Kurayami No Akuma

Capítulo 2. Imperio de la Corte

El Imperio de la Corte era una organización dentro del Imperio Cristal, en este imperio sólo gobernaba una emperatriz sin emperador, su nombre era Gwenyth Shinsei, la más respetada por los demás reinos quienes quedaron atados a sus grandes beneficios y le debían honra y respeto, o esas eran las palabras de la emperatriz.

Al enterarse del desastre en el bosque prohibido, mandó a sus hombres para examinar el terreno y atar cabos sueltos, sus hombres regresan con información del rastro de 2 demonios, uno era un demonio de rango élite de fuego espiritual y el otro un demonio con información desconocida, era un poder oscuro, pero tenía rastros de ceniza, al ver estos exámenes, la emperatriz parecía que conocía este poder.

Gwenyth: ¿qué les parece? Así que nos volvemos a encontrar mi antiguo enemigo, ¡traigan al reino Oscuridad ante mí!

Así los 4 príncipes del reino Oscuridad se presentan ante la poderosa emperatriz Gwenyth Shinsei, ella los mira como basura que son para ella, se dirige al príncipe Nelson que estaba más adelante que sus hermanos por ser la cabeza del reino.

Gwenyth: mucho gusto príncipe Nelson MoonLight, me alegra verte...otra vez —hace cierto enfoque de rencor en lo último.

Nelson: — fuerza su sonrisa— sea exacta y no nos haga perder más tiempo.

Gwenyth: ¿tú te atreves a hablarme de esa manera? —se acerca a su oído y le susurra—: No me gustaría delatar tu verdadera cara frente a tus hermanos.

Nelson: no te tengo miedo —la mira con unos ojos dorados fríos y sin expresión— pero si abres la boca créeme que te vas a arrepentir.

Ambos se separan del otro, la emperatriz continúa con lo que iba a mencionar.

Gwenyth: analicé el incidente de ayer, y encontramos rastros demoníacos, demonios en un reino...no creo que sea buena reputación para ustedes.

Nelson: ¿de qué estás hablando? ...sabes que los demonios solo están en los mitos.

Gwenyth: ¿tú crees? Por favor no puedes ser tan cerrado en esta vida príncipe Nelson, si existen los ángeles a quienes rezamos, también deben existir los demonios...y demonios fuertes como los que yo conozco...

Nelson: no creo en ángeles ni en demonios, lo que sucedió ayer, fue solo un accidente de un ladrón que salió de repente.

Gwenyth: aun así, tienes que convencerme de lo contrario... si es que quieres que los deje coronar a un cobarde —mira a Cassiel de forma burlona.

Nelson: ¡basta! —trata de controlar la ira y aprieta el puño— tenga mucho respeto emperatriz Gwenyth, no voy a tolerar burlas hacia el príncipe Cassiel frente a mí, que sea rey o no, ésa no es tu decisión.

Gwenyth: pero que falta de respeto...hagan lo que quieran, su reinado no tendrá la gloria que desean alcanzar y tendrán que volver ante mí.

El príncipe Nelson ya estaba más cansado de esa mujer y solo se retiró llevándose a sus hermanos, Vanadio estaba preocupado por el resultado de haber hecho enojar a un imperio tan potente que, si quisiera, los pueden desterrar de su propio reino.

Al llegar al reino Oscuridad, Tyler toma gentilmente el hombro de Cassiel.

Cassiel: ¿eh?

Tyler: tengo algo que mostrarte, sígueme.

Tyler guía a su hermano hasta un sótano muy profundo, bajan con mucho cuidado ya que estaba tan oscuro, solo eran iluminados por hilos morados, llegan a un pasillo con un mural que guardaba algo secreto, el príncipe toma una caja y se lo muestra a Cassiel.

Tyler: esto, es un artefacto muy valioso, nuestro hermano lo posee, es una reliquia familiar muy importante.

Cassiel: ...es realmente, maravilloso... ¿qué hace?

Tyler: se dice que posee un poder fuera de nuestra comprensión, un poder que nos ayudará a vencer a nuestros enemigos, no hubo una amenaza para comprobarlo, pero un rey siempre debe estar preparado.

Abre la caja y revela un rombo rojo muy hermoso e idéntico, era una gema tan real y no una artificial.

Tyler: lo vas a poseer cuando te coronen, así, el reino sabrá que están a salvo de cualquier amenaza...pero, pase lo que pase, nadie debe quitártelo, sé muy discreto.

Cassiel: e-entiendo...muchas gracias, Tyler —mira un poco más la gema.

En 2 días debían emprender un viaje hacia una aldea que los había citado, también ir con el príncipe del reino Hielo, Cassiel debía elegir su atuendo para la ceremonia, pero ningún traje combinaba con su belleza o los detalles eran demasiado, así que podía dejar eso para el final, va a su habitación...pero tenía un poco de angustia, se sienta en su cama y recuerda lo que había dicho Gwenyth, se lleva su mano a su pecho con la esperanza de que no lo hubiera reconocido...

— ¿crees que esto acaba aquí? Je no tienes idea de con quién te metes demonio.

Una figura femenina sonríe de forma maliciosa con ángeles sonriendo de igual forma y con unos ojos rojos resplandecientes.