↳ Nine

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Al otro día, al despertar, las plantas ya no eran verdes, ya no estaba esa selva abundante que había visto aparecer, ahora todo estaba seco y negro, como si un incendio hubiera pasado.

Ambos se miraron con algo de incógnita, fue ____ quien se separó de las manos que siempre tenían unidas y fue hasta el cristal, viendo las plantas que tanto disfrutaba con vida ahora muertas.

Su mano de alzó frente al cristal, golpeando el vidrio con un dedo, nada pasó.

— ¿Qué ocurrió? —  murmuró _____.

Aidan miro alrededor, se sintió terrible que las plantas estuvieran muertas, y aún peor de no saber el porqué.

— ¿Es una señal?—  preguntó ___, su ceño se frunció— ¿Y...Si nosotros seguiremos?

— No — Aidan hablo en tono contundente— . No, _____, no voy a permitirlo.— se acercó a ella, colocando una mano en su cintura, acercándose a su rostro, dejando que la menor se concentrara en sus ojos como siempre, hasta estar más tranquila.

____ miró un momento los labios del mayor, y lo pensó un segundo, antes de alzar la vista de nuevo y posar sus labios sobre la de nariz de _____, en un diminuto beso.

—¿Te estás acercando de apoco?— preguntó Aidan, con algo de burla.

_____ nego, con una sonrisa.

— Como tecnicamente no lo recuerdo... Sería mi primer beso y quiero esperar un poco más...

Aidan asintió, con una mueca en sus labios.

— Sería una pena si lo robo.—  murmuró, recibió un golpe en el pecho de parte de la menor, haciéndolo reír.

— Tonto

Y ningúno le presento atención a las plantas mientras estas se deshacían en polvo, dejándolos con la misma cada nada que habían tenido desde el principio.



Lovely || Aidɑn GɑllɑgherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora