Kim Sunoo, alías, cupido, es un aprendiz harto de que la única pareja que está destinada desde hace años, por el amor tan fuerte, puro y sincero que se tuvieron, ¡No esté junto! Es más ¡Park SungHoon odia a su destinado! No lo entiende, así que en...
Sunoo terminó su clase con el maestro Cupido, pronto se graduaría, y podría por fin ser asignado como el próximo cupido en Corea del Sur, más específicamente en Seúl, donde se le había asignado, cada país tiene un cupido, debían de tener cada uno ciertos lugares, asignados de dicho país, después de todo, no es un trabajo para uno sólo ¡Son muchas personas para flechar! El trabajo de cupido es felchar a las almas destinadas, las flechas solo apuntarán a quién de verdad se está enamorando, sólo son un empujón para que se den cuenta, de que es el amor, pero en todo el mundo, ha habido una pareja que jamás necesitó de cupido, Sunoo admira a aquella pareja, es perfecta y el realmente adoraría tener un amor así, el amor que ambos se tienen, al ser tan pura, inocente y dulce, jamás muere, por lo que en cada generación, ellos solo reencarnaran para estar juntos, volverse a amar y repetir el ciclo.
El último examen que Sunoo deberá pasar para así, graduarse como cupido, es juntar una pareja, se le asignará una pareja destinada y su misión es descubrir cuando es necesario para flecharlos, sus años de estudio le ayudarán, graciosamente la pareja que le tocó es la anterior, la destinada, por lo cuál, no debería preocuparse, ellos siempre al verse saben que están enamorados, por lo qué, cuando se despide de su mejor amigo, Jay, listo para conocer y por fin apreciar de cerca la pareja que le tocó, se quiere matar.
-¡Jamás haces nada bien, Lee! ¡¿Cómo mierda es que te aceptaron en la industria?! ¡¿De verdad eres el más capacitado para hacer una jodida colaboración conmigo?!
-¡Deja de gritarme, Park! ¡No entiendo porque siempre me tratas así! ¡Hago lo mejor que puedo!
-¡No debes intentar hacer lo mejor, debes hacerlo jodidamente perfecto! ¡Eres irritante! ¡¿Cómo puedes tener club de fans?!
-¡No te metas con mis fans, Park SungHoon!
-¡No pronuncies mi maldito nombre, no lo mereces!
Sin duda, sería un gran camino.
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