Cuando dos mundos iguales chocan.

Capitulo 05

-Ya está; no vuelvas a raptarme ni nada de eso -resoplo y salgo de aquel departamento en el que estaba con Scott.
Camino por el largo pasillo en busca de la salida.

-¡Waldorf! -grita Scott a mis espaldas, no me detengo.-¡Espera! -continuo caminado hasta que se posa en frente de mi y me detiene.
-¿Qué? -digo con fastidio.-Ya te han depositado lo que me pediste ahora déjame en paz- intentó seguir caminado pero esta vez me acorrala en la pared.
-Aún sigo duro -coloca una mano en su miembro y lucho contra las ganas de no bajar la mirada y ver su erección.
-Existen putas, revistas, películas y fotos porno, tu puedes atenderte sólo.
-Pero yo quiero darte durísimo -dice sonriéndome de lado.

Hijo de puta. Me pone.
Siento mi vagina palpitar.

-Viéndolo bien, creo que tienes razón... Tenemos algo pendiente.

Sin más que decir comenzamos a besarnos de una manera salvaje. El agarra mi trasero y lo aprieta. Mmm, es tan excitante.
Se separa de mi.
-Vamos al cuarto, aquí nos verán-dice sin aliento cerca de mis labios. Desaparezco la distancia y vuelvo a besarlo. Caminamos a tropezones y llegamos hasta la puerta del departamento.
Mi espalda choca contra la puerta, busco la perilla aún besando a Scott y ambos entramos una vez que abro.
El cierra la puerta de una patada. Me avienta suavemente en la cama. Se quita la playera negra que lleva puesta y me quedo mirando su cuerpo, muerdo mi labio por instinto; A continuación, Scott se quita los tejanos que lleva junto con las Vans y sólo se queda en bóxer, su pene pide salir ya que está demasiado grande y la tela del bóxer lo aprieta.

-Te toca -dice con referencia a mi ropa.

Me levanto de la cama y ahora lo aviento a el. Pone sus brazos por debajo de la cabeza y me mira con atención.
Me deshago de la blusa que llevo puesta, bajo mi short y me lo quito junto con mis tenis.
Le sonrió con provocación y me lanzo a el. No lo beso.
-Ese conjunto que traes hace que te veas realmente caliente -dice y se muerde el labio.
Lo miro con los labios entreabiertos.
Bajo mi mano hasta su erección y se la aprieto, gime ahogadamente.
Volvemos a besarnos y siento sus manos por mi espalda tratando de quitarme el brasiere.
Me separo de el y niego con la cabeza y mi dedo, pego mi lengua en el paladar haciendo unos sonidos de desaprobación.
Le doy la espalda y desabrocho mi brasiere, cubro mis senos con el brazo izquierdo y vuelvo a darme la vuelta para míralo.
-Déjame ver -dice mientras acerca su mano y trata de quitar ni brazo, enseguida le doy un manotazo.
-No. Quítate el bóxer. -le ordeno.

No rechista y hace lo que le pido dejando libre su enorme pene.

Lo veo con deseo.

Lentamente me descubro los senos y el los mira.
Arqueó la espalda, ofreciéndoselos. El me da la vuelta y queda encima de mi, yo acostada.
Besa mis labios mientras con una de sus manos masajea mi pecho izquierdo.
Baja sus besos por mi cuello y así hasta llegar a mi pezón que comienza a chupar, me retuerzo de placer.
Mientras el juega con mis senos, bajo mi mano y agarro su pene el cual comienzo masturba.
Scott suelta mis pechos y se concentra en mi mano.
Desenvuelvo su pene el me mira y sin previo aviso me rompe las bragas y me penetra duramente, grito por la sorpresa.
Comienza a moverse velozmente y con fuerza.
Suelto un gemido y entierro mis uñas en su espalda.
Continúa penetrando 1, 2, 3, 4, 5, 6 veces más.
Enrollo mis piernas alrededor de su cintura y hago que se hunda más en mi. Eso hace y continúa con sus envestidas.

-¡Dios! -chillo de placer.

Scott gruñe un par de veces.

-Dime que aún no estás cerca -súplica y penetra una vez más. Se detiene.

-Todavía me falta -me meneo para que siga bombardeando.

Sale sin previo aviso de mi.
Se acuesta a mi lado y ahora yo me siento sobre el.
Me hundo en su pene y ambos gemimos.
Me muevo lentamente hacía atrás y adelante.
Scott se desliza como puede en la cama y se levanta conmigo. Me pega a la pared y ahí me sostiene.

-Está es la última, así que prepárate, amor -besa mis labios y me penetra muchísimas veces con salvajismo.
Siento el sudor en mi frente.

-Vamos, déjate ir, hazme saber que te ah gustado.

Penetrandome aún, me recuesta sobre una mesa, sube mis piernas a sus hombros y con más facilidad me embiste.
Siento un espamo, estoy demasiado cerca.
Va bajando la velocidad y ahora sólo mete su pene duramente en mi vagina.
Suelta un gruñido demasiado sexy y siento su esperma dentro de mi.
Me libero y junto con el, me corro.

Ambos estamos acostado en la cama, desnudos y exhaustos.

-Podría hacerlo otra vez contigo -dice con cierto tono de asombro y satisfacción. Sonrío.
-Scott, lo hemos hecho 3 veces en menos de 12 horas.
-Disfruto tanto del sexo salvaje. -murmura.
-No eres el único, colega. -me levanto de la cama y busco mi ropa para poder cambiarme.
Mi padre ya debe estar en casa. Me espera una jodida...

Me pongo la ropa con rapidez, me acerco a Scott que no hay dejado de mirarme, me recargo en su entrepierna (muy cerca de su pene) y susurro en su oído:
-Búscame para hacer más de esto. -muerdo su oreja, luego beso sus labios por un rato. -Te veo luego -bajo mi mirada a su exquisito pene el cual ya volvió a crecer, bajo hasta el y chupo un poco la cabecita. Lo saco de mi boca.
-Exquisito -digo son aliento y me voy de aquel departamento.

Llego a mi casa después de una hora.
Entro con sumo silencio para que mi padre no escuche.
Son cerca de las 10 de la noche.
Subo hasta mi habitación y estando allí me acuesto en mi cama donde duermo totalmente rendida por tanto sexo.

-Jovencita, despierta -siento tambaleos.
Me despierto pero no abro los ojos, sólo los tallo. Me estiro y por fin mis ojos deciden abrirse, la luz mañanera me sega un poco.
Miro hacia arriba y me encuentro con el rostro de mi padre. Está molesto, puedo notarlo en sus ojos.
-¿Se puede saber donde carajos estuviste ayer? -cuestiona controlando su enojo.
-Con... ¿Kira? Eh, si con ella -sonrió con nerviosismo.
-Vale y ¿porque estas nerviosa? -levanta una de sus cejas.
-No creo que te afecte en nada.-alzo los hombros con indiferencia y me levanto de la cama para bañarme.
El sale de mi habitación sin más que decir.. Ay, es un amor.

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Chicas, disculpen si hay algo incoherente o si hay faltas de ortografía pero escribí esto a las 3 de la madrugada ya que iba a salir de viaje (sólo hoy)
Espero les guste el capítulo.
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Bye!