𝐒𝐄𝐋𝐂𝐎𝐔𝐓𝐇. ( joo seok-hoon )

𝐟𝐢𝐯𝐞. the thief

　　　　　　　　
　　　　　　　　

❛ ━━━ chapter five
THE THIEF. ❜

　　　　　　　　

　　　　　　　　

　　　　　　　　

　　　　　　　　

　　　　　　　　LA CHICA ESCRIBÍA LAS RESPUESTAS EN SU LIBRO SIN DARLE MUCHA IMPORTANCIA, su tutora se paseaba por la habitación mientras esperaba que Seok-Hoon y Ye-Rin terminaran su trabajo. Anna observaba las cosas del estudio de los gemelos, Seok-Kyung no se había presentado a su lesión.

Ye-Rin estudiaba junto a ellos ya que su madre no estaba particularmente interesada en admitir extraños a su hogar, y los gemelos eran más que felices de recibirla.

Anna se detuvo al momento de pasar por el escritorio de Seok-Kyung, estaba pintado de intenso rosa y era decorado por varios objetivos repartidos en la superficie. Pero un objeto llamó su atención más que los otros brillantes y extravagantes objetos, era normal, ordinario, una frasco de patillas.

Destacaba como un pulgar hinchado, levantándola sigilosamente la agitó ligeramente descubriendo que estaba casi vacía, ella calculaba solo un puño de ellas. Asegurándose que nadie la estuviera viendo deslizó el pequeño frasco en el bolsillo de su pantalón y regresó a la mesa donde sus estudiantes se encontraban.

A nadie le importaría si una medicina cualquiera desapareciera, ya se veía vieja y abandonada, ademas, con todo el dinero que poseía la familia podrían reemplazarla fácilmente.

Rápidamente transfirió el frasco de su bolsillo a su bolso antes de tomar unos macarons de la bandeja, su acto no pasó desapercibido por el gemelo.

Ye-Rin perdió la concentración cuando Seok-Kyung entró a la habitación, le dio una sonrisa antes de jugar con los dedos de su novio. El chico unió su mano con la de ella presionando un beso en ella causando una risa en ella por el cosquilleo.

—¿Podemos terminar antes hoy? —Seok-Kyung pidió mientras caminaba hacia la mesa.

—¿Olvidas que comenzamos tarde? —la tutora replicó.

—Si terminamos temprano, puedes ir a enseñar a otro lado —Seok-Kyung le dijo reprimiendo una risa, bufó maliciosamente antes de sonreír —te gusta el dinero.

Ye-Rin frunció el ceño mientras sus labios sonreían ligeramente, ¿quien no lo hacía? Era naturaleza humana ser codicioso, nadie podía mantenerse un santo, especialmente cuando vivías en un mundo corrupto como el de ellos. Era instinto querer algo, incluso aunque trates de negarlo, seguirás queriendo lo que no tienes.

Anna recargo sus codos sobre la mesa y suspiro —Tienes razón. Me gusta el dinero, tengo que hacer dineros. Por eso necesito quedarme y enseñarles, si no se atienden al contrato. Tendré que pagar una penalización —respondió bruscamente—. ¿Dije las cosas claramente?

Levantándose, Anna prácticamente arrebató la solicitud de ingreso de Seok-Kyung y la movió hacia el libro —Apresúrate y responde esto—. Ordenó.

—¿Cual es tu problema? No quiero hacerlo —Seok-Kyung respondió mientras la miraba fijamente. El chico volteo los ojos a las dos chicas que peleaban sabiendo que no terminaría bien para la mayor de ellas.

—¿Es por qué no sabes como? —Anna se burló mientras se inclinaba hacia en frente—. No se como eres la primer estudiante en la Preparatoria de Artes Cheong-Ah —expresó sus pensamientos—. En mi opinión, no eres tan inteligente.

Ese fue el último hilo para Seok-Kyung que se puso de pie, el enojo era evidente en sus ojos mientras se acercaba a su tutora, inmediatamente rebasando su estatura.

—Sal de mi habitación —la empujó mientras Anna daba unos pasos atrás—. Ahora —Ye-Rin por fin se harto de su parloteo.

—Creo que deberíamos terminar antes hoy, necesitamos escribir nuestras solicitudes para la universidad —dijo firmemente atrayendo la atención de la habitación.

—De acuerdo, solo por hoy —Anna murmuró mientras guardaba sus cosas.

Sin saber que Seok-Kyung había tomado uno de sus llaveros y lo introdujo sigilosamente a la bolsa de su tutora.

　　　　　　　　

　　　　　　　　

　　　　　　　　

　　　　　　　　UNA VEZ QUE LA TUTORA SE HABÍA IDO, Seok-Hoon interrogo inmediatamente a su gemela —¿Qué crees qué haces?

—Merece aprender una lección, solo así aprenderá a no dar órdenes —respondió en un tono sarcástico.

Ye-Rin camino hacia el escritorio de Seok-Kyung para tomar las pastillas se había dejado antes de comenzar la clase, pero para su sorpresa, el lugar donde las había colocado se encontraba vacío. Giro su cabeza hacia el par obteniendo inmediatamente la atención de su novio que notó su expresión.

—¿Qué ocurre? —pregunto mientras se acercaba.

—¿Estas segura que solo metiste tu llavero a su bolsa? —le pregunto a la chica, Seok-Kyung se veía confundida, así que solo asintió —Mis pastillas ya no están aquí— comentó y la expresión de ambos palideció —las dejé aquí antes de clase pero ya no están—. Ye-Rin comentó.

—No vi el frasco cuando tome el llavero—. Repitió la gemela. Los tres parecieron darse cuenta de lo mismo simultáneamente—. Oh por Dios.

Anna Lee.

　　　　　　　　

　　　　　　　　

　　　　　　　　

NOTA . . .
Doble actualización porque vengo inspirada.