Lloviznaba.Comenzaba a oscurecer, cuando mis clases de dibujo habían terminado. Caminaba a casa con una carpeta llena de dibujos en manos. Miraba con la vista agacha, siempre lo hacía. Distraida y ausente. Llevaba puestos los audifonos al maximo.
Caminaba distraida.
Alguien que iba en sentido contrario tropezo conmigo, tirando la carpeta al suelo humedo, los dibujos salieron volando exparciendose por toda la calle.
¿¡es que acaso la gente no puede fijarse por dónde camina!?, carajo
Me apresure a levantarlos, al parecer la persona con la que habia tropezado se dignó y me ayudó a levantar los dibujos muy deprisa.
Al alzar la mirada me di cuenta, que con la persona que habia tropezado era Theodore.
Él es mi amor platónico desdé comenzamos la preparatoria.Al mirarlo me percaté que recogia los dibujos con asombro.
Sentía miedo, pero tambien alegria.
El chico que me gustaba desde hace un par de años, estaba ahí, recogiendo mis dibujos. Frente a mi.
¡rayos, tengo que decir algo!
Me armé de valor y hable.
- ¡Hey! -Grite con voz seria-.
El volteó, al verme sonrió con un poco de tristeza, se puso de pié y me tendio los dibujos.
-Lo lamento- dijo con tono preocupado.
- No te preo... -Theodore me interrumpió-.
-Son muy lidos, en serio lamento haberlos destruido- Dijo con la vista clavada en los dibujos-.
Esboze una sonrisa, no sabía que hacer. Mi trabajo por meses había sido destruido en un instante.
El momento se tornó incómodo pues ninguno de los dos habló más, en ese momento mire mi reloj, marcaba 8:30 PM. Ya era tarde, tenia que irme. Al alzar la mirada Damon me miraba fijamente.
Agache la mirada.-M...me tengo q...que ir- dije notoriamente nerviosa, con las mejillas sonrojadas-.
Sin tiempo de que Damon dijera algo, me heche a correr. Damon me vio desaparecer entre la gente y siguio su camino.