Diario de una adolescente

Capítulo 6.

"Cause baby running down to the riptide, taken away to the dark side, I'm gonna be your left hand men.."

Mientras me iba acercando a Charlie en mi cabeza sólo sonaba esta canción, realmente no sé por qué la voy cantando en mi interior, supongo que será porque es mi canción preferida.

Cada vez que me iba acercando más y más a él, me quedaba más alucinada de lo guapo que está. Increíble.

Soy demasiado tímida, así que todavía no había llegado y ya estaba pensando en lo que le iba a decir. Llegó el momento.

- Hola Charlie! - Le dije con una sonrisa.
-Hola preciosa.

Madre mía el chico más guapo del instituto me acaba de llamar preciosa. Supongo que se lo dice a todas, no me voy a dejar enganchar por un chico como él, que deja a Ali por otra persona, no me va. A mí si me quiere que luche por mí, como se hacía antes. Mis pensamientos van demasiado rápido, ¿Quién ha hablado de querer?, será mejor que conteste antes de que el chico se asuste por todas las cosas que estoy pensando en milésimas de segundo.

Pero se me adelante y no me da tiempo a responder.

- Te he traído algo. - Y me da el ramo de rosas rojas, que huelen tan bien, y están tan bonitas, deben haberle costado bastante dinero, pero como le sobra, pues no creo que le haya importado mucho, pero el detalle es lo que cuenta y él lo ha tenido.

- ¡Vaya!, no me lo esperaba para nada pero muchas gracias...- Me lamentó en mi interior de ser tan estúpida y mi mente me vuelve a decir, que como te lo ibas a esperar, si no lo sabías. Cada vez que suelto una palabra más, más cosas digo de las que no debo. Esta vez si me dio tiempo a adelantarme a él.

- Charlie tenemos que hablar de lo sucedido y...- Me corta y dice:

- Te lo diré todo claro desde un primer momento, te diré lo que quieres escuchar, pero con una condición.

-¿Qué condición?- Le dije arrugando las cejas.

-Que no dirás nada, no me interrumpirás, dejarás que acabe, me iré y tu me escribes por Whatsapp lo que piensas, ¿Vale?.

Esta proposición me deja un poco alucinada, nunca me había pasado esto con nadie, este chico es medio raro, pero nada aceptaré, a ver si realmente me aclara lo que quiero saber.

- Vale acepto la condición.

- Todo empezó hace 3 años cuando vine por primera vez al instituto, no conocía a nadie, pero mis padres me obligaron a venir aquí porque decían que iba a ser mejor para mi futuro, mientras que todos mis amigos se quedarón todos juntos en otro instituto. El primer día recuerdo que entré y te vi de lejos, no conocía a nadie, pero me llamaste mucho la atención. Estaba en tu clase y en la de Alisson y tu amiga Steisy creo que se llama... Bueno pues no paraba de mirarte y siempre intentaba llamar tu atención pero estabas ensimismada en tus cosas. Así que busque la forma en la que pudieras hacerme caso, y la única forma era Alisson ya que discutías todos los días con ella. Y el otro día cuando salíamos de la clase de Historia, cuando llegaste tarde, me miraste, creo que te di un poco de pena por verme con Alisson, el hecho fue que me armé de valor para ir ponerte la carta. Dejé a Alisson porque ya es imposible sacarte de mi cabeza Rose...

Madre.

Del.

Amor.

Hermoso.

No me lo puedo creer, nunca se me habían declarado así. Este chico tiene algo especial, aunque no se si será verdad esto que está contando. Pero yo pienso que si realmente le gusto de esa forma no le importará luchar. Pero también pienso en Alisson, pobrecilla. Bueno no me da pena, mi madre siempre decía que si eres mala persona siempre te pasarán cosas malas, ahí hay un ejemplo. Y que lo mas importante en la vida es ser buena persona.

Me quedo perpleja mirándole y me dice:

- Ya sabes lo que debes hacer, espero haberte aclarado todo lo que necesitabas saber.- Y se marcha.

Me quedo ahí de pie como una tonta mirándo como se va, y en qué hacer, en cómo, en cuándo...

Me siento en el columpio con mi ramo de rosas rojas en las manos, me columpio despacio. Más que alegre parece que me acaban de dejar plantada en el altar. Debería ir a la habitación porque seguramente estará Steisy esperando a que yo llegue para hacerme el interrogatorio que me hace siempre. Y más si se trata de Charlie. El ex de Alisson.

De camino a casa voy pensando, pero no puedo sacar nada en claro. Como ese chico llevaba intentando llamar mi atención durante tres años, y yo ni si quiera sabía de su existencia. Ahora me siento mal. Soy demasiado insegura de mí misma. Creo que lo mejor será consultarlo con la almohada y con mi cama, madre mía como la deseo. Que vaya día he tenido la verdad.

Abro la habitación del cuarto y ahí esta Stei, en el escritorio, que se da la vuelta cuando me ve entrar por la puerta, y se le pone una cara de alucinada increíble al ver mi bonito ramo de rosas rojas.

- Hola.- Le digo ruborizada y con una sonrisilla.

Pero ya no puedo oír nada más debido a que empieza a gritar de la emoción... Vaya amiga ésta que tengo.