- ¿me acompañas o no? -pregunto a Kira por teléfono ya que se está negando.
-Dorian, ya te dije que tengo sueño -se queja
-Entonces no cuentes con que te invitare -respondo de mala gana y cuelgo.
Realmente solo bromeaba, es obvio que invitare a Kira pero me caga que no me acompañe ¿Cómo pretende que yo sola escoja todo?
Salgo de mi casa y subo en mi convertible para ir a una licorería y comprar todo tipo de bebida para esta noche.
Por los invitados no estoy preocupada.
Esta mañana me encontré con un desconocido y le dije que pasara la voz de que habrá tres días seguidos de fiesta.
Espero llegue mucha gente.
Me estaciono afuera de una licorería y entro a esta.
- ¿Qué va a llevar? -me pregunta un señor moreno con tatuajes y medio calvo.
-Deme lo que sea bueno para una fiesta, es decir, que este rico, que te rompa las neuronas del cerebro y, que haga que no recuerdes nada al día siguiente -pido con una sonrisa.
-Está bien -se gira y se mete a un cuarto que está cerrado.
Espero un par de minutos y el hombre llega con una caja, la abre y saca una botella azul.
La abre y vierte un poco en un vaso. Me entrega el vaso y bebo un poco de este.
Trago la bebida que es del mismo color que la botella solo que más transparente. Comienza a quemarme la garganta por lo que escupo enseguida.
- ¿Qué mierda es eso? -digo forzando mi voz. Agarro mi cuello y lo sobo.
-Al momento sabe así, pero luego le sabrá a gloria.
Y tiene razón, ya no hay rastros de dolor en mi garganta y ahora sabe a menta. Trueno la lengua contra mi paladar para poder saborearlo más.
- ¿Cómo se llama? -Agarro la botella y miro la etiqueta.
-Se llama Beauty of beats -me dice el hombre.
-Vale, me llevo quince cajas -dejo la botella en la mesa.
- ¿No le importa el precio? -pregunta impresionado por la cantidad de cajas que eh pedido.
- ¿No te importa ganar dinero? -respondo con otra pregunta, pongo los ojos en blanco y me giro.
El hombre mete las quince cajas en la cajuela de mi convertible, entro al asiento del conductor y me pongo mis gafas de sol.
-Regresare -aviso y salgo de mi estacionamiento para ir al centro comercial y comprar botanas y ese tipo de cosas.
Salgo del baño después de haberme dado una ducha. Miro el reloj. 20:12. En dos horas comenzara el reventón y aun no estoy lista.
Camino hasta mi closet y saco mi outfit de la noche: un short de cuero negro, una playera holgada con un esqueleto de estampado y unos botines tipo militar negros.
Me cepillo el cabello y lo plancho de modo a que llegue hasta mi cintura. Me maquillo un poco extravagante como colores oscuros, claro, a excepción de mis labios que están de rojo mata pasiones.
Me pongo mi ropa y salgo de mi habitación cerrándola bien con llave, luego camino a la habitación de enfrente y hago lo mismo.
Que se metan donde quieran pero en estas dos habitaciones, no, son sagradas.
Bajo las escaleras y veo el reloj que está en la entrada. 21:45. En quince minutos comenzaran a llegar las personas.
Estoy por ir a la cocina para ver que falta pero empieza a sonar el timbre con desesperación y mucho ruido afuera. Bien, creo que esto comenzara antes. ¿Para qué hacerlos esperar? Voy a la puerta y la abro.
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Cuando dos mundos iguales chocan.
Fiksi RemajaElla era una chica problemática, donde problemas había, siempre estaba ella. "Drogas, faje, alcohol" Eran sinónimos de su nombre. Había estado muchísimas veces en la cárcel, los oficiales de policía conocían todo sobre ella. Kira, su mejor amiga...