2. La misma luz

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Eran las diez de la noche y la pastelería había cerrado al público. Tom y su esposa Sabine, Luka, Alya y Nino se encontraban reunidos en la sala de estar con el teléfono en la mano tratando de localizar a Marinette.

Desde que salió a hacer aquella entrega a la casa de los Tsurugi, no había regresado. Horas antes salieron a buscarle por los alrededores con ayuda de sus viejos amigos; no encontraron rastro.

—Suficiente, daré aviso a la policía —dijo Sabine ya sin poder guardar la calma.

De repente se escuchó un portazo. Ahí en la entrada estaba Marinette. Alzó la cara y al ver a Luka se arrojó a sus brazos llorando desconsoladamente.

—¿Qué sucedió, Marinette? ¿Por qué no contestabas el teléfono? ¿Dónde estabas? —tomó el rostro de la chica entre sus manos escaneándolo para encontrar alguna respuesta.

Marinette se privó del llanto, estaba en shock, en una lucha por querer expresar lo que había vivido, pero aquello le superaba.

—Oh Mari —musitó Alya con la voz quebrada. Se acercó a ella y le sujetó las manos para tranquilizarla. Su amiga seguía ahogándose en sus lágrimas.

La puerta se abrió de súbito. Lila Rossi, antigua compañera de clase de los chicos ahí reunidos, entró abrigada con una chaqueta impermeable. Caminó hasta Marinette, la giró hacia ella y le profirió una bofetada que hasta la mejilla le dejó marcada.

—¡Lila! —gritaron todos al unísono claramente molestos y confundidos.

—¡Sólo así iba a reaccionar! —la castaña señaló a Marinette quien inhaló profundamente, como si hubiera estado mucho tiempo bajo el agua aguantando la respiración. Lila, por su parte, se cruzó de brazos de forma despreocupada.

—Marinette, por favor —rogó Luka al borde de la frustración.

—Adrien... Mi Adrien sigue vivo, Luka... Yo lo vi, es él, está vivo, yo lo conozco y es él. Está vivo, pero no sabe quién soy, no me conoce. Félix, dice que se llama Félix pero es mi Adrien, es él. Luka... Ayúdame a regresar, es mi Adrien —los ojos se le salían de órbita. Zarandeó una y otra vez el brazo de su amigo a la par que explicaba lo que pasó.

—¿Escuchaste lo que dijo? —le preguntó Nino a Alya, murmurando, llevándola a un rincón, apartados del resto —acaba de ver a Adrien— resaltó lo estúpido que se escuchaba.

—Sabes perfectamente que cree verlo en todos lados —comentó Alya con nerviosismo— Hoy pudo ser uno de esos tantos días.

—Marinette sabe diferenciar entre una ilusión y la realidad, Alya —masculló Tom, consiguió escucharlos y los observó con dolor por insinuar que su hija estaba perdiendo la cordura— Y no creo que se deba al estrés.

La pareja se miró entre sí con vergüenza debido a su falta de discreción.

—Juro que le vi —musitó Marinette— un auto iba arrollarme pero él me salvó.

—Esto es demasiado —se quejó Lila en voz alta.

—No sé qué haces aquí, nadie te invito ni te está pidiendo quedarte —escupió Luka.

—Por si no lo sabias yo traje a Marinette hasta acá.

—Muchas gracias. Ya puedes irte —replicó Luka con aspereza.

—Fui yo quien por poco la arrolla con el auto —levantó el mentón y observó al músico desde arriba con evidente recelo— Marinette no miente, el chico era idéntico a Adrien. Dije que era demasiado porque no tienes idea de lo que fue estar ahí y presenciarlo con tus propios ojos.

—Y ¿Por qué hasta ahora llegan? ¿No se te ocurrió avisar a sus padres? —preguntó Luka.

—Marinette quiso ir a la mansión Agreste. Gabriel la recibió a regañadientes, le contó todo pero la tomó de a loca y tampoco creyó en mi palabra. Lo compadezco, nadie aparece para decirte que tu hijo único que falleció hace cinco años, sigue con vida —la castaña guardó silencio, se secó una lagrima que recorrió su mejilla sin darse cuenta.

—¿Aseguras que Adrien sigue vivo? —se atrevió a preguntar Nino. 

—No sé y no me preguntes. De lo único que estoy segura es que ese chico era igual a él —informó Lila.

Luka creyó conveniente alejar a Marinette de todo el bullicio que contenía un montón de preguntas sobre lo ocurrido. La acompañó a su habitación. La animó a recostarse y descansar, él se quedó de pie en la escalera que conducía a su cama.

—¿Me estoy volviendo loca? —sollozó abrazando su almohada en forma de gato.

—Claro que no, No digas eso.

—¿Por qué Gabriel me ignoró? te juro que era él, era Adrien, yo nunca mentiría sobre algo así.

—Francamente no lo sé, pero prometo que te ayudaré a resolver todo esto. 

Marinette suspiró al tiempo que se apoyaba sobre los codos para verle mejor.

—¿Por qué no me enamoré de ti, Luka? ¿Por qué elegí a Adrien? ¿Él estuviera vivo si tú y yo estuviésemos juntos?

El músico esbozó media sonrisa.

—Tengo la certeza de que si tuvieras la oportunidad de regresar el tiempo, le escogerías nuevamente a él.



N/A: lol, un capítulo de 800 palabras JAJAJAJ okya. me da nostalgia we, recuerdo que estaba super emocionada escribiendo esto en el 2016, con lovg de fondo y obviamente el soundtrack de violetta y soy luna. porque sí, el fic original es un crossover de esas series. 

ay, qué tiempos :')

Por hoy lo dejo hasta aquí. Nos leemos pronto!

PD: desde ya se aceptan teorías ;)


Calling Out Your Name [Miraculous LB AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora