Pʟᴜᴠɪᴏғɪʟɪᴀ || Sano Manjiro [Bonten]

•7•

Pov's Ame

Los primeros rayos de luz del día atravesaron la ventana de mi habitación.

Estábamos en esa época en la que amanecía más temprano, por lo que calculé que eran más o menos las seis y media.

Para algunas personas les daría pereza levantarse a esta hora, en cambio a mí no me molestaba.
Después de todo era eso o quedarme todo el día mirando el techo, porque por más que quisiera e intentara dormir, no lo conseguiría.

Hoy era martes así que tenía que ducharme y prepararme para estar lista a las 10, pues a esa hora Hiroto me recogería.

Salí del baño con una bata y llegué a aquella habitación que había como vestidor.

Anteriormente le dije a Hiroto que me trajera mi ropa, pues al decirle a Mikey de irme este se negó, así que no tendría más remedio que quedarme aquí.

De todas formas me daba igual, haría lo mismo que antes solo que viviendo en otro sitio.

Me puse una camisa blanca entreabierta, pero sin llegar a dejar ver mi pecho, un traje negro no muy formal y unas botas estilo militar del mismo color.

Respecto a accesorios algunos collares de plata y algunos anillos en mis manos.
Como pulsera llevaba una con una fina con una cruz, esa siempre la llevaba.

No me molesté en peinar mi cabello, pues era corto, pero le dí volumen para que no quedara tan lacio.

De maquillaje solo utilicé un eyeliner y un poco de labial claro mate.

No me gustaba usar base ni taparme mis ojeras, pues no tenía interés en tapar mis defectos.

Bajé al salón pasando antes por la cocina para tomar un plátano y una manzana para tomar como desayuno, no era una persona que solía llevar muy bien su alimentación pero de todas formas me daba igual.

Pensé que no habría nadie en el salón pero allí estaban todos vestidos con un traje formal, incluso Mikey, quien podría deducir que no era una persona que utilizara traje a menudo.

Ellos me miraron al escuchar mis pasos.

— Pensé que estarían trabajando — dije mientras me sentaba al lado del jefe, quien parecía estar un poco perdido.

— Te acompañaremos a esa reunión, y si hace falta matamos al tío ese — explicó Sanzu mientras mantenía su pistola en la mano y se auto apuntaba a la cabeza haciendo como si se disparara.

— Me da igual que me acompañen, pero no matarán a ese policía a menos que yo quiera — terminé por decir y dirigí mi vista al peli blanco a mi lado — Come esto — le ofrecí la manzana que anteriormente había cogido.

No tenía sentido que le obligara a comer cuando yo a veces ni lo hacía, pero bueno, supongo que simplemente me preocupa un poco.

Él me miró extrañado.

Yo saqué un cuchillo que llevaba atado en la parte inferior de la pierna y comencé a pelar la manzana.

Una vez terminé corté un trozo y le dí un mordisco para después acercarle la otra parte que no había mordido a la boca.

— Tienes que alimentarte si no quieres desmayarte — le acerqué el trozo más pero el seguía sin agarrarlo — Oh~ vamos, ¿quieres que te dé de comer como a los pollitos? — pregunté con burla y reí levemente, pero me quedé a cuadros cuando ví que asentía — No eres un pollito, ya estás grande.

Era una persona que no le solía importar nada, pero en este momento tenía tres opciones, hacer lo que quería, obligarlo a comer o comerme la manzana yo.

Normalmente hubiera elegido la última opción, pero no se que me pasaba últimamente que este chico me resultaba alguien importante para mí. Supongo que porque era muy parecido a mí, así que podría considerarlo como un hermano, aunque me resultaba extraño verlo de ese modo.

Puse un trozo de manzana en mi boca y le hice un gesto de que mordiera la otra parte.

Cuando iba a rozar mis labios partí el trozo.

— No tan rápido bonito, hace falta mucho para que tú logres besarme — le dí un toque en la nariz.

Él me miró enojado pero terminó de comer la manzana en silencio.

Yo en cambio tomé el plátano para comerlo.

Pasó un rato en el que yo me dediqué a dibujar en una hoja de papel que le quité a Koko de un cuaderno que tenía.

Comencé a dibujar a Manjiro.

Terminé de dibujarlo y le pasé el dibujo.

— Para tí — se lo tendí y este lo agarró para verlo.

— Se ve lindo — dijo pero aún así su semblante no cambió, pero si te fijabas bien tenía una mini sonrisa.

— No sabía que dibujabas tan bien, Ame — Kakucho observó el dibujo y depués los demás también, recibiendo algún que otro halago de ellos.

La puerta sonó, por lo que rápidamente supuse que se trataba de Hiroto.

Caminé sin prisa hacia la puerta y allí ví a Hiroto, quien nada más verme se lanzó a abrazarme.

— No me abraces, mocoso — lo separé bruscamente y le dí un golpe en la cabeza.

— Auch, eres muy bruta Ojou~ — lloriqueó mientras se sobaba la cabeza.

Hiroto era un chico de 22 años que desde sus 17 años había estado al lado mía, era por así decirlo como Sanzu con Mikey. Tenía una personalidad infantil, pero seria cuando se trataba de temas de seriedad. Era cinco años menor que yo, lo consideraba como un hermano pequeño, pero a veces me sacaba de quicio.

Espero que les haya gustado este capítulo.

Llevaba ya mucho tiempo sin actualizar en esta historia, lamento eso.

La ropa de la imagen de multimedia es la que imaginé que llevaba, ustedes pueden imaginarla como quieran :>

Muchas gracias por leer, votar y comentar <3