Estocolmo

Capítulo 2

Cuando Zhan despertó se sorprendió de haberlo hecho. No estaba amarrado, seguía entero y no veía marcas o dolor en su cuerpo. Estaba en una cama arropado con su misma ropa. No sabía que hora era, ahora solo quería respuestas.

Se paró y empezó a ver su alrededor, no era un lugar que conociera, pero era lindo. Las paredes eran rojas, los muebles se veían antiguos pero eso a él le gustaba. En los muebles y cortinas había bordados dorados de flores.

Sí, se metió en una burbuja en lugar de salir corriendo o gritar desesperado. De pronto la puerta se abrió y vió una silueta, un hombre le parecio, cubierto en una túnica con gorra negra y una mascara blanca con detalles dorados en su rostro.

Retrocedió algo alarmado. El contrário avanzó y se quedó viendolo unos segundos.

Zhan pensó que ahi moriría, sentía que en cualquier momento sacaría un cuchillo o un arma de fuego y lo mataría, pero no. Se sintió algo incomodo por el silencio y la mirada fija, asi que se atrevió a hablar.
- Este...Disculpa, me secuestraste, ¿No? ¿Porqué estoy aqui?

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- Vamos dime algo, esto no es normal, debería de estar amarrado o incluso muerto.

- Le entregó una carta.

Lo miró y miró la carta, vió que no corría mucho peligro, así que con toda seguridad se sentó en una silla y empezó a leer.

"Ah mí Zhan, por fin estas a mi lado. Sí, lo admito, te he secuestrado y no te dejare ir. No sabes cuanto planeé esto, no te espantes, no te hare nada que tú no quieras. Eres libre de andar donde quieras y salir de casa pero no vayas tan lejos porque te puedes perder..."

En seguida fué y abrió una cortina, ya era de día, bueno apenas amanecía. Vió que solo había campo, no había otra casa cerca de ahí.

Volteó y miró de nuevo al chico, estaba sorprendido. Siguió leyendo un poco más.

"Me salvaste, me hablaste y eso me enamoró, lo se loco, pero hoy en dia ¿Quién no lo esta? Te vigilé y observé muy bien, no sabes lo triste que me hacías sentir cuando te veía mal. Solo quiero hacerte felíz.

Att. W.Y

Se dió cuenta de la situación, no habia mucho que hacer pero tampoco sería hostil. No corría tanto peligro.
- ¿Y sí mejor me matas?

- Negó.

- Okey, ¿Porqué no te quitas la mascara? De todas formas no creó poder hacer algo.

- Negó de nuevo.

Era extraño para él, no hablaba, y tampoco podía ver quien era. W.Y. Su nombre tiene Y.

Ahora solo sabía que estaba solo con un chico desconocido a la mitad de la nada, tampoco tenía a alguien por quien llorar o a alguien a quien decirle que estaba bien.

Se resignó momentaneamente a ver toda la casa. Era enorme, había varias habitaciones, la sala tenia televisión e internet, no entendía como funcionaría el internet en el campo.

La cocina era blanca y estaba reluciente. Todo, comparado con su departamento era nada. De un momento a otro perdió de vista a su secuestrador y se quedó solo en ese enorme lugar sin saber que hacer.

Irse de ahí, perderse probablemente y morir, o quedarse con un chico extraño que ni siquiera sabía su voz. Se sentó a analizar su situación.
- Si me escapo y logro regresar, que lo dudo, tal vez podria seguir con mi vida normal. Pero regresaría a mi infelicidad, los acosos y vejámenes del día a día. Además no tengo condición y me cansaría a los 5 minutos por mucho.

Una de dos, se quedaba y veía que pasaba o se íba y moría probablemente. Aunque aun ahí podía morir, según no le hará nada, pero quién le asegura eso, ¿El que lo secuestro? Si lograba regresar núnca más iría por ese callejon.

¿Regresaría? Empezó a pensar de más, de todos los casos que había leído de asesinos seriales y secuestros, la probabilidad de regresar a su vida "normal" era muy baja, porque un secuestrador planea todo muy bien.

Él no era precisamente el más listo, pero aun así si llamaba a la policía no sabría decirles donde esta y no creia que pudiesen rastrear el teléfono, algo ha de tener porque sino no lo hubiera dejado en la sala como si nada.