Uno para todos y todos para Wei Wuxian

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La tranquilidad del castillo se vio opacada por la matriz que se encendía, anunciando el prematuro regreso de los jóvenes.

Wen Qing fue notificada y corrió hacia el lugar con un botiquín, mientras que llevaba una camilla. Si regresaban tan pronto, había pasado algo. Grande fue su sorpresa al ver cómo había un integrante extra, está noche se ponía peor con cada minuto que pasaba. Reconoció al niño que agarraba con fuerza el cuello del zorro hasta casi asfixiarlo

Wei Wuxian dió unas palmaditas en la espalda del menor, --ya estamos aquí ... ¿Puedes soltarme?

El menor vio asombrado el castillo, jamás lo había visto en su vida. Rápidamente bajo de la seguridad del agarre del mayor, viendo con curiosidad su entorno

--Wei Wuxian --, llamo la Wen irritada, preguntando con la mirada la razón del existir del Jin en su hogar

--Anda dicelo, se la confianza que ambos se tienen. Tu ya lo sabías, ¿no es cierto?

La mujer calló ante la insinuacion, acercando el botiquín a su pecho, manteniendo la mirada roja del contrario lo más que podía. Con el paso del tiempo aprendio a no doblegarse ante el enojo de Wei Wuxian

--Ja lo sabía. A Ling te llevaré a tu habitación, mañana conocerás a tu primo A Yuan --, sonrió amable hacía el menor con sus ojos grices, --Lan Zhan, descansa --, se despidió guiñando un ojo al de blanco, este simplemente aparto la mirada. Su vista se dirigió a la Wen, quien se había marchado notablemente disgustada.

Los jóvenes se habían despedido de él en una reverencia, la cual acepto.

Cayó abruptamente en su cama mirando el techo, el silencio reinaba en el lugar, ni siquiera los insectos cantaban ante el ambiente tan pesado. En la oscuridad del lugar recordó los sucesos del día, como si una película se tratase. No comprendía, ¿porque no detenía a ese zorro? Días atrás había aceptado tener algún sentimiento por él, pero, ¿Y si no era real?

Se incorporó, busco por todos lados los libros que había solicitado de su hermano, no estaban, tampoco sus primeros escritos. Escucho un suave tarareo afuera, por su ventana miró a Wei Wuxian caminando con algo en sus manos.

--Wen Ning, llévame abajo

--L lo siento señorito, es toque de queda n no puedo dejarlo salir --, tartamudeo nervioso

--Entonces devuélveme mis libros--, exigió con el ceño fruncido. La casa se había quedado de nuevo en silencio

--A Ning, ya te dije que lo trataras como el señor de esta casa --, una voz hizo temblar un poco la casa y a él mismo

El Lan se giró desenvainando a Bichen. El zorro estaba sentado en el marco de la ventana leyendo lo que el buscaba, --damelo

Wei Ying, --Ven por ellos --, rio saliendo por la ventana. El Lan lo persiguió por los tejados del castillo, el zorro se movía elegante ante los ataques del Lan. Su risa adornaba la noche como un murmullo secreto, algo que solo la luna observaba.

Wuxian en un mal aterrizaje por una teja salida casi cayó del techo, sin embargo, fue sostenido de sus solapas. La visión del Lan se torno a ese sueño que fue el causante de traerlo a ese lugar

--Tú ...

Sonrió, --Yo --, con su mano libre agarro el brazo de Wangji y ambos cayeron juntos en el jardín. El Lan había cerrado los ojos esperando el golpe que jamás llegó, estaba en una amaca con almohadas y cojines, mientras el zorro parado en frente de él ojeando los libros y escritos que él tenía con aburrimiento

--Lan Zhan, siempre había adulado tu conocimiento. Pero esto es una burla cruel --, arrojo los libros al regazo del menor, quien lo miraba enojado, -- No me veas así, yo mismo te dije que cualquier cosa que quisieras saber de mi especie te la diría, esos libros solo tienen la información a la mitad

Mi Kyubi no KitsuneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora