Después de los eventos de Civil War, Black Widow huye junto a Scarlet Wich y la aprendiz de Clint Barton, la chica llamada Lady Hawkeye, las tres emprenden una huida para no ser detenidas por el General Ross.
Aunque sin saberlo, una peligrosa conspi...
-¿A dónde vas?-. Pregunté tallando un poco mis ojos.
-Iré a entrenar con Scott, él dice que quiere vencerme una vez más antes de que pase lo de esta tarde-. Murmuró Kate con una sonrisa ladeada, colocandose una sudadera.
-¿Y te bañaste para eso? Vas a sudar de nuevo-. Le dije acomodando mejor las sábanas.
-Si, ¿A caso querías que oliera a sexo? Ellos lo sabrán-. Dijo lanzandome un guiño y yo solo la mire para después reír.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Claro, sabrán que tuviste sexo madrugador solo por qué tu solita te delatas, ¿Dónde quedó todo lo que te he enseñado de ser espía?-. Pregunté colocando mi brazo derecho debajo de mi cabeza.
-Es demasiado temprano como para pensar en esas cosas-. Murmuró para luego subirse en la cama y besar mi frente, mejillas y mentón.
-Si, si, ya lárgate, mujer abandona novias-. Le dije empujandola un poco y haciéndola reír.
-Jamas te dejaría, el hechizo que hice que Wanda te hiciera me costó mucho dinero, te veo al rato amor de mi vida-. Dijo levantándose rápidamente de la cama lanzandome un beso.
-Yo también te amo flechitas-. Le dije con burla para después verla hacer puchero e irse.
Suspiré en la cama mírando el ventanal, ah... ¿Qué se supone que haga ahora? Es demasiado temprano como para hacer algo y además Natasha no está por qué fue a algún lado que ya no recuerdo donde, aunque vendrá más al rato, mamá Melina está con Jean en alguna parte del laboratorio, Alexei se había quedado con las viudas en Rusia, mi mamá Veronika anda de luna de miel en Francia, suspiré de nuevo cuando un recuerdo en particular llegó a mi mente, últimamente ando muy sentimental, además de que hoy sería un día importante.
-Vamos Yelena, no seas cobarde, ¿Cómo puedes matar tan fácil pero esto te aterroriza? No es como si dijera que no... ¿Verdad?-. Murmuré caminando de un lado a otro dentro de la habitación.
-¡Lo tengo! Tuve que comprar uno con muchos chocolates, ya sabes para mí Wanda... Mira, ¿Te gusta?-. Preguntó Natasha entrando a la habitación a paso rápido para luego mostrar el ramo que tenía en su mano derecha.
-Es hermoso sestra, como lo había imaginado-. Dije con emoción mirándolo para luego mirar a mi hermana que sonrió.
-Si, tus especificaciones fueron muy claras pero yo le hubiera puesto unas negras, se ven geniales pero esto... Es más tú-. Dijo con seguridad palmeando mi hombro para luego darme mi ramo.
-¿De verdad le regalaste flores negras a Wanda?-. Pregunté acariciando con delicadeza mi ramo para luego dejarlo en la mesa.
-Claro, ¿Por qué no lo haría? Wanda me ama tal cual soy, así que... Y tú no te pongas más nerviosa, Kate no te dirá que no, además tengo entendido que le dices tú novia y no se aquejado-. Dijo la prelirroja encogiendose de hombros para luego quitarle un chocolate del ramo que ella traía.
