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- No, no sé a qué se refiera con lo que me ha dicho, quizás le gustas o quizás y le agradas mucho que como amigo no piensa traicionarte o no lo sé pero eso fue lo que me ha dicho.- dije mientras me sentaba en mi ventana.-

-¡Ay que emoción! ¿Qué hago? ¿Me lanzo poco a poco? ¿Le coqueteo? Ahhh ¡Dios! - gritó-

- Tranquila, tampoco es como que haya dicho que va a casarse contigo,-reí- lo importante es que seas tú, y no te hagas ilusiones por qué no me dijo que le gustas nada parecido a eso

- Si pero como vas a decirme que no me emocione si eso significa que hay oportunidad.

- creo que ha sido mala idea contarte, ¿sabes que si a ti se te sale algo yo quedaré como chismosa, lo sabes verdad?

-Bueno está bien, me calmo para que vuelvas a contarme algo otra vez, pero no sabes cuánto me alegra saber eso.

- Lo sé, bueno, tengo que colgar que tengo que preparar mis cosas para mañana y terminar con mi presentación del viernes ya solo tengo mañana y aún me falta mucho, nos vemos mañana.

Colgué y comencé a escribir e investigar el tema que me había tocado, sobre la segunda guerra mundial, por ratos tenía impulso de escribirle a Milán y preguntarle cómo iba con el trabajo, pero después me arrepentía al recordar lo poco amigable que era conmigo.

Adelanté bastante sobre el tema tanto escrito en mi libreta como mi presentación, sentía mucho estrés y me sentía triste, aproveché que estaba sola en casa y puse música a todo volumen mientras cantaba a todo pulmón cada una de ellas y bailaba, la verdad es que era una de mis mejores terapias.

Después de un rato cantando y disfrutando mi tiempo sola me puse a leer un poco, la verdad es que el libro me estaba encantando ¿Cómo Abby albertany no iba a enamorarse de Travis Maddox? Cierto, Travis tenía sus defectos pero trataba de ganarse un poco a Abby. 

Mensaje de Milán:

-Está lista la ilustración del tema, espero que quedes conforme con ella, descansa ;).

- Se que estará perfecta, descansa :).

A veces sentía que este chico me odiaba y otras veces sentía que simplemente no sabía cómo hacer amigos, la verdad el único amigo que le conocía era su primo Sebs pero la verdad es que Sebs era un amor de chico, creo que tiene sentido el por qué dijo que él no le haría daño a Ale, me recosté en mi cama viendo al techo e imaginando como mi vida sería si mi padre aún estuviera, mi relación con él era muchísimo mejor que la que tengo con mi madre, la mayoría de las chicas tienen ese apego con sus madres que es como una amiga a la que se le cuenta algunos secretos, pues a pesar que yo adoro a la mía sabía que podía contar más con mi Padre, en las cenas nos sentábamos en el sofá a comer mientras me contaba historias que le habían pasado a él cuando niño, algunas de ellas hasta me hacían llorar, cuánto daría por pasar más tiempo con él.  .-Mis lágrimas comenzaron a caer mientras veía al techo y recordaba todos los buenos momentos y malos que pasé con él-. Seguí llorando hasta quedarme dormida.

Mi alarma sonó y me levanté a tomar una ducha, el invierno comenzaba, el cielo gris y el día frío, justo como yo me sentía por dentro, y por alguna extraña razón los días grises me reconfortan bastante al saber que el cielo se pone triste y las nubes lloran.
Bajé a la cocina a comer algo, me despedí de mi madre y me subí al auto de Alesa.

- Por favor no me pidas que no me emocione .- dijo mientras se estacionaba .-

- Que sea algo interno por favor .- reí- ¡Dios! ¿Que hice para que me torture así?

Alesa me vio sería .- no seas así, algún día sabrás lo que es que alguien te guste y no te haga caso.-

- Algún día el cual no es hoy, cariño.-

- pero lo sabrás.

Nos bajamos del auto y caminamos hacia nuestra clase, fuimos una de las primeras en llegar, después de 30 minutos la clase comenzó, Milán nunca llegó y Sebs se veía un poco triste... ¿Le habrá pasado algo? .- pensé.-  ni siquiera sé por qué estoy pensando en Milán.

La clase terminó, fuimos a comer, Alesa y Sebs pasaron su día juntos, y yo estuve sola, la verdad es que no me aburre ya que me da más tiempo de poder terminar el libro.

El día se pasó rápido, de regreso a casa ninguna de las dos habló, se me hizo raro ver a Alesa en silencio.

- ¿Pasa algo?

- No, nada ¿Por qué preguntas?

- Por qué estás callada y sabemos que si no hablas es por qué algo te tiene pensando, ¿ Qué es?

- No es nada, solo que creo que tienes razón, Sebas no me fallaría pero como amigo, mis esperanzas se han ido en picada al suelo.

- Te dije que no te ilusionaras, aun así se buena amiga para él y apóyalo en lo que puedas, deberíamos de salir los 3 este fin de semana.

- Podríamos traer a Milán también.

- ¿Por qué? No creo que a él le agrade tener que verme .

- Pues no lo sé, pero quizás y si le vendría bien salir .- dijo encogiendo los hombros.-

-¿Y eso lo dices cómo por qué?

- Creo que a todos nos viene bien salir de vez en cuando, pero solo digo, no estoy diciendo que tenga que ser así si no quieres, tampoco es que quiera que estés incómoda.

-  Claro... Bueno ya veremos qué hacemos, en lo que lo pienso avísale a Sebs.

- Ciara... .- susurró.-

- ¿Qué pasa? .- pregunté.-

-  ¿Tú te fijarías en Sebas?

- No, es un chico guapo, tierno, adorable, alguien en quien se puede confiar pero ya está, jamás lo he visto con otros ojos y no podría, menos sabiendo que tú quieres algo con él. ¿Ah qué viene la pregunta?

- Ah dicho que te le haces linda... -susurró-

- quizás como persona o amiga, jamás me ha insinuado algo y mucho menos yo a él y sabes que lo conozco desde antes que tú, así que tú no te preocupes. -le di un beso en la frente-  anda loca vete que se te hará tarde.

- pues si te bajas de mi auto con gusto me largo .- dijo riendo.-

- Si... Claro tiene sentido .- reí-  me bajé del auto y Ale se fue.







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