miraba.

Estábamos en silencio, yo pensaba en por que nos miraba así cuando recordé que nos había dejado un proyecto el cual se supone que todos debíamos de tener. Busqué en mi maleta el trabajo y se lo llevé al escritorio.

–Gracias Bae. –Me miró y regresó su mirada al resto mientras yo regresaba a mi asiento –¿Alguien más que haya hecho el proyecto que dije hace 2 semanas? –regañó.

...

—¿Puedo pasar? —preguntó Chris del otro lado de la puerta.

—Claro. —Entró al aula y se sentó en su silla, —Por favor no vuelva a llegar tarde Joven Chris.

—No lo haré de nuevo señorita Lila —se disculpó mientras inclinaba un poco su cabeza hacia adelante.

—¿Alguien trajo su poema que pedí ayer? —preguntó la profesora.

—Yo. —Christopher levantó su mano, la profesora asintió y el pasó al frente para entregar dicho trabajo.

—Ya que eres el único que trajo su proyecto, ¿Podrías leerlo en voz alta para toda la clase? —miró a toda la clase con nervios, claramente no estaba preparado para leerlo ante tantas personas; asintió y con la cabeza en alto empezó a enunciar.

Nunca alguien asechó mi sentir como en tan poco tiempo tu lo has hecho, me duele la cabeza de pensar en ti y tu belleza.
Ante ti soy mudo y en la mente me nace un nudo, el hablarte es un deseo pero claramente de ganas escaseo.
Cada vez que te veo levemente me mareo.
No se como tú voz sonará, pero tengo seguro que me encantará.
Tu forma de hablar es tan singular y ante tus gestos es excepcional.
Cuando llegaste solo era esperar y saber si te llegaría a amar, no muy luego se encendió ese fuego...

—UUUU —se escuchó de parte de toda la clase y de algunos chicos de fuera del aula.

—¡Eso no iba! —se inclinó demostrando perdón y sonrojado regresó a su asiento. Tapó su cara con sus manos.

...

—¡Chan está enamorado! —gritó Jisung.

—¡Jisung está equivocado! —respondí para seguir almorzando.

—Te gusta Bae. —escupí la comida por lo que dijo Seungmin.

—Que, estás totalmente equivocado, no me gusta Bae y no me gusta nadie.

—Chris, si no estuvieras enamorado hubieras escrito un poema sobre la sociedad o de los problemas de tu día a día como siempre lo has hecho. —explicó Bin.

—No puedes negarte Chan, —dijo Hyunjin mientras comía —te gusta Bae.

—No me gusta Bae.

—Pero te gusta Na-bi.

—Cuantas veces tengo que —lo miré, tenía mi celular en mano, desbloqueado y con el contacto de Bae —¡DEJA ESO FELIX! —le quité el celular rápidamente pero dejé caer mi almuerzo.

—¡TE GUSTA! ¡LA TIENES AGREGADA CON UNA CARITA FELIZ! —gritó.

—¡Y eso que! ¡Es una cara feliz! —me quitaron el celular aún desbloqueado y lo empezaron a revisar mientras corría.

—¡Me tienes agregado como "Hannie"! ¡Que te pasa! —se echó a reír mientras me entregaba el celular.

—Nada que ver eso, sabes bien que te digo Hannie de cariño. —guardé mi celular en mi bolsillo.

—¿Y eso qué? ¿Na-bi con una carita feliz? ¿Eso es normal? —preguntaba Hyunjin.

—¿Y eso qué? Mimi se fue del colegio, ¿Te acuerdas? —lo miré de reojo.

—Mimi es una cosa totalmente diferente, si nos juntábamos y ajá pero yo soy una cosa y tú eres otra. —se paró frente mío.

—Shh, Mimi me dijo algunas cosas que no te puedo decir, shhh... —puse mi dedo índice en su boca.

—Ahora me dices o le digo a Bae.

—Pero

—Nada de peros, dímelo. —Este chico sabe cómo sacarme hasta el alma.

—Dijo que siempre le gustaste, pero nunca tuvo la oportunidad de decirte. —confesé.

—Le voy a decir. —Empezó a correr.

Beautiful | Christopher Bang | PausadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora