EPÍLOGO

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-¡Hayley Mikaelson-Salvatore! - grité a nuestra hija de 5 años al ver mi cabello verde - ¡Ven aquí ahora!

Escuché su risa y como corría para esconderse, iba a ir a buscarla pero el llanto de unos bebés me distrajo, por lo que me dirigí a ellos.

Llegué a la habitación de los bebés, vi como ambos estaban despiertos, al verme con el cabello verde se quedaron callados por unos segundos y después comenzaron a reír.

-Claro ríanse de su madre - dije mientras los tomaba en brazos - Solo les pido que cuando ustedes crezcan no me hagan lo mismo

Los bebés tenían aproximadamente 10 meses, eran gemelos, aunque si podíamos diferenciar quien era quien.

Elijah Mikaelson-Salvatore tenía los ojos azules al igual que Hope, su cabello era negro y su piel era blanca.

Stefan Mikaelson-Salvatore por alguna razón tenía los ojos verdes iguales a los míos, a diferencia de Elijah, Stefan tenía cabello castaño y su piel de igual manera era blanca.

-Bueno chicos hora de buscar a su mami - dije mientras salía del cuarto para así dirigirnos a la cocina, donde probablemente estaría Hope

Hope y yo nos habíamos casado hace 10 años, vivimos en Nueva York por un tiempo, hasta que decidimos que queríamos formar nuestra familia, por lo que volvimos a Mystic Falls.

Hope decidió que ella quería tener a los bebés y yo acepté eso, buscamos un donante y se embarazó por inseminación artificial, nuestros hijos eran trihibridos igual que ella.

Razón por la que nuestra hija Hayley usaba su magia para hacerme pequeñas bromas, Hayley tenía los ojos verdes, su piel era un poco más morena que las de los gemelos y tenía el cabello castaño.

-Buenos días - dije mientras llegaba a la cocina, vi a Hope quien se encontraba haciendo el desayuno, quien al escucharme volteó a vernos

-Buenos días - apagó la estufa y se acercó a nosotros, tomó a Elijah de mis brazos y lo cargó en los suyos, miró mi cabello y contuvo una risa - ¿Que te sucedió?

-Nuestra pequeña hija lo hizo - dije mientras miraba a Hayley, quien se encontraba desayunando - ¿Podrías deshacerlo? No quiero tener que ir al trabajo así

-No lo creo, el verde te sienta bien - dijo Hope mientras reía - ¿Tu llevas a los niños con tu madre?

-Claro, ¿tienes reunión hoy? - pregunté, ella asintió

Tomamos asiento y comenzamos a desayunar, yo me encargué de darle de comer a Stefan y Hope le dió de comer a Elijah, una vez que terminamos de desayunar limpiamos la cocina y cada quién salió de casa.

Ambas trabajamos en la escuela Salvatore, Hope se había convertido en la directora cuando Alaric decidió retirarse de una vez, yo era maestra de historia, me gustaba enseñar.

Conduje hasta la casa de mis padres, me estacioné fuera de esta, bajé a los bebés y me dirigí a la puerta, toqué el timbre y esperé a que mi madre abriera.

-Hola cariño - dijo cuando me vió, dejó un beso en mi mejilla y tomó a Elijah - Pasa

-¿Donde están mis niños favoritos? - escuché como dijo mi padre cuando nos vió y se dirigió a tomar a Stefan

Cuando mi padre escuchó el nombre que habíamos escogido para el bebé lloró y mucho, sabía lo que significaba para él.

-Vendré por ellos por la tarde - dije mientras dejaba un beso en la cabeza de cada niño

-Queríamos invitarlas a cenar - dijo mi madre mientras me miraba - Claro si es que pueden

-Si está bien, yo le digo a Hope - me acerqué y dejé un beso en las mejillas de mis padres - Los veo al rato

Me dirigí a la escuela, tenía que estar a tiempo para dar la clase, una vez que llegué a la escuela entré y caminé hacia mi salón de clases.

Durante el camino varios alumnos me saludaban, se veía raro ya que yo parecía de su edad pero en realidad era su maestra.

Las gemelas se habían convertido en vampiro, una de las razones fue para evitar la fusión y la otra era para poder estar con sus respectivas parejas, Josie se había casado con Jade hace 3 años y Lizzie se había casado con MG el año pasado.

Landon se había convertido en maestro de música de la escuela, él era el padrino de Stefan, Landon había dejado de envejecer a los 20, por lo que lo asociamos a que el era un fénix, no había mucha información de dónde buscar, por lo que eso parecía lo más lógico.

Ninguno había dejado Mystic Falls por completo, sabíamos que este era nuestro hogar y que si nos fuéramos, siempre terminaríamos volviendo aquí.

Cada quien vivía su vida, todos éramos felices, cada uno se había encargado de formar su familia, las cosas por fin se habían acomodado a nuestro favor, sin más monstruos o un pozo de lodo que fuera una amenaza para nosotros.

𝐄𝐓𝐄́𝐑𝐄𝐎 (Hope Mikaelson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora