Under the Mountain

King's Jowel

Por más que quisiera no dejaba de ver la Cuidad del Lago convertirse en un infierno, no sé si es por el miedo o por un auto castigo por dejar morir a personas inocentes. Una y otra vez las caras de Fili, Kili, Oin, Bofur, los hijos de Bardo, Bardo y toda la pobre gente del Esgaroth venían a mi mente.

Me encontraba con la cabeza apoyada en el hombro de Dwalin, su brazo me abrazaba por la espalda en modo de consuelo. Todos nos lamentábamos por los hombres, mujeres y niños. Más horrible como hobbit no me podía sentir, fuimos advertidos y no escuchamos, entrar a Erebor solo trajo muerte, fuego de dragón y ruina.

Cuando creíamos que todo estaba perdido, que Smaug volvería a entrar a la Montaña Solitaria, luego de matar a todo ser viviente que vive en la Cuidad, se escucho un estruendo. Todos festejamos al escuchar, de Bilbo, que el lanzallamas había muerto, rezaba por que los integrantes restantes estuvieran sanos y salvos.

- Muchachos Thorin no solo no está si no que se dirige hacia Erebor ¿Qué le sucede?

- Nada bueno querida Bella- contesta Balin- nada bueno.

Tomamos el mismo camino que nuestro líder y al llegar nos encontramos con un Escudo de Roble completamente diferente, su actitud, su mirada no era la misma, esta última ni siquiera expresaba felicidad por recuperar su hogar. Cada día estaba peor, apenas comía, apenas dormía, se la pasaba todo el día en el tesoro de su abuelo diciendo cosas sin sentido.

Ahora me encuentro en lo que antes había sido un comedor, junto a los demás, en completo silencio, nadie se movía, nadie decía nada.

Balin nos conto sobre la enfermedad por la cual está pasando Thorin y paso su abuelo, en estos momentos entiendo la preocupación de Elrond y Bardo, que espero que este bien.

Al rato se escucharon pasos aproximarse al lugar y sus voces se escucharon voces, la verlos inmediatamente me pare y fui a abrazar a Oin, Fili, Kili y Bofur.

- Gracias a Aulë, están bien- dije mirándolos.

Nos contaron más que Kili estuvo muy mal, que al ser rechazados por el Gobernador al pedir ayuda, no tuvieron más remedio que ir a lo del señor Bardo. Unos orcos irrumpieron en la casa y fueron salvados por Tauriel, la elfa del Bosque Negro, y Legolas. La elfa se quedo a salvar a Kili y junto a los 4 enanos y los hijos de bardo pudieron escapar del fuego de dragón. Cuando escuche que Bardo, Tilda, Bain y Sigrid puede respirar.

Thorin nos llamo para que buscáramos la joya. A Bilbo y a mí nos dijo que no hiciéramos nada. Todos los demás buscaban sin descanso por todo el lugar, sin encontrar nada.

- La piedra del arca esta en estos salones-hizo una pausa- nadie descansara hasta encontrarla- con mi hermano nos miramos preocupados al escuchar las palabras de Thorin. Esto no era bueno, algo me decía que la piedra no tenía que terminar sus manos.

Necesitaba aire, por lo que me fui a la entrada del reino, estaba con mi hermano, nos sentamos y quedamos en silencio por un rato, hasta que vi que saco lo que Escudo estaba buscando, de su bolsillo

- Haces lo correcto- le digo

- Pero le pertenece a ellos, no soy quien para quitarles algo tan preciado- mira la Piedra del Arca.

- Eres su amigo y quieres lo mejor para él, aunque eso signifique traicionarlo y no dársela. Como dije es lo mejor, no solo para él, sino para todos. Cambiando de tema, vos y yo tenemos una charla, el anillo único ¿Dónde lo conseguiste? -Lo había encontrado en la cueva de las Montañas Nubladas, se le había caído a Gollum. Intente no enojarme con él, hasta ahora vino como anillo al dedo, valga la redundancia, pero le hice prometer que cuando terminara todo esto, lo iría a destruir a la Montaña del Destino.