8 maricos hacen 1 desastre »Ateez« [Venezuela AU]

16: JongHo = pato

YeoSang se despertó y en menos de un segundo, quiso reventarse la cabeza contra la pared. Tenía unas ganas trifásicas de vomitar y la migraña le respiraba en la oreja.

Andaba enratonao'. Quién mierda lo habrá mandando a tomarse como el propio viciado todos los guarapitos que Wooayoung le servía.

Definitivamente, aquel 31 de diciembre había sido una loquera total.
Recordaba muy pocas vainas de lo que había pasado, a pesar de haber sido una fiesta medio sana (que ajá, dejaron solos a un bojote de chamitos hormonales bajo los efectos del alcohol sin supervisión adulta) y esperaba no haber hecho una estupidez delante de nadie.

-Verga. -se quejó mientras se sobaba el pescuezo, pues le dolía el cuello de dormir en el sofá de la sala de la casa de San y JongHo. Bostezó y descubrió que el aliento le olía a mierda. Menos mal su mamá le empacó el cepillo de dientes. Miró pa' todos los lados y descubrió que en el piso de la sala habían 2 bultos envueltos en sábanas y durmiendo con los cojines del sofá.
YunHo y MinGi andaban era en el quinto sueños abrazados el uno contra el otro, las jetas abiertas y más muertos que vivos.
Que maricos, pensó. Volteó la cabeza y se encontró con que MinJae, TaeHyun y YeonJun estaban todos doblados y descuadrados durmiendo todos en un mismo sofá. Erga, el dolor que iban a tener esos bichos cuando se despertaran no iba a ser de ese mundo. ¿Cómo coño siquiera seguían rendidos si estaban todos torcidos?

Miró otra vez pal piso y recordó vagamente que ahí también habían dormido Seonghwa y HongJoong, pero que los cojines y las sábanas ya estaban recogidos y puestos en su lugar, cosa que obviamente significaba que se habían levantado ya. De hecho, podía escuchar las voces que provenían de la cocina.
A ellos les había tocado dormir en la sala porque no podían dormir todos juntos en los cuartos de los muchachos, obviamente. No cabían.
En el cuarto de San habían dormido todos apachurrados él, WooYoung y JongHo, y en el cuarto de JongHo, habían dormido las muchachas, por qué ajá, no las iban a dejar compartir cuarto con ellos. Menos estando borrachos.

Que bolas. Pensó mientras se quitaba la pereza de encima y se paraba en dirección pa' la cocina, con menos ganas de vivir que la señal de cantv. A ellas les dieron un cuarto pa' ellas solas, y a él le había tocado dormir en un mueble junto a seis chamos más. Las ventajas de tener cuca y no guebo, que manguangua injusticia.

Cuando llegó pa' la cocina después de pasar por el baño pa' lavarse la jeta y la cara e' muerto que traía, se encontró con San, JongHo, SeongHwa y HongJoong. Al parecer gran parte de la gente seguía dormida todavía-y eso que eran las once de la mañan-. Andaban comiendo recalentado de hallaca con refresco.

-Marico me quiero es morir. -fue lo primerito que dijo mientras se sentaba al lado de JongHo y pegaba la cabeza contra la mesa. Escuchó a HongJoong reírse y lo hizo pararse para tomarse una acetaminofén y un juguito de naranja junto a su respectiva hallaca recalentada.
Tan bello él, cuidando se sus criaturas.

-Normal, con la pea que te metiste. Nojoda, eso parecía que estabas viendo al pájaro-Chávez. -San se rió mientras lavaba los platos. Los cacheticos se le colorearon a YeoSang.

Que pena vale.

-En realidad, no lo dejé pasar de tres vasos. -JongHo mencionó mientras se paraba de su lado y le encasquetaba el vaso y el plato sucio a San para que lo lavara. El primo lo miró mal enseguida, pero igual se resignó a lavar.

-ah, coño.

-Sí, "ah, coño". Desde ahora vamos a esconder el ron con Coca-Cola de ti pana, es un peligro potencial para tu persona. -SeongHwa se llevó el vaso con refresco a los labios y tragó. -Te latiaste hasta a SiYeon pana.