La confianza de Lisandro fue severamente arrebatada cuando su ex novio lo engañó con su hermano. Gracias a eso es demasiado desconfiado y le cuesta comenzar cualquier relación con algún otro hombre. Evita a su familia la mayor parte del tiempo para...
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Capitulo tres
Bariloche, Argentina.
Si Cristian estaba seguro de algo, era de que en esta vida jamás había nada demasiado fácil. Había sido correcto prometerle a Lisandro que todo saldría bien. Era natural tranquilizar a alguien. Pero nada era fácil en esta vida, menos aún un engaño de esta magnitud. Los Martinez eran buenas personas, al menos la mayoría. Nada más cinco minutos en la misma habitación, Cristian se dio cuenta de la verdadera naturaleza de Julián. Hasta los más sutiles gestos y movimientos eran para tener una ventaja sobre Lisandro. ¿Estaba exagerando? No, la verdad era que ahora comprendía todo el temor en Lisandro.
Julián no era buena persona y no era una exageración. Con un simple puchero se había asegurado que la señora Martinez le diera el último trozo de brownie que había sobrado del día anterior. Que cabía señalar que Lisandro ni siquiera había probado. Y él por su parte, simplemente había sonreído y asegurado que no había problema. Al parecer esta situación había sido así por años. Era una rutina que la misma familia desconocía. Julián era consentido, arrogante, mimado y la familia se lo permitía.
A Cristian ahora no le extrañaba para nada que Lisandro hubiera hecho lo que hizo. Tal vez la familia simplemente estaba acostumbrado a esta situación. Pero él que no era parte de esta extraña relación familiar. Le resultaba más que obvio la actitud del hombre, más aún, dado que el hombre no tenía ningún problema en coquetear con él delante de todos los demás y para la familia resultaba de lo más normal. Cristian tenía malas experiencias con ese tipo de acosos, tenía que recordar que tenía un problema similar en Buenos Aires y no iba a permitir que acá también sucediera.
Era más que claro que Julián estaba celoso de alguna manera de su hermano, sin embargo, ¿por qué? Es lo que no llegaba a comprender, después de todo fue él quien le robo la pareja a Lisandro.
Enzo era otro maldito problema, no habían cruzado palabra en realidad, a pesar de eso, Lisandro era muy consciente de las miradas pesadas por parte del otro hombre, ¿Cuál era su maldito problema? porque estaba seguro de que su odio contra él no era por los contantes coqueteos de Julián. Esto era más allá. ¿Estaría celoso porque Lisandro ahora tenía pareja? Por supuesto que sí. Romero estaba seguro de que el matrimonio de estos dos no era tan feliz como aparentaban ser.
Julián y Lisandro ahora eran pareja ¿por qué seguían queriendo fastidiar a Lisandro? Ahora comprendía porqué el hombre recurrió a contratar a alguien que se hiciera pasar por su novio, era más como un escudo y Cristian estaba muy comprometido con ésto. Si era lo que Lisandro necesita Cristian estaría acá para eso. No sabía porqué se sentía de esta manera tan sobreprotectora por el otro hombre, apenas y lo conocía, pero ahora esta situación ya se estaba tornando de manera personal.
