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Me desperté unas horas después, tomé mi celular para ver la hora "19:40" vi que tenia un par de notificaciones y un mensaje de texto supuse que era de Milán, era el único que a pesar de tener redes sociales aun enviaba mensajes de texto.

Mensaje de Milán (idiota): ¿Como te sientes? ¿quieres ir por un helado?

Sonreí al ver tal mensaje ¿será que en verdad se preocupa? -me pregunté-. respondí el mensaje:

Yo: Hey, ya me siento un poco mejor, claro, ¡nunca le digo que no a un helado! :) 

Milán (idiota): Estoy en 10 minutos, te marco cuando este afuera;) 

Me levanté del sofá y fui corriendo a mi cuarto a cambiarme y ponerme un poco de maquillaje, para no verme igual de mal como me sentía. 

Mensaje de Milán (idiota): Ya estoy afuera pequeña ;) 

Mensaje de Alesa: Amiga, ¿cómo sigues? ¿quieres que llegue con helado y vemos una peli? 

Yo: Amiga, estoy un poco mejor, de hecho Milán ha venido por mí para que vayamos por helado, te aviso cuando este de vuelta para que te vengas! tqm. 

Alesa: OMG!! ¡me cuentaaaas! suerte cariño tqm.

tomé un bolso pequeño para llevar dinero llaves y celular, me eché perfume, bajé corriendo, apagué las luces y salí de casa, justo estaba ese chico de ojos preciosos y cabello rubio afuera de su auto fumando, pude notar que Milán jamás fumaba dentro del carro, que solía esperarme afuera, que cuando fuma se reclinaba sobre su auto, con las piernas cruzadas y abrazándose con un brazo, mientras caminaba hacia él lo vi de pieza a cabeza, llevaba un sudadero gris, una chaqueta de lona azul, vaqueros negros y converse altos negros. 

- Hola -saludé-.

-Hola pequeña .-respondió mientras tiraba su cigarro, caminó hacia la puerta del copiloto, abrió la puerta y dijo.-por favor pasa-. 

- Gracias, que lindo.- sonreí, caminé hacia la puerta y entre al auto-. 

Milán cerró la puerta, caminó hacia el otro lado del auto y entró. ¿me has llamado lindo? -preguntó sonriendo-. 

-Claro, me refería al gesto.- respondí sonrojada.- Y tú también.-pensé-.

Él rió, apretó sus labios y respondió .-okay.- encendió el auto y esta vez no puso la radio, lo cual se me hizo extraño. - Te he visto leyendo varias veces el mismo libro ¿de que trata? -preguntó-. 

Me acomodé, giré mi cabeza hacia él y respondí.- se llama Walking Desaster, es una novela, sobre un chico malo se podría decir, que se enamora de la chica buena, ella sabe que el no es bueno para ella y trata de evitarlo, pero él siempre la busca y la enamora, él quizás se enamoro de ella mucho antes que ella de él, honestamente creo que Travis es un chico con el que yo no saldría.- dije-. 

- ¿Travis?

- Sí, Travis Maddox, el protagonista del libro.

- ¿Y por qué ese tal Trevor no sería tu tipo? -preguntó-.

-Es Travis no Trevor y porque a mí no me gustan los chicos que le gustan los problemas, los que utilizan a las chicas o los que mienten, creo que no podría y de no saberlo al enterarme lo dejaría.- respondí-.

- ¿Aunque lo ames?

- Sí, aunque lo ame. 

Milán ya no respondió, nos quedamos en silencio los últimos minutos, al llegar al lugar nos sentamos en unas mesas que estaban afuera.  

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