適應 ◗ Bad Boy ❞ ( ✓ )

OO9

Decir que la universidad se había vuelto un caos desde que Seungmin y Hyunjin empezaron a caminar tomados de la mano y pasar mucho más tiempo juntos era poco, muchas estudiantes estaban odiando al peli rosado por haberse "robado" a Hyunjin como si fuese de ellas o algo así mientras que el pelirrojo, que resultó ser adorablemente celoso, estaba odiando a todos aquellos que veían demás al japonés.

Solo había un pequeñísimo problema.

Y es que aun cuando ellos estaban todo el día juntos y Hyunjin no se cansa de raptarlo para llevarlo a cualquier aula vacía y poder besarse por un largo rato, y joder que Seungmin amaba esos momentos, incluso cuando terminaba completamente sonrojado y debían esperar algunos minutos para poder salir y no andar por ahí como un tomatito con patas como le solía decir Jeongin, seguía, el problema era que aún con todo eso ellos no eran novios.

Si, bueno, no, aún no eran novios y Seungmin no sabía qué esperar de ello.

Llevaban una semana... ¿Saliendo? ¿Conociéndose? ¿Teniendo citas? Seungmin no sabía exactamente qué, pero desde hace una semana Hyunjin lo buscaba después de clases, lo invitaba a su departamento, compraban helados y aunque el mayor no comía cosas dulces compraba muchas golosinas para él, incluso le compro un nuevo set de plumones, le daba mimos cada vez que podía ¡Realmente estaba amando a ese chico! Incluso cuando era celoso y se molestaba era realmente caliente y... Bueno ese no era el sentido de su disputa sobre porque ellos aún no eran novios, continuaba, el problema era que Hyunjin nunca le pidió que fuese su novio, él no decía tengamos una cita, solo invitaba al menor a dar un paseo o comer algo dulce.

Y Seungmin no sabía cómo tomar eso.

Lo que tampoco sabía era que Hyunjin solo buscaba la manera adecuada de pedirle que fuese su novio, se conocía sí mismo y no quería solo preguntárselo, quería que fuera especial, el problema, no sabía cómo hacer o planificar algo cursi y lindo.

La primera opción de Hyunjin fue preguntarle a Jisung, el peliazul se burló por un largo rato de él y cuando Hyunjin le envío una foto que se había tomado con Seungmin días atrás este no se cansó de decir lo adorable y tierno que era, preguntándole de dónde había sacado a un chico tan adorable mientras que él tenía cara de querer golpear a alguien, pero del resto no tuvo buenas ideas para una propuesta que fuese linda y adecuada para Seungmin.

Su segunda opción fue ese chico de cabello gris que seguía sin caerle demasiado bien, pero Changbin no conocía tanto a Seungmin y cuando ambos le preguntaron a Minho este les dio una vaga explicación que no le sirvió de mucho.

Su última opción fue este chico de cabello rubio y expresión neutra, Jeongin, era el mejor amigo de Seungmin y conocía al peli rosado perfectamente, nuevamente ¿Cuál era el problema? Que a él Hyunjin no le parecía digno y adecuado para su mejor amigo y siempre llegaban al mismo dilema.

—¿Abrazos o mimos?— Pregunto una vez más el rubio tomando una lata de coca cola.

—Primero los abrazos y luego los mimos— Respondió un poco harto el pelirrojo.

—¿Oreos o Helado?

—Helado de oreo, por favor, claro que sé su sabor de helados favorito.

—¿Pastel?

—De crema con frutilla o duraznos— Hyunjin compraba ese pastel para su novio, aún no novio, claros que sabía su pastel favorito.

—¿Películas de Disney o studio Ghibli?— Pregunto el rubio con mirada desafiante, a Bangchan toda la situación le parecía realmente divertida, como quería poder grabar a estos dos y mostrárselo a Seungmin.

—Eso es... Oh vamos eso es trampa— Se quejó el mayor al no saber la respuesta a aquella pregunta —Es tu mejor amigo, sabes que lo amo ¿De verdad no puedes ayudarme?— Pregunto el pelirrojo con una mueca sintiendo que de nuevo solo perdía el tiempo tratando de convencer a Asahi.

—Está bien, te ayudaré.

Y aquella respuesta realmente sorprendió a Hyunjin y también a Bangchan que no se esperaba una afirmativa por parte de su novio.

La idea de Jeongin tenía sentido, y realmente no era tan difícil de llevar a cabo, quizá si un poco costosa y debían esperar algunos días, pero valdría la pena.

Cuando llegó el fin de semana Hyunjin no lo dudo para invitar a Seungmin a dormir a su departamento, y aquella propuesta de verdad logro poner nervioso al menor, haciendo reír al pelirrojo cuando se dio cuenta de lo que este había pensando.

—No haremos nada de eso— Aclaro el mayor riendo por la tierna reacción de Seungmin —A menos claro de que tú quieras— Y con eso, basto para ganarse un no tan fuerte golpe en el brazo y varios insultos de su adorable, y al parecer enojón, casi novio.

Esta vez Hyunjin no paso buscando al menor, pero Seungmin ya conocía bien el camino hasta el edificio donde vivía el mayor por lo que no fue muy difícil llegar, llevaba una mochila blanca un poco grande, está tenía un estampado sencillo de gatito, pero un gran colgante de oso panda, en ella llevaba algo de ropa y también tenía una bolsa llena de golosinas e ingredientes para preparar algo rico de cenar, porque aunque el mayor no lo supiera, Seungmin era un gran cocinero y si a Hyunjin bien no le gustaban las cosas dulces podía preparar algo rico de comer para él.

Cuando toco la puerta escucho un apresurado, ya voy, y sonidos de pasos, Hyunjin se asomó vistiendo un simple pantalón deportivo gris y una camiseta blanca, incluso así vestido era realmente atractivo y el menor no dudo en saludarlo con un pequeño beso, entrando junto al pelirrojo y casi dejando caer la bolsa que traía en sus manos cuando se encontró con un gran, gigantesco, oso panda de felpa, el departamento de Hyunjin era pequeño, un monoespacio que abarcaba un pequeño sofá y su cama, a un lado la cocina y una puerta que daba al baño, esto solo hacía que el muñeco se viera incluso más grande de lo que era, en la pequeña mesa junto al sofá había un pequeño pero precioso pastel de crema y frutillas, un envase grande de helado de oreos y un paquete de malvaviscos.

—¿Y todo esto?— Pregunto casi en un Susurro el menor, observando a Hyunjin que lo veía con una gran sonrisa.

—¿Quieres ser mi novio?— El pelirrojo se acercó sacándole la bolsa de las manos y la mochila al más bajito para dejarlas a un lado, tomando su rostro con cuidado entre sus manos mientras que este parecía procesar lo que había dicho, haciendo que Hyunjin casi repitiera la pregunta.

—¡Claro que sí!— Seungmin de verdad no podía creer aquello, asustando a Hyunjin cuando de un pequeño brinco, y con ayuda de la rápida reacción del mayor, enredo sus piernas en la cintura del pelirrojo, abrazándolo fuertemente a la par que dejaba muchos besos en su rostro.

—¿Entonces ahora sí puedo decir que eres mi lindo novio?— Pregunto el mayor acercándose con cuidado al pequeño espacio libre en el sofá para sentarse con Seungmin sobre sus piernas, acariciando con cuidado la espalda del japonés y rozando sus narices en un pequeño mimo como a Mashiho tanto le gustaba.

—Sip, ahora sí puedes decirlo— Seungmin no podía evitar reír, estaba tan emocionado, quizá debería agradecerle a Yooning por casi golpearlo y llevarlo a conocer a su lindo chico malo.