Capítulo 7

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Cuando el castaño se despertó, sonrió ampliamente al ver la posición en la que se encontraban. El estaba acostado boca arriba con el rizado durmiendo acurrucado en su pecho. Aprovechó que esté aún dormía para poder obvservarlo detalladamente. Se veía hermoso. Su boca rosada ligeramente abierta, esos ojos los cuales Louis tanto amaba estaban cerrados suavemente y decorados con una cortina de numerosas y largas pestañas, y su cabello algo despeinado, pero los rizos aún mantenían su forma. No pudo evitar acariciar lentamente su mejilla y luego cabello, rogando que no se despertara. No lo hizo, tenía un sueño profundo. Dormía tranquilo, relajado.
El ojiazul sintió un nudo en la garganta al recordar la situación que había vivido su pequeño la noche anterior. No podía entender cómo alguien podía echar a su hijo de casa por el simple hecho de ser homosexual. Odiaba que Harry haya tenido que pasar por algo así siendo un chico tan dulce, respetuoso, amable.
Cuando logró salir del transe y despegar sus ojos del rizado, quitó al mismo de su pecho, para apoyarlo al lado suyo con cuidado de no despertarlo. Una vez comprobado que esté seguía durmiendo, se levantó rápidamente y fue hasta la cocina para preparale el desayuno. Miró la hora, eran las 09:23am, su madre ya se habría marchado a trabajar y sus hermanas estaban de vacaciones con su abuela, así que se dispuso a preparar un desayuno de bienvenida para Harry.
Optó por algo sencillo, que sabía que le saldría bien, ya que no era el mejor cocinando; hotcakes con fruta y, para beber, café con leche. Una vez estuvieron listos, puso ambos platos y tazas en la mesa, la cual decoró poniendo un girasol en el centro de esta. Observó el sitio para comprobar si lucía bien, y luego subió dispuesto a despertar al rizado.
Entró en la habitación y casi muere de ternura al verlo aferrado a la almohada como un niño que abraza a su peluche favorito. Se acercó despacio y comenzó a llamarlo.
- Hazz. -habló suave mientras acariciaba suavemente su hombro.
- Umhhh -respondió adormilado, haciendo sonreír al ojiazul.
- Hazz, es hora de levantarse. - dijo el castaño, llevando una mano hasta la melena rizada de Harry, para revolver su cabello.
- Ummh pero quiero quedarme durmiendo, contigo. -dijo para luego tomar la mano del ojiazul y atraerlo hasta su cuerpo, para que se acueste con él. El nombrado rió, y abrazó al rizado.
- Bien.. tu te lo buscaste. -avisó antes de comenzar a hacerle cosquillas por todo el cuerpo. El rizado estalló en risas mientras que intentaba cubrirse.
- Ya ya Lou me rindo ME RINDO. -dijo sin aire.
- Que fácil cedes eh, Harold. Ve al baño si quieres y luego baja a desayunar. -dijo el ojiazul antes de tomar al chico por las mejillas y plantar un beso en su nariz. - Te veo en la cocina, lindo. - Finalizó saliendo de la habitación, dejando al rizado totalmente sonrojado y con una tonta sonrisa.

Una vez Harry terminó de asearse, bajó y se encontró con el desayuno que había preparado el ojiazul y una tarjeta en la mesa que decía "Bienvenido Hazz. Me gusta mucho tu presencia aquí, aunque no tanto como tú ;)". Y sí, es probable que haya tenido que leer dos veces la tarjeta para comprobar si había leído bien o era una alucinación suya.
Antes de que pudiera decir algo, sintió unos brazos envolver su cintura por detrás y una cabeza apoyarse en su hombro.
-Bienvenido Harold. Hice el desayuno, no soy el mejor chef, pero lo hice con amor. -Harry sonrió bobamente y Louis tomó asiento, haciendo un ademán con la mano al chico para que se sentara también.
- Gracias, Lou. Es un gesto muy bonito de tu parte. De verdad no era necesario.
- Era una ocasión especial, digo, no todos los días se viene a vivir conmigo un chico tan guapo como tú, sabes? -el rizado se sonrojó.
- G-gracias Lou. T-tu también eres muy guapo. -El ojiazul sonrió en respuesta
- Bien, desayunamos? -el rizadoa asintió y comenzó a tomar su café.
- Umh Lou yo, de verdad, no sé cómo agradecerte todo esto si.. si tu no hubieses llegado ayer yo.. -tragó en seco- no se que hubiera hecho.
- No tienes nada que agradecerme, Hazz. -tomo la mano de Harry por encima de la mesa y la acarició suavemente con el pulgar- Jamás me hubiese perdonado dejarte allí solo en medio de la lluvia. Eres demasiado importante para mí como para dejarte sólo. -El rizado sintió sus ojos llenarse rápidamente de lágrimas-
- Aún así, ustedes deben tener sus propios problemas como para cargar con uno más, yo.. -fracasando en su intento de retener las lágrimas, rompió en llanto- no sé cómo pero te prometo que ya conseguiré un lugar para quedarme y los dejaré en paz.
Louis se levantó rápidamente de su asiento y se puso de cunclillas al lado del rizado.
- Hazz, no tienes que buscar ningún sitio, ya te lo he dicho. No eres una carga, me gusta que estés aquí, a todos. Si quieres puedo ayudarte a buscar un trabajo de medio tiempo para que puedas ahorrar para la universidad y demás, pero no necesitas mudarte a ningún sitio. De ahora en adelante este es tu hogar, y tú eres uno más de la familia, de acuerdo? -limpió las lágrimas que rodaban por las mejillas del rizado.
- Está bien, gracias, Lou. -respondió antes de arrojarse a los brazos del castaño, quien lo recibió de inmediato, con una mano rodeando su cintura y la otra acariciándole el cabello. - Te quiero, Lou. -El ojiazul sintió como fuegos artificiales comenzaban a estallar en su interior.
- También te quiero, Harold. No sabes cuánto. -Harry de separó del abrazo y sonrió.
- Lo siento, no te dejé desayunar. -Louis retomó su asiento.
- Descuida, aún sigue caliente. Bien, que opinas de si cuando terminamos vamos a buscar el resto de tus cosas, así puedes acomodarte? Tengo unos estantes y cajones del armario vacíos que puedes usar. En cuanto a la cama.. Espero no te moleste, pero tendrás que dormir conmigo, al menos hasta que Lottie se vaya a la universidad. -Harry sonrió.
- Si, creo que podemos ir en cuanto terminemos. Y no te preocupes Lou, cualquier sitio está bien para mí. Además, me gusta dormir contigo.
El rizado no se dio cuenta de que había dicho en vos alta la última frase hasta que vió que el ojiazul lo miraba con una sonrisa burlona, lo que causó que sus mejillas de tornsran de un color carmesí instantáneamente.
- También me gusta dormir contigo, Harold.

~~~

Habían pasado unas cuantas horas del desayuno, los chicos ya habían ido por las cosas del rizado, agradeciendo que los padres de este estaban trabajando.
Harry estaba acomodando las cosas en los espacios que el ojiazul le había indicado, cuando escuchó la puerta abrirse.
- Como vas con eso, Hazz? -habló el castaño.
- Ya casi termino, por qué?
- Cuando termines prepárate, quiero llevarte a un sitio.
- Bien umh, puedo saber a dónde?
- No seas ansioso, Harold, es una sorpresa.
- Algo así como una.. ? Olvídalo, no tiene sentido.
- Ibas a decir "como una cita?"?
- S-si, pero olvídalo, bien?
- Pues, en realidad, lo es.
- Qué?
- Que sí, es una cita, hazz.
- Lo es? Quieres tener.. una cita.. conmigo? -Louis río.
- Claro que sí, Harold. Tú quieres tener una cita conmigo? -el castaño arqueó las cejas
- S-si, si quiero tener una cita contigo, Lou. -Contesto con una sonrisa y sus mejillas totalmente sonrojadas.
- Genial -sonrió- entonces, cuando estés listo baja y nos vamos, de acuerdo?
- De acuerdo.

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Holaaaaaa! Bueno... aparezco.. JAJAJAJA. No me maten, perdón. Se que no actualizo hace mucho, pero estaba en un.. bloqueo escritor (? No sé si eso exista pero les juro que no tenía inspiración para escribir. Igualmente ahora tengo un montón de ideas AAAAAA. Seguramente mañana subo otro capítulo!! No es por hacer spoilers buttt, la cosa se pone mucho más interesante en el próximo cap!! Ya falta poco para el final, que emoción. Gracias a todxs lxs que están leyendo, comentando y votando por esta fic!

Comenten que lxs leo!!! Lxs amo. Su escritora fav; Bren (ok no) <3

PD: seguramente haya un montón de errores en el cap pero estoy escribiendo esto a las 3am, seguro mañana los arreglo!!

El chico del paredónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora