Las siguientes semanas transcurrieron entre citas lujosas, cámaras y flashes por todos lados
Pero Antoinette no podía dejar de ser Antoinette aunque lo intentara
- Uh, ¿esas son mini hamburguesas? - Emocionada tomó una de la bandeja que llevaba un mesero - Miró a Minerva un poco apenada - ¿No quieres una?
- No, gracias - Negó sonriente
Toni le dió una pequeña mordida sintiéndose una glotona. Así que cuando otro mesero pasó con un par de copas de vino blanco las tomó y dejó su hamburguesita, dándole una copa a Minerva
Era incómodo
A veces, por las noches, al llegar al casa, exhausta de fingir, de los vestidos elegantes y del ambiente, se quedaba mirando a la ventana, preguntándose en qué momento su vida se había convertido en eso, ¿cuándo había dado ese enorme giro?
No sabiendo, que tan sólo unos metros sobre su techo, se encontraba Cheryl, mirando el mismo cielo que ella, aburrida mientras bebía cerveza y traba de componer música sin mucho éxito. Algo la perturbaba, lo peor es que sabía qué era
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El día de la boda salía apresurado de su departamento, con su brillante vestido bien cuidado dentro del protector
Justo al mismo tiempo, frente a ella salía Cheryl, con un vestido sencillo pero elegante
Ambas sorprendiéndose un poco al verse después de un tiempo
- Cheryl, hola - Sonrió
- Hola - Le devolvió la sonrisa, pero se giró para cerrar su puerta
- Qué sorpresa verte aquí, tan elegante. ¿A dónde vas?
- Uhm, a una boda - Dudó un poco en decirle - Tú también, ¿no? Hoy es el gran día de Celina
- Sí. Vaya... ¿irás a una boda también? Que raro. ¿Quién se casa? - Indagó dando unos pasos hacia adelante con la intención de conversar
- No los conoces - Cheryl la evitó y comenzó a bajar las escaleras
- Oh - Toni se sintió un poco herido - ¿Tienes pareja o algo así? ¿Ya sales con alguien? - Cheryl se detuvo en seco
- No te preocupes por eso, Antoinette - La miró molesta y continuó bajando
Antoinette se maldijo. Tal vez no era un buen tema de conversación después de todo
- ¡No bebas demasiada champaña! - Intentó pero la chica apresuró su paso, casi corriendo
Se mordió el labio. De acuerdo, definitivamente no quería hablar con ella
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Todo se veía maravilloso en el gran jardín, pasto verde y sol brillante, en dónde se llevaría acabo la boda de Celina y Bret. Los invitando entraban tranquilamente y felices de estar presentes
Mientras tanto, dentro de una de las habitaciones donde la novia, las damas de honor y la hermano se arreglaban, era un caos
- Oigan, ¿mi peinado está muy alto? - Salía preocupada la chica del baño, las únicas que lo miraron fueron su hermana y su madre quien trataba de cerrarle el vestido
- No, cariño, está perfecto - Negó su mamá, y se acercó para murmurarle - El vestido ya no le queda, inténtalo
Asintió y lo intentó
- Bien. ¿Me ayudan? - Se acercaron Tabitha y Donna
- ¿Alguien sabe dónde está mi sándwich? - Dijo molesta Celina - ¿Alguna de ustedes se comió mi sándwich? - Sus amigas negaron
- Nadie se lo comió. Relájate - Le dijo con dulzura - Donna, Tabitha, encuentren su sándwich
- Sí - Se movieron rápidamente
- Escuchen - Entró exaltado el planeador de la boda, un hombre rellenito y amable - No quiero que entren en pánico
- ¡Ah! ¿qué sucede? - Se alteró Tabitha
- El arpista no vendrá - Las demás suspiraron aliviadas de que no fuera nada en serio grave
- ¿Tenía un arpista? - Preguntó la novia
- Se rompió el dedo en un juego de softbol y como es un día de muchas bodas todos están ocupados - Celina miró a su hermana y esta le hizo una mueca de que no le tomara importancia
- Cielos, ¿por qué tiene que pasarme esto a mí? - Expresó su madre exagerada como era siempre
- Tengo la lista de todas las bodas que habrá hoy y encontré un remplazo que vendrá tan pronto termine la otra boda. Y si no se presenta, tocare la tuba - Sonrió emocionado pero los demás lo ignoraron
Finalmente, Antoinette logró cerrar el último botón del vestido
- ¡Ahora casemos a esta chica!
- ¡Sí! ¡Vamos! - Las chicas se emocionaron
- ¡Lo encontré Celina! - Salió de detrás del sofá Donna con el sándwich en la mano y la novia emocionada lo tomó
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La boda comenzó. Todos los invitados en sus sillas blancas en el hermoso jardín. Las damas y caballeros de honor entrando entre un aro de flores
Antoinette pasaba primero, con una de las damas de honor tomando su brazo
Entre la gente, encontró a Minerva, mirándola feliz y Toni sonrió
Después de todos ellos entró la novia de la mano de su madre con la tuba de fondo
- Estamos aquí reunidos para celebrar el matrimonio de Celina Topaz y Bret Weston Wallis. Conocer a Celina y Bret ha reforzado mi idea de que aunque el amor es universal cada pareja es un única - Hablaba la ministra mientras su madre entregaba a la novia
Los novios se miraban sonrientes en cada segundo
- Celina Topaz, hoy te hago estos juramentos - Empezó Bret - Jamás rimaré "espantosa" con "esposa" - Bromeó haciendo reír a todos - Aunque me refiera a algo bueno. No me sonaré la nariz en la ducha. Prometo consultarte antes de cortarme el cabello y jamás me dejaré el bigote
- Ni la barba - Dijo risueña
- No
- No te culparé por las malas decisiones que tomes en mis sueños. Te lo juro - Continuó Celina - También mantendré vigilado ese lunar sospechoso que tienes en la espalda, aunque estoy segura de que no es nada. Y prometo que no me enojare contigo por todo cuando esté enojada contigo por una sola cosa
A Antoinette se le escapaba una lágrima, en parte de risa, y en parte por lo lindo que estaba siendo la ceremonia
- Por el poder que se me confiere, me alegra declararlos marido y mujer. ¡Puedes besar a la novia!
Los aplausos no se hicieron esperar, y Bret besó a Celina con todo ese amor que se tenían
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Contando a mis ex ✔️
EspiritualAntoinette Topaz es una mujer de treinta y tantos años inteligente, atractiva, divertida y romántica que ha tenido una vida amorosa bastante decepcionante y que está luchando para tomar mejores decisiones de su vida. Su último romance desapareció, y...