I never forget you

Capítulo 3

Capítulo 3

Emma

Seis años atras...

- ¡Bienvenidos a Nueva York estudiantes! - dice la profeosra Alvarez. - Para el proyecto de esta excursion, cada estudiante de tercer año sera emparejado con un estudiante de ultimo año. Por favor, trabajen juntos para completar su proyecto de investigacion. - tomó una bocanada de aire y continuó- Aquí estan las parejas: ...Josephine Walker y Sam Brown... Lauren Chen y Stefan Wilson..

-Queria que nos tocase juntas. - le digo a mi amiga, que se encuentra a mi lado.

- Ash, esto es tan injusto.

- Y por último Emma Lockwood y Tyler Johnson. - anunció la profesora.

- ¿quieres intercambiar? - escucho que ese Tyler le comenta a su amigo.

- Oh, ¡y nada de intercambios! - interrumpe otra vez la profesora.

Genial. Pienso

Bueno, ¡él está tan contento como yo con las parejas!
Notese el sarcasmo.

No puedo creer que me emperejaran con "soy el chico enojon que ama el futbol y que no le importa nada". Esto va a ser una mierda.

Pero a pesar de mis pensamientos sobre el, cuando nos pusimos a trabajar en el proyecto, la conversación empezó a fluir con facilidad y me descubrí disfrutando de su compañia.

Como si la fachada de niña buena que habia construido durante años pudiera finalmente caer.

- Lo cual básicamente se resume a que el significado de la vida es que termina.

- Es triste pero real, gracias por traerlo a la platica. - comento yo.

- No me lo digas a mi, culpa a Franz Kafka.

- Ese hombre se murio hace casi 100 años.

-Entonces supongo que no es tu dia de suerte.

- La historia de mi vida.

- Eso si es pesimismo. - comenta el - ¿qué cosa en el planeta podría lograr que una chica que lo tiene todo piense eso?

¿Eso pensaba de mi?

- Ey, no sabes absolutamente nada de mi y mi vida. ¿y sabes qué ? Puedes terminar el trabajo sin mi, me largo.

- Espera - de repente siento como el toma mi brazo y sentí una extraña vibración pero... fue algo... lindo.

- ¿para qué ? ¿para que sigas insultandome? no gracias.

- Nono, para disculparme.

- No tengo tiempo para escuchar tus falsas disculpas.

- Esta bien, no voy a pedirte perdon. ¿pero podrías al menos escucharme?

- Supongo. - dije no muy segura de lo que me quería decir.

- Tienes razón, no te conozco, ¿entonces por qué e no hacemos algo al respecto?

- Esta mañana era la última persona con la que querías pasar el día, ¿y ahora quieres conocerme? Ya, no lo creo.

- De cierta forma, tambien me lo debes. - dice con una sonrisa torcida en su rostro.

- ¿perdón? ¿que te debo yo?

- También dejaste que los rumores dicten lo que piensas de mi. Asi que demostremos lo contrario.

No es mala idea, pensé.